Iv¨¢n Mordisco y la resurrecci¨®n de un grupo armado
?Qui¨¦n es el l¨ªder de las disidencias de las FARC que negocia con el Gobierno de Gustavo Petro?
Iv¨¢n Mordisco es un hombre doblemente resucitado. No solo reapareci¨® triunfal despu¨¦s de que el presidente Iv¨¢n Duque lo diera por muerto al final de su mandato, sino que el actual Gobierno de Gustavo Petro le concedi¨® una nueva vida a su grupo. Hasta entonces, el autodenominado Estado Mayor Central era conocido como una de las principales corrientes de disidencias de la extinta guerrilla de las FARC, vinculada al narcotr¨¢fico y la miner¨ªa ilegal. Una disidencia que ahora tiene un h¨¢lito de grupo pol¨ªtico que busca negociar la paz en Noruega.
La historia de Iv¨¢n Mordisco en la opini¨®n p¨²blica arranca el 3 de mayo de 2016, aunque su recorrido en las armas y la selva lleva m¨¢s de 22 a?os. Su nombre real es N¨¦stor Gregorio Vera Fern¨¢ndez. Ese 3 de mayo, mientras la dirigencia de las FARC negociaba en La Habana con Juan Manuel Santos, Vera anunciaba, a trav¨¦s de un comunicado, que un grupo de guerrilleros liderados por ¨¦l, no entregar¨ªan las armas. ¡°Con la determinaci¨®n de continuar la lucha armada, el Frente Primero de las antiguas FARC-EP tom¨® la vocer¨ªa de los militantes guerrilleros inconformes, que en los distintos bloques y frentes no se sent¨ªan representados o amparados por las decisiones tomadas por el equipo negociador¡±, explica un documento interno de las fuerzas militares conocido a trav¨¦s de la filtraci¨®n de Guacamaya. Era la respuesta a una alerta temprana de los militares sobre el municipio de Miraflores (Guaviare), donde ese grupo amenazaba a la poblaci¨®n civil y a los excombatientes que s¨ª decidieron avanzar en el proceso de paz.
Mordisco ¡°es reconocido como dogm¨¢tico, radical y por haberse quedado en la ¡°primera formaci¨®n¡±, sin adaptarse a los cambios de la guerra y siempre en desacuerdo con la salida o negociaci¨®n pol¨ªtica¡±, detallaba en su momento un informe sobre el origen de las disidencias de la Fundaci¨®n Ideas para la Paz (FIP), que le atribuye un proceso de ¡°degradaci¨®n criminal¡±. Lo distingu¨ªa una actitud abiertamente hostil a los acuerdos y hacia quienes los promov¨ªan. Tambi¨¦n su oposici¨®n a los programas de sustituci¨®n de cultivos il¨ªcitos, adem¨¢s de una marcada violencia y desconfianza hacia la poblaci¨®n civil, particularmente las comunidades ind¨ªgenas.
El Frente Primero, una de las estructuras m¨¢s representativas de las FARC, operaba en tres departamentos del sureste del pa¨ªs: Vaup¨¦s, Guaviare y Meta (que coinciden, junto a Caquet¨¢, con el llamado arco de la deforestaci¨®n). El anuncio p¨²blico de continuar en armas ocasion¨®, seg¨²n otro informe del Comando de las Fuerzas Militares, que alias Gentil Duarte regresara a Colombia desde Cuba para ¡°someter a alias Iv¨¢n Mordisco¡±. Sin embargo, de acuerdo con la l¨ªnea de tiempo de los militares, en septiembre del 2016 (al tiempo que Colombia celebraba la inminente desmovilizaci¨®n de unos 13.000 combatientes) el propio Duarte desafi¨® la tradicional verticalidad de la guerrilla y se retir¨® del proceso de paz para formar un grupo de disidentes. Un a?o m¨¢s tarde Duarte y Mordisco crearon un ¡°secretariado temporal¡±.
Durante una reuni¨®n en El Retorno, en el Guaviare, establecieron un plan a cuatro a?os: los dos primeros de crecimiento (2018 y 2019); y los otros dos (2020 y 2021) para ¡°hacer grandes acciones y mostrarnos¡±, con una meta de sumar 6.000 hombres en armas. Tambi¨¦n acordaron que cobrar¨ªan 200.000 pesos por kilo de coca, entre otros cobros ilegales a ganaderos y campesinos. Hasta comienzos de 2022 su grupo, seg¨²n los documentos del Comando General de las Fuerzas Militares, ten¨ªa ¡°aproximadamente 3.239 integrantes¡±.
