Una fundaci¨®n compra tierras privadas en la Patagonia para regenerarlas y don¨¢rselas al Estado
La fundaci¨®n Rewilding Argentina restaura ecosistemas y revierte la extinci¨®n de especies en el noroeste de la provincia de Santa Cruz
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En el noroeste de la provincia de Santa Cruz, en la Patagonia argentina, los paisajes moldeados por glaciares y volcanes hace millones de a?os son tan impactantes como inexplorados. En la soledad y el silencio s¨®lo quebrado por el viento asoman ca?adones jur¨¢sicos, estepas, lagos, colores vibrantes, tesoros arqueol¨®gicos y vida silvestre.
Parte de este paisaje est¨¢ protegido por el Parque Nacional Patagonia, a 2.000 kil¨®metros de la ciudad de Buenos Aires, entre las localidades de Los Antiguos y Perito Moreno, en una zona codiciada por las mineras y lejos del turismo de masas. Es uno de los ¨²ltimos refugios ambientales del pa¨ªs que conserva y restaura su esencia salvaje.
Desde 2015, la Fundaci¨®n Rewilding Argentina, con el apoyo de Freyja Foundation, trabaja en el proyecto Parque Patagonia, que desarrolla un modelo econ¨®mico donde la vida silvestre y las personas prosperan al recuperar sus ecosistemas naturales. Con experiencia en otras regiones del pa¨ªs, los conservacionistas pretenden revertir la extinci¨®n de especies a trav¨¦s de la ¡°producci¨®n de naturaleza¡±, la intervenci¨®n activa en la recuperaci¨®n de los h¨¢bitats originales.
As¨ª, los cient¨ªficos y sus equipos reinsertan animales en extinci¨®n, siguen por GPS a pumas, choiques y guanacos para observar su comportamiento, detectan movimientos por c¨¢maras trampa y regresan los humedales a tierras desgastadas por el sobrepastoreo. En Argentina, las leyes de protecci¨®n y conservaci¨®n existen, pero no hay pol¨ªticas p¨²blicas que promuevan la restauraci¨®n a trav¨¦s de la reintroducci¨®n o suplementaci¨®n de especies.
¡°Creo que la extinci¨®n es para siempre y es irreversible y no sabemos el efecto cascada que tiene la desaparici¨®n de una especie. Trabajar para revertir la crisis de extinci¨®n y demostrar que la restauraci¨®n es posible es mi mayor aspiraci¨®n¡±, apunta la bi¨®loga Sof¨ªa Heinonen, de 54 a?os, directora de Rewilding Argentina, activista apasionada, reconocida por la cadena inglesa BBC como una de las mujeres m¨¢s influyentes e inspiradoras del mundo y disc¨ªpula del fallecido empresario y ambientalista norteamericano Douglas Tompkins.
¡°Somos optimistas. En Patagonia estamos viendo c¨®mo se recuperan las poblaciones de guanacos y pumas simplemente con eliminar amenazas y se est¨¢n recuperando poblaciones del chinchill¨®n anaranjado y de coipos (un roedor grande) con manejo activo de nuestra parte¡±, explica Sebasti¨¢n Di Martino, director de conservaci¨®n de la organizaci¨®n.
Los suelos en la regi¨®n est¨¢n desgastados por la hist¨®rica producci¨®n ganadera, agr¨ªcola y forestal. La cr¨ªa de ovejas fue la principal fuente econ¨®mica en el siglo pasado, con su auge en la d¨¦cada de 1970. En los 80, la industria sint¨¦tica golpe¨® al sector y en 1991 la erupci¨®n del volc¨¢n Hudson en Chile dej¨® a parte del territorio bajo las cenizas y le dio el golpe de gracia.
