A la vejez, comedia

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¡®Verg¨¹enza¡¯ cocinada a fuego lento

¡°La gente nos dice que le encanta ¡®Verg¨¹enza¡¯ pero no aguanta verla: ese es el meollo de todo¡±

Antonio Resines viste camisa a cuadros y chaqueta, nada fuera de lo habitual respecto a la imagen que se tiene de ¨¦l. M¨¢s chocante es el aspecto de Miguel Rell¨¢n, con camiseta, chupa de cuero y una coleta postiza. Justo antes de la transformaci¨®n, cerca de las 10 de la noche del pasado 15 de junio y antes de encarar una jornada de rodaje que terminar¨¢ pasadas las 6 de la ma?ana (¡±no lo llevamos nada bien, pero son gajes del oficio¡±, dicen resignados), los dos actores toman un caf¨¦ en el restaurante madrile?o en el que ruedan su nueva serie.

En Sentimos las molestias, Resines y Rell¨¢n (66 y 77 a?os, respectivamente) interpretan a dos amigos septuagenarios: un director de orquesta de ¨¦xito mundial y una vieja gloria del rock. ¡°Para eliminar este aspecto respetable y serio que tengo de catedr¨¢tico de Filosof¨ªa me dijeron de entrada que me tendr¨ªa que parecer a El Drogas [exmiembro de Barricada]¡±, explica Rell¨¢n. ¡°Para m¨ª, el ejemplo era Barenboim, pero no lo han conseguido¡±, tercia Resines. Ellos interpretan a la extra?a pareja en torno a la que gira la nueva serie que preparan para Movistar + Juan Cavestany y ?lvaro Fern¨¢ndez-Armero tras el buen resultado que tuvieron, tambi¨¦n en la plataforma de Telef¨®nica, las tres temporadas de Verg¨¹enza.

La comedia, de seis episodios de media hora y que se estrenar¨¢ en 2022, naci¨® cuando los dos guionistas y directores se encontraron ante la disyuntiva de intentar alargar Verg¨¹enza con otra entrega m¨¢s o plantear una nueva idea. Optaron por lo ¨²ltimo con un concepto que no dudaron que ser¨ªa ganador: juntar a Miguel Rell¨¢n y Antonio Resines en una serie sobre la amistad y lo que significa hacerse mayor. ¡°Quer¨ªamos romper con el tono de Verg¨¹enza, pero que a la vez mantuviera nuestras se?as de identidad¡±, cuenta Fern¨¢ndez-Armero. ¡°Nos llamaba la atenci¨®n que hay una nueva generaci¨®n que no ha existido nunca en la historia, que son los j¨®venes de 70 a?os. Y nos pregunt¨¢bamos si eso era as¨ª, si son j¨®venes de verdad, si la sociedad est¨¢ preparada para acoger a ese nuevo sector que est¨¢ incluso en el mercado laboral, del ocio¡­¡±, contin¨²a el director y guionista. ¡°Verg¨¹enza ten¨ªa algo de cr¨®nica de nuestras vidas en el momento en el que empez¨® a fraguarse, que fue hace m¨¢s de 10 a?os. Y ahora que estamos en los 50, quer¨ªamos mirar hacia delante, a lo que nos espera a los dos en poco tiempo. Y te encuentras con gente como Rell¨¢n y Resines que son como nosotros, les vemos muy cerca en tono, referencias, energ¨ªa¡­¡±, completa Cavestany.

Movistar compr¨® r¨¢pidamente ese concepto, pero les faltaba tener la serie. Y entonces lleg¨® la pandemia y las dificultades. Justo antes del confinamiento de 2020, los creadores y los protagonistas pudieron reunirse para comer y cenar varias veces y empezar a encauzar la historia. ¡°No quer¨ªamos hacer la t¨ªpica serie de dos que se ven obligados a convivir, era un concepto de sitcom [comedia de situaci¨®n] antiguo que nos provocaba rechazo y, a la vez, parec¨ªa lo ¨²nico que se pod¨ªa hacer¡±, explica Cavestany. ¡°Verg¨¹enza era la serie de un se?or que met¨ªa la pata, eso ya es un camino. Aqu¨ª estaba todo tan abierto, desde el tono a la historia, el alcance, la cronolog¨ªa¡­ Era un campo que hab¨ªa que acotar¡±, a?ade Fern¨¢ndez-Armero.

