La OMS, entre dos aguas: gestionar la alerta de la ¨®micron y evitar estigmatizar a los pa¨ªses que detectan nuevas variantes
El organismo sanitario alerta de que el riesgo global de la nueva versi¨®n del virus ¡°se eval¨²a como muy alto¡±
La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) mantiene la alerta sobre la nueva variante del coronavirus ¨®micron, detectada en Sud¨¢frica hace unos d¨ªas. La comunidad cient¨ªfica todav¨ªa no tiene la certeza de que esta versi¨®n del virus sea m¨¢s transmisible y escape a las vacunas, pero los primeros indicios han encendido las alarmas de la OMS, que este lunes ha advertido en un documento t¨¦cnico de que el riesgo global de la ¨®micron ¡°se eval¨²a como muy alto¡± y ha pedido extremar las precauciones. Aunque, eso s¨ª, sin estigmatizar a los pa¨ªses que han descubierto la nueva variante. El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha insistido este lunes en que a Sud¨¢frica ¡°deber¨ªa agradec¨¦rsele y no penalizarla¡± por este hallazgo. Parte de Europa, Australia, Marruecos y Estados Unidos, entre otros, ya han cerrado fronteras con varios pa¨ªses del sur de ?frica para evitar que la ¨®micron se cuele en su territorio. Pero, por ahora, ya son al menos nueve los pa¨ªses europeos ¡ªEspa?a incluida¡ª que la han detectado.
La OMS baila entre dos aguas: por un lado, mantener la alerta del potencial peligro que supone esta nueva variante y, a la vez, evitar que se desincentive la b¨²squeda de nuevas versiones del virus por las medidas que ejercen el resto de pa¨ªses para protegerse a s¨ª mismos. Todo ello, en un engranaje internacional donde su capacidad operativa es limitada ¡ªno puede intervenir en la soberan¨ªa nacional de los 194 pa¨ªses miembros¡ª y tampoco hay directrices comunes a nivel global. Cada pa¨ªs manda en lo suyo. Pero el coronavirus no entiende de fronteras, ha recordado el director de la OMS: ¡°Aunque en otras regiones se observan tendencias estables o en declive, si hay algo que hemos aprendido es que ninguna regi¨®n, ning¨²n pa¨ªs, ninguna comunidad ni ning¨²n individuo est¨¢ a salvo hasta que todos estemos a salvo¡±.
Sud¨¢frica notific¨® a la OMS la detecci¨®n de la nueva variante el pasado 24 de noviembre y, en apenas dos d¨ªas, el Grupo T¨¦cnico Asesor sobre la Evoluci¨®n del Virus del Sars-CoV-2 (TAG-VE), un equipo independiente de expertos que monitoriza y eval¨²a peri¨®dicamente la evoluci¨®n del virus y sus mutaciones, recomend¨® catalogarla como variante de preocupaci¨®n. Esto es, que tiene un riesgo para la salud p¨²blica mundial porque puede suponer un aumento de la transmisibilidad, un incremento de la virulencia o sortear el efecto de las medidas de protecci¨®n, como las vacunas.
Para Daniel L¨®pez-Acu?a, exdirector de Emergencias de la OMS, la actuaci¨®n de Sud¨¢frica y del organismo sanitario internacional ha sido la adecuada: ¡°Sud¨¢frica y la OMS han hecho lo que correspond¨ªa con transparencia y celeridad. La OMS ha lanzado una alerta, no ha alarmado con p¨¢nico ni paranoia. El problema est¨¢ en que con esa informaci¨®n ha venido la bunkerizaci¨®n de los pa¨ªses, que han optado por aislar a Sud¨¢frica, pero no con un sentido de salud p¨²blica, sino casi paranoico y pol¨ªtico, para hacer ver que hacen algo¡±. El especialista insiste en que el cierre de fronteras no tiene sentido porque la variante ya est¨¢ en Europa ¡ªReino Unido, Portugal, B¨¦lgica y Pa¨ªses Bajos, entre otros, han confirmado casos¡ª. ¡°Para frenar la variante, menos reducci¨®n de vuelos y m¨¢s medidas de protecci¨®n y vigilancia dentro de los pa¨ªses. No se puede estigmatizar a Sud¨¢frica. Las variantes van surgiendo y mientras no controlemos la incidencia y aumentemos la vacunaci¨®n, seguir¨¢n apareciendo¡±, zanja L¨®pez-Acu?a.
El cierre de fronteras como respuesta a la aparici¨®n de la ¨®micron tambi¨¦n ha despertado la preocupaci¨®n de la OMS. Precisamente, este lunes, en el marco de una asamblea extraordinaria del organismo sanitario para negociar un tratado de preparaci¨®n de pandemias, Tedros ha lamentado: ¡°La variante ¨®micron demuestra por qu¨¦ el mundo necesita un nuevo acuerdo sobre pandemias: nuestro sistema actual desincentiva a los pa¨ªses de alertar a otros sobre amenazas que inevitablemente aterrizar¨¢n en sus costas¡±.
