Pablo Beltr¨¢n, jefe del ELN: ¡°La negociaci¨®n con Petro es peor que con Uribe, Santos y Duque¡±
El guerrillero que lidera las negociaciones del grupo armado con el Gobierno asegura en esta entrevista con EL PA?S que el proceso de paz est¨¢ en peligro de muerte por lo que ¨¦l considera una traici¨®n del presidente
Pablo Beltr¨¢n (San Gil, 70 a?os) ha hecho suyas durante toda la vida unas palabras de Santa Teresa de Jes¨²s: ¡°Nada te turbe, nada te espante; todo se pasa; Dios no se muda¡±. Al comandante del ELN (Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional), de formaci¨®n cristiana, le acompa?a la fama de hombre sereno y paciente. Sin embargo, ha aparecido alguien que le quita el sue?o y le colma la paciencia: Gustavo Francisco Petro. Beltr¨¢n, jefe de negociadores del grupo guerrillero en las negociaciones de paz con el Gobierno, considera, en esta entrevista en exclusiva con EL PA?S, que el presidente de Colombia est¨¢ tensando al m¨¢ximo las conversaciones con una t¨¢ctica que a ¨¦l le parece una falta de respeto con su organizaci¨®n: los enviados de Petro mantienen en paralelo un di¨¢logo con un frente armado del ELN que se ha declarado en rebeld¨ªa y no acata las ¨®rdenes de la direcci¨®n.
Aqu¨ª asistimos al choque entre dos relojes biol¨®gicos distintos. Petro es un hombre efervescente que siente que su mandato, que ha superado el a?o y medio, se le escurre entre las manos. Necesita un acuerdo con el ELN lo antes posible, una firma estampada en un documento que certifique que ¨¦l, un excombatiente que ha hecho de la paz su bandera, convenci¨® a una guerrilla de dejar las armas y sumarse a la democracia colombiana. Pablo Beltr¨¢n (alias de Israel Ram¨ªrez Pineda), por contra, se lo toma con serenidad y no cree en los actos precipitados. No en vano, lleva desde 1998 en conversaciones con distintos gobiernos. Es decir, 26 a?os, el tiempo en el que han transcurrido siete mundiales de f¨²tbol, internet ha cambiado el mundo para siempre y todos los grandes l¨ªderes del siglo pasado que fueron una inspiraci¨®n para ¨¦l ¨DFidel Castro, por ejemplo¨D est¨¢n muertos y enterrados. Una semana m¨¢s, un mes o un a?o no significan gran cosa para Beltr¨¢n. El guerrillero, desde el Tamanaco, un hotel de ¨¦poca enclavado en una loma de Caracas con una piscina de tres metros de profundidad en el jard¨ªn, responde a las preguntas por videollamada. Entre una y otra aprovecha para recolocarse las gafas de montura negra. Beltr¨¢n aguarda sin muestras de impaciencia: no tiene prisa.
Pregunta. ?Las conversaciones del Gobierno con ese frente guerrillero sobre el que usted no tiene control han dejado toda la negociaci¨®n en suspenso?
Respuesta. El Gobierno de Petro sabe lo que pasa, pero se hace que no sabe. En esto llevamos ocho meses casi rog¨¢ndoles que dejen de darle aliento a un grupo en el sur del pa¨ªs, en Nari?o, y dejen de tratarlo como si fueran dos ELN: el que nosotros representamos y ese de all¨¢, Frente Comuneros del Sur. Hemos dicho que ese frente tiene un proceso disciplinario y estamos resolviendo el problema. Le explicamos eso al Gobierno, pero no hicieron caso. Esto es asunto interno del ELN, nadie m¨¢s se tiene que meter. Han promovido una desarticulaci¨®n y nos han creado un problema.