M¨¢s del 90 % de los firmantes de la paz han cumplido sus compromisos, se mantienen en la legalidad y avanzan en su proceso de reincorporaci¨®n. Nunca se produjo la desbandada que se temi¨® en un primer momento. Por eso, el fuego de las disidencias ha estado alimentado por nuevas din¨¢micas de reclutamiento forzado, a menudo de menores de edad. Es una amalgama de estructuras con or¨ªgenes y trayectorias heterog¨¦neas, apunta un reciente an¨¢lisis de la FIP. ¡°M¨¢s que facciones con una estructura jer¨¢rquica que imparte directrices a toda la organizaci¨®n, las disidencias son una federaci¨®n de grupos bajo una misma sombrilla, pero con intereses, formas de operar y grados de articulaci¨®n diversos, adem¨¢s de una gran autonom¨ªa en su funcionamiento a nivel territorial¡±, advierte.
Las guerras entre disidencias
Tanto Duarte como Mordisco fueron centrales en el recrudecimiento de la guerra posterior al desarme de las FARC. En regiones como Arauca, en la frontera con Venezuela, se enfrentaron al ELN, para pelearse ¡°los corredores de movilidad, y el control de la hegemon¨ªa de las econom¨ªas il¨ªcitas presentes en zona de frontera principal fuente de financiamiento para el fortalecimiento de su componente armado y redes de apoyo al terrorismo¡±, dec¨ªa el Ej¨¦rcito.
Los alcances de Mordisco no se quedar¨ªan solo en las regiones apartadas. Una carta enviada por la Defensor¨ªa del Pueblo al Ej¨¦rcito habla del asesinato de tres campesinos en la regi¨®n del Sumapaz, zona rural de Bogot¨¢, ocurridos en 2021. En mayo de ese mismo a?o, un informe de inteligencia sobre las conexiones de las disidencias revelaba que hab¨ªa disputas entre el grupo de Mordisco y la Segunda Marquetalia, al mando de Iv¨¢n M¨¢rquez, por ¡°el control de la frontera oriental (con Venezuela) y el tr¨¢fico de estupefacientes¡±. En Colombia persisten seis conflictos armados internos, y la mitad de ellos involucran facciones disidentes, de acuerdo con el balance anual del Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja (CICR). Tanto la Segunda Marquetalia de M¨¢rquez como el Estado Mayor Central de Mordisco son considerados por Estados Unidos como organizaciones terroristas.
En 2021, al referirse a esa facci¨®n disidente comandada por Mordisco y Duarte, el Ej¨¦rcito dec¨ªa: ¡°Estos dos sujetos estar¨ªan delinquiendo principalmente en los departamentos del Caquet¨¢ y Guaviare de igual manera en 103 municipios y 15 departamentos, donde tienen injerencia estructuras direccionadas por estos dos cabecillas¡±. Les atribu¨ªa el atentado en la Brigada N¡ã 30 de C¨²cuta, as¨ª como los disparos contra el helic¨®ptero que trasladaba al expresidente Iv¨¢n Duque en esa misma ciudad.
Gentil Duarte parec¨ªa emerger como el gran ganador de la confusa guerra entre facciones disidentes, hasta que fue asesinado en mayo del 2022 del otro lado de la frontera con Venezuela, de acuerdo con la prensa colombiana e informaci¨®n de inteligencia. Dos meses despu¨¦s, el pasado julio, el saliente presidente Duque anunci¨® en video que el Ej¨¦rcito hab¨ªa logrado un ¡°golpe en el n¨²cleo de la estructura de las disidencias de las FARC¡±. La ¡°neutralizaci¨®n¡± de Iv¨¢n Mordisco, en palabras del entonces ministro de Defensa, Diego Molano, era la ¡°estocada final a las disidencias¡±.
Pero Mordisco reapareci¨® dos meses despu¨¦s en un video, acompa?ado de una docena de hombres armados, en el que anunciaba estar dispuesto a dialogar con el nuevo Gobierno en el marco de la pol¨ªtica de paz total. Por si a alguien le quedaba alguna duda, volvi¨® a aparecer este domingo, de gafas y uniforme militar, en las sabanas del Yar¨ª, como jefe del Estado Mayor Central. La disidencia que lidera anunci¨® en ese c¨®nclave que la mesa de di¨¢logos con el Gobierno se pondr¨¢ en marcha el pr¨®ximo 16 de mayo.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa¨ªs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.