Petro incumple sus promesas de transformar la educaci¨®n de Colombia y culpa a sus ministros
El presidente se?ala que la cartera es la que tiene m¨¢s rezagos. ¡°No ha girado alrededor del programa de gobierno¡±, cuestiona

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Gustavo Petro est¨¢ enfurecido por los fracasos de su pol¨ªtica educativa. Lo reconoci¨®, sin medias tintas, en el Consejo de Ministros de hace dos semanas, transmitido en vivo por cadena nacional. Denunci¨® que el Ministerio de Educaci¨®n es la cartera con m¨¢s incumplimientos de los compromisos contra¨ªdos ante el pueblo: el 95% de los que le corresponden. ¡°[La entidad] no ha girado hasta el momento alrededor del programa de gobierno, sino alrededor de otras cosas¡±, reclam¨®. Para ¨¦l, esto es especialmente grave porque los j¨®venes lo llevaron al poder en 2022. ¡°[El sector] es la prioridad del presidente y, por lo tanto, deber¨ªa ser el ministerio con m¨¢s compromisos cumplidos¡±, remarc¨®.
El mandatario culp¨® a los tres ministros de Educaci¨®n que ha tenido en estos dos a?os y medio. Asegur¨® que designar al centrista Alejandro Gaviria, que solo fue jefe de cartera durante los primeros seis meses, fue el mayor error de su mandato. ¡°No entr¨® a colaborar con el programa de gobierno elegido por el pueblo, sino a detenerlo¡±, dijo. Asimismo, dio a entender que la acad¨¦mica Aurora Vergara (2023-2024) tampoco le hizo caso en sus ambiciosas metas. ¡°La costumbre [de Gaviria] sigui¨®¡±, enfatiz¨®. Ni siquiera se salv¨® Daniel Rojas, fiel militante del petrismo desde hace a?os y designado como ministro en julio. El presidente lo ridiculiz¨® por llegar tarde. ¡°?Ve! Lleg¨® el ministro de Educaci¨®n. ?Bravo!¡±.
Rojas, por su parte, reconoci¨® en el Consejo que el presidente tiene ¡°much¨ªsima raz¨®n¡±. Unos d¨ªas despu¨¦s, al sumar su renuncia protocolaria a las de sus colegas, agreg¨® en X: ¡°Han sido seis meses en b¨²squeda de recuperar el tiempo perdido¡±. Los fracasos son innegables, y proporcionales a metas sumamente ambiciosas. Las nuevas universidades que prometi¨® el presidente en regiones apartadas, como el Catatumbo, no existen. La reforma a la ley 30 para transformar la educaci¨®n superior se redujo a dos art¨ªculos sobre el financiamiento de las instituciones p¨²blicas y, aun as¨ª, apenas da sus primeros pasos. La ley estatutaria para consagrar la educaci¨®n como un derecho fundamental se hundi¨® en el Congreso. La repetici¨®n y la deserci¨®n escolar han aumentado.
Las explicaciones var¨ªan. El exministro Gaviria defiende en una conversaci¨®n telef¨®nica que la culpa es de la visi¨®n del presidente. Dice que el mandatario se concentra casi exclusivamente en expandir la infraestructura universitaria por todo el pa¨ªs, sin considerar otras prioridades como agilizar las autorizaciones de nuevos programas. Cree que Petro tiene ¡°una concepci¨®n rudimentaria¡± de lo que es una universidad. ¡°Siempre le pregunt¨¦ de d¨®nde saldr¨ªan los profesores y los programas curriculares de las nuevas instituciones¡±, explica. Para Gaviria, su antiguo jefe prioriza los simbolismos. ¡°Quiere grandes monumentos a la inclusi¨®n¡±, afirma. ¡°Una vez prometi¨® una universidad de 20.000 estudiantes en El Tarra, un municipio de 17.000 habitantes. No ten¨ªa sentido¡±.
El fil¨®sofo Francisco Cajiao a?ade que la educaci¨®n no es propensa a logros inmediatos, como los que pretende el presidente. ¡°Es de procesos lentos. Una reforma curricular, por ejemplo, no se hace en cuatro a?os en ning¨²n pa¨ªs serio¡±, comenta. Asimismo, se?ala que Petro no entiende que el Ministerio tiene ¡°muy poco margen de acci¨®n¡± y funciona m¨¢s como un articulador de otras entidades: gran parte de la pol¨ªtica educativa para los colegios depende de los gobernadores y alcaldes, y la educaci¨®n superior se compone de instituciones aut¨®nomas. ¡°Casi el 95% del presupuesto es dedicado al funcionamiento [como el pago de sueldos] y el Ministerio no puede tomar ninguna decisi¨®n sobre esa parte. Le queda menos del 10% para inversi¨®n¡±, dice.
Tampoco ha ayudado el recambio constante de jefes y vicejefes de cartera. ¡°Hist¨®ricamente, los ministros de Educaci¨®n no han llegado con gran experiencia y su primer a?o era de capacitaci¨®n. Pero al menos duraban lo suficiente para hacer algo en los dos a?os restantes¡±, explica el experto en una llamada.
Las universidades
La meta m¨¢s medi¨¢tica del Gobierno es la ampliaci¨®n de cupos universitarios. Ha sido publicitada una y otra vez, se vincula a las prioridades del presidente de fortalecer la educaci¨®n p¨²blica y tiene un n¨²mero sonoro: 500.000 en cuatro a?os. Por eso, gran parte del debate tras el Consejo de Ministros se concentr¨® en este punto. El exministro Jos¨¦ Manuel Restrepo cuestion¨® en X que apenas se han abierto 64.000 cupos, un cumplimiento del 12%. Rojas le respondi¨® que son 122.000, una cifra que en todo caso est¨¢ muy lejos de la meta. Adem¨¢s, los expertos consultados se?alan que no aparece en los sistemas de informaci¨®n p¨²blica del Ministerio y que no saben de d¨®nde sale.