La OMS est¨¢ a merced de los pa¨ªses y su margen de maniobra es muy limitado. Puede alertar y recomendar, pero no ordenar, explicaba hace unas semanas a EL PA?S el director regional de la OMS para Europa, Hans Kluge, a prop¨®sito de las cr¨ªticas que recibi¨® el ente internacional por su papel en la investigaci¨®n del origen del coronavirus en China: ¡°A d¨ªa de hoy, yo no tengo el mandato para ir de forma independiente a un pa¨ªs y analizar todos los datos y todos los equipamientos. La OMS no es una inspecci¨®n internacional, estamos simplemente ah¨ª para ayudar a los pa¨ªses y son los Estados miembros los que nos gobiernan y los que deben darnos m¨¢s capacidades¡±, defend¨ªa Kluge. L¨®pez-Acu?a coincide en que la OMS ¡°no es una Interpol sanitaria¡±: ¡°El problema que tenemos es que muchos pa¨ªses no quieren ceder soberan¨ªa nacional en materia sanitaria. La OMS no es un ente independiente, es una asociaci¨®n de 194 pa¨ªses¡±.
A diferencia del inicio de la pandemia, cuando la OMS fue duramente criticada por su lentitud en la evaluaci¨®n del riesgo que supon¨ªa el coronavirus, los expertos consultados admiten que esta vez, el ente internacional ha actuado con agilidad. Alberto Infante, profesor em¨¦rito de Salud Internacional de la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III, apunta que, tras aquellos primeros d¨ªas, la OMS ¡°hizo algo de autocr¨ªtica y ahora son m¨¢s proactivos en la necesidad de actuar con m¨¢s rapidez¡±. Y tambi¨¦n Sud¨¢frica ha sido diligente, insiste Rafa Vilasanju¨¢n, miembro del consejo de direcci¨®n de GAVI, la alianza global para la vacunaci¨®n: ¡°La reacci¨®n de Sud¨¢frica ha sido ejemplar: en 36 horas ha detectado el grupo y ha transmitido la informaci¨®n. China, por ejemplo, no lo hizo as¨ª en su momento¡±, recuerda.
Los pr¨®ximos d¨ªas ser¨¢n clave para constatar si esta variante es tan problem¨¢tica como apuntan los primeros indicios. Por lo pronto, Infante se?ala que los casos detectados en diferentes pa¨ªses en menos de una semana ¡°puede ser un dato indirecto de la propagaci¨®n de la variante¡±. ¡°No es para estar tranquilos. La evidencia es suficiente para declararla como una variante de preocupaci¨®n¡±, insiste el experto, aunque admite que la credibilidad de la OMS puede verse tocada si al final la amenaza se queda en nada. Es un riesgo, no obstante, que hay que correr, apunta: ¡°Si la variante se comporta como dicen en Sud¨¢frica, no tendremos tiempo a reaccionar. Con lo que hoy se sabe, todo indica que es mejor pasarse de prudente¡±.
Tedros ha reprochado tambi¨¦n este lunes en su discurso inaugural de la asamblea de la OMS, las trabas que se encontraron en los primeros d¨ªas de la pandemia: ¡°La falta de intercambio de informaci¨®n y datos por parte de muchos pa¨ªses en los primeros d¨ªas de la pandemia obstaculiz¨® nuestra capacidad colectiva para obtener una imagen clara de su perfil y trayectoria. La falta de intercambio de muestras biol¨®gicas obstaculiz¨® nuestra capacidad colectiva para comprender c¨®mo evolucionaba el virus. Y la falta de un enfoque global consistente y coherente ha resultado en una respuesta fragmentada y desarticulada, generando malentendidos, desinformaci¨®n y desconfianza. El tejido del multilateralismo se ha deshilachado¡±.
Equidad en la vacunaci¨®n
El auge de nuevas variantes est¨¢ motivado, en buena medida, por la inequidad en el acceso a las vacunas: Europa va por el 70% de la poblaci¨®n vacunada y ?frica, por el 7%. Seg¨²n Tedros, ¡°m¨¢s del 80% de las vacunas del mundo se han destinado a los pa¨ªses del G-20, mientras que los pa¨ªses de bajos ingresos, la mayor¨ªa de ellos en ?frica, han recibido solo el 0,6% de todas las vacunas¡±.
En un mundo globalizado no hay fronteras que valgan y cuanto m¨¢s se replica un virus, m¨¢s posibilidades hay de que aparezcan mutaciones que pongan en jaque lo logrado hasta ahora para contener la pandemia. ¡°Estamos as¨ª porque no se ha entendido que hay que llevar vacunas donde no hay. Y las donaciones no son la soluci¨®n porque el gran problema es que, mientras aqu¨ª [en los pa¨ªses ricos] haya demanda elevada de vacunas, no hay suficientes vacunas para los otros pa¨ªses¡±, lamenta Vilasanjuan. Covax, el Fondo de Acceso Global para Vacunas contra la covid, ha enviado a los pa¨ªses en desarrollo 550 millones de dosis, pero el compromiso inicial de llegar a final de a?o con el 20% de la poblaci¨®n de todos los pa¨ªses vacunado, es un imposible, admite Vilasanjuan: ¡°Hay una sobredemanda de los pa¨ªses de rentas altas. Falta compromiso para acabar con la pandemia y es preciso un empuj¨®n. Tedros lleva dici¨¦ndolo desde hace tiempo y el posicionamiento es claro, pero la OMS no puede hacer nada m¨¢s¡±.
Tedros, por su parte, ha insistido este lunes en que la equidad en la vacunaci¨®n ¡°no es caridad¡±, sino la mejor soluci¨®n para salir de la pandemia: ¡°Cuanto m¨¢s persista la inequidad con las vacunas, m¨¢s oportunidades tendr¨¢ este virus de propagarse y evolucionar de formas que no podemos predecir ni prevenir¡±, ha avisado. La OMS ha reclamado mejor gobernanza y financiaci¨®n del ente internacional.
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