Compran para restaurar y donar al Estado
Ahora, la fundaci¨®n compra terrenos privados para restaurarlos y los dona al Estado. Adem¨¢s, trasloca animales que desaparecieron desde otras ¨¢reas, lo que tiene el efecto de una transfusi¨®n de sangre que salva al enfermo. Existen experiencias de este tipo exitosas en el norte del pa¨ªs, y en la Patagonia ya hay acuerdo para intercambiar choiques y huemules con Chile.
Emanuel Galeto, coordinador de rewilding (retorno a la vida silvestre) del proyecto Parque Patagonia vive en la Estaci¨®n Biol¨®gica El Unco, en una antigua estancia de cr¨ªa de ganado ovino, donde se restaura un humedal. El juncal estaba empobrecido, pero en cuatro a?os multiplic¨® su cobertura y calidad con acciones directas: pas¨® de ocho hect¨¢reas a 30.
Para ello se reintrodujeron coipos que pronto se reprodujeron. Los roedores se alimentan del junco y construyen plataformas que abren caminos para que fluya el agua y regresen las aves. En tres a?os aument¨® ocho veces la detecci¨®n de gallinetas, cuya poblaci¨®n estaba en retracci¨®n.
Heredera del legado de Tompkins Conservation, la Fundaci¨®n Rewilding Argentina fue creada en 2010 por conservacionistas argentinos para continuar el trabajo que ya se realizaba con el Estado nacional, los gobiernos provinciales, otras organizaciones ambientalistas y fil¨¢ntropos. La idea era restaurar, no s¨®lo conservar. Y esa es precisamente la propuesta de las Naciones Unidas para el per¨ªodo 2021-2030 para los ecosistemas da?ados. En 2019, la ONU report¨® que un mill¨®n de especies se encontraban en peligro inminente de extinci¨®n en el mundo.
Sof¨ªa Heinonen trabaj¨® con Tompkins cuando el ecologista estadounidense don¨® miles de hect¨¢reas para proteger el Iber¨¢, en Corrientes, donde hoy camina otra vez el yaguaret¨¦, el gran felino que estaba pr¨¢cticamente extinto. ¡°Era un visionario. No s¨®lo ten¨ªa convicci¨®n, sino la disciplina del escalador que no puede dar un paso en falso¡±, dice al recordar a su mentor. ¡°Estaba pendiente de seguir las reglas de la naturaleza y no las del hombre. Para ¨¦l no hab¨ªa imposibles¡±.
Siguiendo sus pasos, junto a un equipo de 150 personas, Heinonen dirige cuatro proyectos de restauraci¨®n en Argentina (Iber¨¢, El Impenetrable, Patagonia y Patagonia Azul), sitios en desarrollo de turismo de naturaleza. La organizaci¨®n don¨® 407.000 hect¨¢reas para nueve parques nacionales y provinciales, impulsa la reintroducci¨®n de 14 especies e investiga a otra decena. Heinonen cree que traer de vuelta a la fauna permite so?ar que el calentamiento global no va a ganar la partida y cree que se pueden crear proyectos escalables que inspiren a otros lugares de Sudam¨¦rica.
Avistaje de fauna
¡°Hoy es dif¨ªcil encontrar que la naturaleza vibre y est¨¦ exuberante. La nueva propuesta es tener lugares tur¨ªsticos de avistaje con mucha fauna y mansa¡±, dice Heinonen. Sin embargo, en el Parque Patagonia, los guanacos todav¨ªa se mueven en libertad. Ver a estos herb¨ªvoros es un espect¨¢culo ¨²nico, en especial durante las migraciones de verano, cuando suben a las mesetas altas y en invierno, cuando descienden hacia el r¨ªo Pinturas.
Para ello, la fundaci¨®n baja los alambrados en las rutas e incentiva la reducci¨®n de la velocidad de los coches para facilitar la migraci¨®n de las especies. La directora de Rewilding Argentina explica que, adem¨¢s, intentan restablecer los mallines que se forman con las vertientes, hoy pisoteados por caballos, vacas y ovejas. ¡°Lo que hacemos es restaurar los humedales, lograr que el agua vuelva a fluir. A partir de ah¨ª se regenera la fauna y atrae a much¨ªsima m¨¢s¡±, subraya.