Gloria Bernal, directora del Laboratorio de Econom¨ªa para la Educaci¨®n de la Universidad Javeriana, comenta por tel¨¦fono que hay m¨¢s problemas. Explica, por ejemplo, que sus an¨¢lisis con cifras previas reflejan que la mayor¨ªa de las plazas nuevas no est¨¢ en las universidades de mayor calidad. Tambi¨¦n se?ala el desfinanciamiento del ICETEX, encargado de dar cr¨¦ditos para estudios universitarios en instituciones p¨²blicas y privadas: la entidad ha pasado de otorgar 50.000 pr¨¦stamos en 2024 a proyectar 10.000 para 2025.
La decisi¨®n del Gobierno de pagar todas las matr¨ªculas en las universidades p¨²blicas ha beneficiado a decenas de miles de estudiantes, pero ha profundizado los problemas financieros de las instituciones. Elizabeth Bernal, secretaria general de Asociaci¨®n Colombiana de Universidades (Ascun), comenta en una llamada telef¨®nica que algunos pagos solo llegaron en diciembre y que muchas instituciones estuvieron todo un a?o sin esos recursos, lo cual produjo retrasos en el pago de sueldos. ?scar Dom¨ªnguez, director ejecutivo de la asociaci¨®n, agrega que esto se suma a deudas impagas desde hace a?os. ¡°?Cu¨¢ndo va a cumplir el Gobierno con esa deuda? ?Cu¨¢ntas posibilidades hay de hacer sostenible esa gratuidad?¡±, cuestiona.
Hay, adem¨¢s, una relaci¨®n tensa entre las universidades privadas y Rojas. Dom¨ªnguez se?ala que el ministro ha sido distante y ha consolidado la tendencia de ¡°estatizar todo¡±. ¡°Ha sido claro en decir que toda la orientaci¨®n est¨¢ para los p¨²blicos. Eso desconoce la realidad¡±, dice. Gloria Bernal, de la Javeriana, afirma que el funcionario ¡°tiene un sesgo ideol¨®gico¡± que lo ha llevado a recortar los cr¨¦ditos del ICETEX y a dialogar menos que sus antecesores. ¡°Se est¨¢ reuniendo constantemente con los estudiantes y eso es loable. Pero tiene que reunirse con el resto del sector¡±, resalta. Tanto ella como los dos directivos de Ascun se?alan que Rojas desecha los espacios disponibles en las privadas y que estos podr¨ªan usarse para ampliar la cobertura mientras se fortalecen las p¨²blicas.
Este peri¨®dico solicit¨® una entrevista con el ministro Rojas para incluir su visi¨®n sobre los reclamos. La respuesta fue que el funcionario no pod¨ªa atender llamadas porque se encontraba fuera de Bogot¨¢ y que las preguntas pod¨ªan tramitarse por el sistema de peticiones, quejas y reclamos del ministerio.
Los colegios y jardines
Con esas metas y tensiones, la educaci¨®n b¨¢sica ha quedado relegada. En el Consejo de Ministros, Rojas argument¨® que ¡°muchos de los incumplimientos tienen que ver con las sedes universitarias¡± y culp¨® a sus predecesores por la falta de una oficina de infraestructura en el Ministerio. No mencion¨® la educaci¨®n b¨¢sica, m¨¢s all¨¢ de los problemas del sistema de salud de maestros. ?ngel P¨¦rez, profesor del Instituto Alberto Merani y antiguo subsecretario de Educaci¨®n de Bogot¨¢, comenta por tel¨¦fono que esto se debe a que los universitarios tienen mayor capacidad de movilizaci¨®n pol¨ªtica. ¡°Los j¨®venes tienen voz, pero los ni?os no. Nadie los representa en esta sociedad y nadie lucha por ellos¡±, afirma.
Los colegios, sin embargo, enfrentan un sinn¨²mero de problemas. P¨¦rez se?ala que algunos son estructurales: la ca¨ªda en la natalidad, la baja calidad, las carencias de infraestructura ¡ªmiles de ni?os de regiones con altas temperaturas asisten a clase sin ventiladores o aires acondicionados¡ª. Su cr¨ªtica es que no ve mejoras. Los datos del Ministerio muestran que la deserci¨®n, por ejemplo, pas¨® de 333.000 ni?os en 2021 a 335.000 en 2023. Es una cifra alta cuando se la compara a la del a?o previo a la pandemia (274.000 en 2019) y es esperable que aumente ante las crisis de seguridad en zonas como el Cauca. Asimismo, hay un incremento en la matr¨ªcula del preescolar, pero P¨¦rez matiza que no se debe a una pol¨ªtica p¨²blica consolidada, sino a que algunos colegios est¨¢n abriendo nuevos niveles para sobrevivir ante la ca¨ªda en la natalidad.
Los logros se limitan, seg¨²n el experto, a algunos acuerdos con el sindicato de maestros Fecode para mejorar las condiciones laborales, especialmente en las zonas rurales. Y lamenta que no incluyan puntos de calidad educativa o infraestructura. Bernal, de la Javeriana, agrega la aprobaci¨®n el a?o pasado de una ley para promover la educaci¨®n socioemocional en los colegios. ¡°Hasta ahora, el debate siempre estaba en lo cognitivo y es importante que tambi¨¦n hablemos de lo emocional. Como siempre, el desaf¨ªo va a estar en la financiaci¨®n¡±, se?ala.
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