P. ?No ha habido manera de atajar ese asunto en la mesa de negociaci¨®n?
R. El Gobierno cada vez lo hace con m¨¢s fuerza y con m¨¢s insistencia [negociar con ese frente d¨ªscolo]. En agosto hicieron un acuerdo con ellos y nosotros nos enteramos. Concluimos que no era v¨¢lido, era espurio, y el compromiso fue que el comisionado de Paz dejara de hacer eso, pero no han cumplido.
P. ?Ese frente que no responde a la jerarqu¨ªa del ELN es el m¨¢s poderoso en t¨¦rminos b¨¦licos?
R. Depende de la lupa que se le ponga. Al Gobierno le interesa decir que s¨ª para demostrar que es v¨¢lido lo que est¨¢n haciendo. Cuando comenzamos este debate, ese grupo ten¨ªa 40 o 50 personas y hoy se ha multiplicado por cuatro y hasta cinco veces. Si preguntas en la zona por ese crecimiento exponencial dicen que se ha logrado de una manera muy sencilla: pagando sueldos, y eso va en contra de los reglamentos del ELN. Aqu¨ª no se le reconoce dinero a nadie. Ellos se van situando por fuera de las normas internas del ELN.
P. ?Qui¨¦n del Gobierno lidera este di¨¢logo que usted considera una traici¨®n?
R. Otty Pati?o [alto comisionado de Paz, exguerillero del M-19, el grupo armado en el que tambi¨¦n milit¨® Petro].
P. ?Pero usted le ha advertido que esto pone en peligro de muerte todo el di¨¢logo?
R. S¨ª, pero en una discusi¨®n nos dijo que iba a seguir con eso y que para detenerlo hab¨ªa que pasar por encima de su cad¨¢ver. Esto lo dijo delante de los seis pa¨ªses garantes, la ONU, los obispos. Cada cosa que decimos ah¨ª tenemos 12 testigos.
P. ?Estamos ante un claro desaf¨ªo de Petro?
R. Los ocho d¨ªas antes de esta reuni¨®n extraordinaria [la que se celebra en Caracas y concluye este lunes] habl¨® el comandante del Ej¨¦rcito, el presidente, Otty dos veces y la delegaci¨®n del Gobierno, en una seguidilla de declaraciones donde nos dec¨ªan que iban a seguir en el di¨¢logo en Nari?o y que lo tom¨¢bamos o lo dej¨¢bamos. Entonces dijimos que no, que hay un solo ELN, una sola mesa de negociaci¨®n y no aceptamos esta doble jugada. A esto se le llama perfidia.
P. ?Hasta cu¨¢ndo va a aguantar su paciencia?
R. Este es un ejemplo de la paciencia de la que me debo investir. Hoy estamos a s¨¢bado [d¨ªa de la entrevista]. El jueves, Otty Pati?o dijo que estaba hablando con el frente de Nari?o, que es del ELN. Si yo siguiera las instrucciones que me dieron, yo debiera retirarme de la mesa. F¨ªjese lo grave que es esto.
P. ?Qu¨¦ le mantiene aferrado a la mesa?
R. Nosotros necesitamos demostrarle al Gobierno que tuvimos ocho meses de paciencia y que si ellos persisten en eso pasamos del congelamiento en el que estamos hoy a la amenaza de existencia de la mesa. Esta delegaci¨®n no tiene mandato para seguir en ella.
P. ?Cu¨¢l es el plazo que se da?
R. Pasado este lunes espero que tengamos alg¨²n avance para yo poder llevar un mejor informe a mi direcci¨®n. Si llevo lo mismo tendremos que mirar qu¨¦ medida sigue. Yo ya no tengo m¨¢s margen de maniobra.
P. ?Estamos en el peor momento de la mesa?
R. No solo eso, llevo 10 a?os como jefe de esta delegaci¨®n y es el peor momento que he enfrentado.
P. Le ha agarrado desprevenido esta t¨¢ctica de Petro.
R. Dije una cosa en la mesa y se ofendieron: esto no nos lo hab¨ªan hecho ni [?lvaro] Uribe, ni [Juan Manuel] Santos ni [Iv¨¢n] Duque. Estamos peor con Petro que con esos presidentes. Estamos muy ofendidos. Nunca un Gobierno hab¨ªa estirado tanto la cuerda como esta vez.