La organizaci¨®n trabaja con las comunidades y apunta a generar nuevas econom¨ªas y turismo de naturaleza de baja escala, pero con aporte del conocimiento local. Facundo Epul es gu¨ªa de turismo desde 2020. Es uno de los emprendedores que prosper¨® con el regreso de la fauna y se convirti¨® en pionero en el avistaje de c¨®ndores andinos y pumas a trav¨¦s del senderismo. Vio un puma por primera vez cuando era chico y, desde entonces, sinti¨® fascinaci¨®n por el felino americano, que llega a pesar 90 kilos. Hoy acompa?a a turistas y aventureros a verlo en su h¨¢bitat. ¡°Hay que ir despacio para concentrarse en el paisaje y fotografiarlos sin asustarlos ni alertarlos¡±, advierte.
Uno de los avistajes es en la meseta Sumich, camino al Portal del Ca?ad¨®n Pinturas, donde es posible verlo desde una distancia segura en una caminata de seis horas por el campo. Los pumas tienen el color de la estepa y, aunque no es f¨¢cil encontrarlos, cada vez se dejan ver m¨¢s. Facundo dice que los pumas ya saben que all¨ª nadie los caza.
Las huellas del pasado
En Argentina, el turismo de naturaleza representa el 30% de los ingresos del sector y es el segmento con mayor potencial de crecimiento. Para atraer a los visitantes, una estrategia es dotar de servicios de calidad a los territorios salvajes y con fauna. En Parque Patagonia, hay tres campings de uso p¨²blico con protecci¨®n en madera para evitar los vientos, ba?os secos y 40 kil¨®metros de senderos para disfrutar de la naturaleza con el menor impacto posible.
Bajada de los Toldos es una de esas v¨ªas. Por all¨ª se cruza el prehist¨®rico Ca?ad¨®n del R¨ªo Pinturas hacia un balc¨®n de cavernas: la mundialmente conocida Cueva de las Manos, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco (1999), donde se conservan pinturas rupestres de entre 1.300 y 9.300 a?os.
Sobre los murallones de piedra se superponen dibujos con escenas de caza, animales, figuras geom¨¦tricas y unas 2.000 manos que los pobladores originarios dejaban como una marca de identidad. ¡°Utilizaban un hueso hueco donde pon¨ªan la pintura, soplaban, tapaban la mano por completo y, cuando la sacaban, quedaba perfectamente marcada con el efecto de un aerosol. Se llama negativo de las manos¡±, cuenta Jasm¨ªn Sanchez, gu¨ªa del parque provincial.
En la zona, hay 89 sitios arqueol¨®gicos que recuerdan el paso de los pretehuelches, pueblos n¨®madas cazadores y recolectores. Uno de los m¨¢s sorprendentes e inexplorados es el alero de Charcamata. Claudio Figueroa, gu¨ªa de Zoyen Turismo, cuyo emprendimiento tambi¨¦n creci¨® junto a la restauraci¨®n de la naturaleza, realiza excursiones a la zona. Se llega despu¨¦s de una hora de caminata para contemplar de cerca y en soledad un alero de 80 metros con pinturas de m¨¢s de 5.500 a?os. Se cree que era un lugar de rituales o una ¡°maternidad¡± debido a los dibujos que representan la fertilidad, mujeres pariendo y s¨ªmbolos f¨¢licos.
A poca distancia de ese refugio cultural, en la inmensidad de la estepa y en medio de la nada, para comprender todo lo andado, en noviembre se abrir¨¢ un gigantesco Planetario y Centro de Interpretaci¨®n cuyos fondos fueron donados por la f¨ªsica argentina Elsa Rosenvasser Feher, una amante de la Patagonia y de sus incre¨ªbles cielos estrellados.
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