Optaron finalmente por una mirada m¨¢s realista y reposada, en tono de comedia dram¨¢tica, sin llevar las situaciones tan al extremo como Verg¨¹enza, ¡°aunque al final incurrimos en un tipo de comedia con la que se nos va a asociar irremediablemente¡±, dice Cavestany, que completa: ¡°Es una serie sobre una amistad. Y quer¨ªamos hacerla entra?able, emotiva, con mala hostia por momentos y con acidez, pero amable en ¨²ltimo t¨¦rmino¡±.

La conversaci¨®n con los creadores se tensa cuando se menciona los parecidos que esta premisa guarda con El m¨¦todo Kominsky, la premiada comedia de Netflix en la que Michael Douglas y Alan Arkin interpretan a dos amigos con personalidades dispares y con los achaques de la edad como motivo de humor. ¡°La estrenaron cuando est¨¢bamos con el desarrollo de la serie y flipamos¡±, asegura Fern¨¢ndez-Armero. ¡°Entonces no nos preocup¨® porque pens¨¢bamos que se olvidar¨ªa r¨¢pido. Pero nadie se ha olvidado de ella. Las similitudes son evidentes y no se pueden negar, pero no es nada premeditado¡±, aclara.

Los referentes en el caso de Sentimos las molestias son otros. El m¨¢s claro, el universo de Woody Allen. ¡°Pel¨ªculas como Delitos y faltas, Hannah y sus hermanas, con esos salones por donde se pasean los personajes y hablan y hablan, ese Nueva York oto?al que aqu¨ª ser¨¢ Madrid¡­¡±, explica Fern¨¢ndez-Armero, que tambi¨¦n se?ala al cine franc¨¦s como referente. Cavestany se queda en territorio nacional: ¡°Yo estoy muy obsesionado con la carrera de los dos [Rell¨¢n y Resines]. Estoy obsesionado con el cine espa?ol reciente, pero medio olvidado, de los a?os noventa, ochenta, casi del destape o de la primera Movida¡±. Mejor imposible, de James L. Brooks, y ?pera prima, de Fernando Trueba, tambi¨¦n vienen a la mente de Cavestany.

Pero en lo que insisten los directores es en que es una serie hecha a medida para sus dos protagonistas. Muy pronto tuvieron claro que ten¨ªan que dar la vuelta a lo previsible en el reparto de personajes: si a Rell¨¢n le encajaba mejor, aparentemente, el personaje de director de orquesta, ¨¦l ser¨ªa el rockero, y Resines se quedar¨ªa como el riguroso y obsesivo director de orquesta. ¡°Lo que me gusta de la historia es que en el fondo, y con todos los altibajos que tienen, es una historia de amistad de dos personas que se quieren. Son dos perros viejos, resabiados, les gusta meterse el uno con el otro, y hay esa historia de cari?o entre ellos, se necesitan¡±, dice Resines. ¡°No demasiado oculta hay una cr¨ªtica a la estupidez de no aceptar la edad, que tarde o temprano te va a pillar¡±, contin¨²a Rell¨¢n. ¡°Estos dos se resisten de una manera civilizada. Que tambi¨¦n me parece un recado positivo: no hay que rendirse. Yo tengo algunos amigos que dicen mucho eso de ¡®yo ya no¡­¡¯. ¡®Yo ya no voy al teatro, yo ya no voy al gimnasio¡­¡¯ Pues mu¨¦rete, macho, y deja de dar la lata¡±, a?ade Rell¨¢n.

Adem¨¢s de la edad, los actores encuentran algunas similitudes entre ellos y sus personajes a trav¨¦s de sus profesiones. ¡°Aunque somos actores y ellos m¨²sicos, nos han pasado cosas parecidas¡±, dice Resines. ¡°Al final, la m¨²sica no deja de ser el tel¨®n de fondo. La peripecia argumental va por el lado de la amistad. Aunque lo enriquece todo el hecho de que sean m¨²sicos, porque desde el punto de vista de la factura, ¨¦l dirigiendo una orquesta y yo con el grupo de rock, es distinto a que fuera registrador de la propiedad, que ser¨ªa m¨¢s triste, con todos mis respetos¡±, remata Rell¨¢n.

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