¡°No hay paro en Matem¨¢ticas¡±
El primer informe sobre el impacto de las ciencias exactas en la econom¨ªa alerta de la distancia en su uso en el tejido productivo espa?ol frente a otros pa¨ªses
¡°No hay paro en Matem¨¢ticas¡±. Lo afirma Guillermo Curbera, integrante de la Red Estrat¨¦gica en Matem¨¢ticas, una entidad financiada por la Agencia Espa?ola de Investigaci¨®n (AEI) para promover este campo y responsable, junto a AFI (Analistas Financieros Internacionales), del estudio Impacto socioecon¨®mico de la investigaci¨®n y de la tecnolog¨ªa matem¨¢tica en Espa?a. Seg¨²n este an¨¢lisis, presentado este jueves en la Universidad de Sevilla, las actividades relacionadas con esta ciencia son directamente responsables del trabajo de un mill¨®n de personas, del 6% del empleo total y de m¨¢s del 10% del PIB espa?ol. Las profesiones con altos conocimientos matem¨¢ticos son las que m¨¢s crecer¨¢n en los pr¨®ximos a?os y podr¨ªan aumentar la productividad en un 2,2%. Sin embargo, el tejido empresarial espa?ol a¨²n se nutre de menos personal con formaci¨®n en esta ¨¢rea que el de los pa¨ªses del entorno. ¡°Si esto no cambia, la econom¨ªa espa?ola perder¨¢ competitividad¡±, advierte Diego Vizca¨ªno, socio de AFI.
Big data (macrodatos), redes, tecnolog¨ªas de la informaci¨®n, dise?adores de programas y multimedia son ¨¢reas profesionales fundamentadas en la matem¨¢tica que aportan mayor valor a la econom¨ªa, seg¨²n explica Vizca¨ªno a ra¨ªz de los resultados del informe, que considera estas actividades ¡°estrat¨¦gicas¡± y aceleradoras del crecimiento. ¡°Por ejemplo, son esenciales para la transici¨®n a nuevos modelos de movilidad¡±, comenta.
Sin embargo, aunque el nivel acad¨¦mico espa?ol es similar al de otros pa¨ªses, seg¨²n Emilio Carrizosa, director del Instituto de Matem¨¢ticas de la Universidad de Sevilla (IMUS), la econom¨ªa a¨²n no tiene una ¡°reorientaci¨®n hacia sectores con mayor base tecnol¨®gica¡±. La elevada contrataci¨®n de sus profesionales, a los que emplean las empresas antes de que culminen su formaci¨®n, seg¨²n destaca Vizca¨ªno, indica que hay algunos sectores que ya se est¨¢n volcando en estos campos. Pero queda mucho por delante para incorporar al pa¨ªs a la denominada Cuarta Revoluci¨®n Industrial, centrada en la Inteligencia Artificial.
Algunas grandes empresas, del sector de las telecomunicaciones o la banca, llevan a?os invirtiendo en departamentos de matem¨¢ticos. Pero la peque?a empresa a¨²n est¨¢ anclada en modelos productivos tradicionales. Vizca¨ªno cree un error que se considere el tama?o un impedimento y pone de ejemplo las compa?¨ªas emergentes que en poco tiempo se sit¨²an en niveles competitivos muy altos. ¡°No hay enemigo peque?o¡±, afirma.
Rosa Romero, matem¨¢tica de la multinacional andaluza de ingenier¨ªa y tecnolog¨ªa Ayesa, advierte que ¡°la irrupci¨®n de la inteligencia artificial y la ciencia de datos va a suponer una verdadera revoluci¨®n y generar¨¢ tal demanda que la oferta actual de matem¨¢ticos no la va a poder cubrir". ¡°Esto acaba de empezar y ser¨¢ imparable¡±, asegura.
Alberto Ariza, de la compa?¨ªa de inteligencia artificial Bigml, reconoce que los pa¨ªses que inviertan en inteligencia artificial lograr¨¢n una mejor posici¨®n econ¨®mica mundial y que Espa?a est¨¢ ¡°a¨²n bastante lejos¡±, informa la Universidad de Sevilla.
Los datos avalan esta afirmaci¨®n, los estudios similares al presentado y realizados en otros pa¨ªses europeos muestran que, mientras las matem¨¢ticas aportan un 13% y un 16% al PIB de pa¨ªses como Reino Unido, Francia y Holanda, en Espa?a, es del 10,1%.
El informe atribuye esta distancia a ¡°la diferente composici¨®n de la estructura productiva de la econom¨ªa espa?ola¡± y a su ¡°menor competitividad¡±.
El trabajo concluye con la ¡°necesidad de repensar el modelo educativo¡±, mejorar la relaci¨®n entre tejido productivo y el entorno formativo en matem¨¢ticas, aumentar el gasto en investigaci¨®n y desarrollo de las actividades de alta intensidad de esta ciencia e incentivar las aplicaciones de estos conocimientos.
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