P. S¨¦ que los tiempos del ELN desesperan a Petro. El presidente necesitaba un catalizador.
R. Si esta es la forma se equivoca, porque el ELN no funciona a empujones, sino hablando, acordando y cumpliendo, que es la soluci¨®n pol¨ªtica.
P. ?Le ha decepcionado Petro?
R. Voy a hablar por m¨ª mismo: pienso que comienza a haber un desencanto en sectores de la sociedad colombiana. Nosotros le hemos dicho de m¨²ltiples maneras al presidente que somos socios para desarrollar el mandato de cambio que la sociedad de las calles dio en el estallido social de 2021. Entendemos que los cambios son progresivos, pero tiene que haber rupturas. A mi juicio, me parece que ha hecho concesiones muy fuertes que cuestionan las posibilidades de cambio y que le contradicen. Por sus alianzas, le toca incumplir esas promesas electorales.
P. Usted tambi¨¦n dijo que le apoyaba su idea de hacer una Asamblea Constituyente.
R. Es que es trascendental, hay que hacer que la sociedad se manifieste sobre los cambios que necesita Colombia. Los sectores de la ¨¦lite maniobran y colocan su opini¨®n en el Congreso, que responde a esa ¨¦lite minoritaria, y con eso funden las posibilidades de esos cambios institucionales. Hay que recurrir al constituyente primario, que es el pueblo.
P. Llevamos a?o y medio de negociaci¨®n. Como mucho, esto podr¨ªa alargarse hasta el tercer a?o del presidente, pero no m¨¢s all¨¢. Debe firmarse el acuerdo con un a?o de colch¨®n hasta que se vaya Petro. ?Cu¨¢nto tiempo m¨¢s falta?
R. El acuerdo que gobierna esta negociaci¨®n se llama acuerdo de M¨¦xico. Hay que pactar transformaciones y ponerle fin al conflicto armado. No le vamos a pedir a Petro que haga de 2026 soluciones estructurales, pero tampoco vamos a esperar a que contin¨²e un problema tan grave del r¨¦gimen: la persecuci¨®n del opositor, del que piensa diferente. A ese se le elimina de forma expr¨¦s. Le pongo un ejemplo: desde que las FARC se desmoviliz¨® en 2016 le han matado a 400 excombatientes. Matan a los que est¨¢n en organizaciones sociales. El r¨¦gimen, y ese es el mensaje, persigue a los que buscan los cambios. Mientras eso no cambie, se legitiman factores de resistencia como el ELN. Acabado ese r¨¦gimen que elimina y ejecuta, queda sin base la resistencia. No solo son tiempos y son procesos. Si voy a meterme en un proceso de transici¨®n energ¨¦tica eso se demora cuatro d¨¦cadas, pero lo que haga ahora Petro tiene que ser la primera etapa de ese proceso.
P. Usted suena desencantado y como que estuviera lanzando un ultim¨¢tum. No le hab¨ªa visto as¨ª antes.
R. No nos gusta ni amenazar ni dar ultim¨¢tum. Nos iremos de Caracas con un balance dif¨ªcil de analizar. Tenemos un sistema de toma de decisiones democr¨¢tico, as¨ª haya una jefatura. Todo se consens¨²a dentro del ELN. Tengo que llevar informes, tenemos que meditar el cese. ?C¨®mo impactar¨ªa si dij¨¦ramos que dejamos el alto el fuego? Eso ser¨ªa un golpe bajo.
P. Hay una sensaci¨®n general de hartazgo sobre esta negociaci¨®n, no est¨¢ la gente pendiente porque siente que no se avanza.
R. Me sent¨¦ en estas lides en el a?o 98. Los que me anteceden, en el 91. Se cansan m¨¢s con la guerra que con el di¨¢logo. El doctor Echand¨ªa dec¨ªa: es mejor echar lengua que echar bala.
P. ?Es un escenario no llegar a un acuerdo con Petro, pese a que es un presidente de izquierdas que quiere resolver todos los problemas con ustedes?
R. Le voy a colocar un ejemplo: lleg¨® Duque y pate¨® los acuerdos de Santos, al que le dieron el Premio Nobel, pero lleg¨® Petro en 2022 y retom¨® el di¨¢logo con nosotros donde lo hab¨ªa dejado Santos. ?Cu¨¢l es la diferencia de los dos? Que Duque representa los sectores de la ¨¦lite, esa ¨¦lite que est¨¢ c¨®moda con la crisis del pa¨ªs y no quiere cambios. Petro lleg¨® con un mandato de cambio y de seguir el trabajo del di¨¢logo con Santos. ?Qu¨¦ viene? Me coloca usted en un trabajo de ser pitoniso.
P. ?Esta ser¨ªa una gran oportunidad perdida?
R. La sociedad colombiana tiene un dilema: o busca los cambios en la democracia o pasivamente deja que el viejo r¨¦gimen siga imperando. El factor externo es Estados Unidos. Muchas cosas se deciden en Washington, en la ecuaci¨®n hay que meter ese factor externo.
P. Me imagino que usted nunca ha estado en Estados Unidos.
R. Ni siquiera puedo sobrevolar su espacio a¨¦reo.
P. Hay un a?o para acordar algo¡
R. Me parece bien la reflexi¨®n, pero es Otty Pati?o quien pone trabas a esto. Al Gobierno le sirve tener esto a fuego bajo.
P. No entiendo por qu¨¦.
P. Muchas cosas de las que hace el Gobierno para enredar la mesa son asuntos de inteligencia. Nosotros especulamos con sectores dentro del Gobierno que quieren hundir el proceso. Gente interesada en hacer trizas la paz. En la ¨¦poca de Belisario Betancur hab¨ªa enemigos agazapados de la paz. De eso siempre ha habido en Colombia.
P. ?Me habla de Luis Gilberto Murillo, el canciller encargado?
R. A Juan Gonz¨¢lez ¨Del arquitecto de la pol¨ªtica de Am¨¦rica Latina para la Casa Blanca¨D le cortaron la cabeza el d¨ªa que ya no era ¨¦poca para EE UU de andar promoviendo golpes, desestabilizaciones. Quisiera ver que eso sea cierto. Creo que la pol¨ªtica exterior de Washington sigue aliada con una idea muy a?eja de guerra perpetua. Bajo esa agua est¨¢ Colombia.
P. Ah¨ª coloca usted a Murillo, por lo que le entiendo entre l¨ªneas¡
R. Tiene antecedentes. Con el Gobierno de Santos result¨® entreg¨¢ndole la isla de Gorgona, la isla m¨¢s grande del Pac¨ªfico, a EE UU para que instalara una base militar. Ya va en m¨¢s del 50% construida y eso lo comenz¨® Murillo cuando era ministro de Medioambiente.
P. Antes de acabar, d¨ªgame qu¨¦ ha hecho mal el ELN en este proceso, ya que ha tenido varios tropiezos importantes.
R. El secuestro del pap¨¢ de [futbolista] Lucho D¨ªaz. Pero el mismo d¨ªa que se conoci¨®, el Comando Central dijo que era un error y que hab¨ªa que devolverlo r¨¢pido. Cuando el ELN comete un error no necesita que lo venzan en juicio para que lo reconozca. ?Qu¨¦ hizo el Gobierno? Del ¨¢rbol ca¨ªdo hacer le?a. Se aprovech¨® y arranc¨® una ofensiva medi¨¢tica para tratar cosas que tra¨ªamos en la agenda. Renuncien a Satan¨¢s y a todos los pecados o no volvemos a la mesa, nos dijeron. Entre socios eso no funciona, no construye confianza. Ah¨ª comenz¨® un proceso de erosi¨®n de la confianza. Hasta hoy.
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