La deforestaci¨®n de la Amazonia cae un 22% en el primer balance anual desde el regreso de Lula al poder

La medici¨®n m¨¢s precisa y fiable ha confirmado la tendencia apuntada por los datos preliminares en los ¨²ltimos meses. La deforestaci¨®n en la Amazonia cay¨® un 22,3% entre agosto de 2022 y julio de 2023, seg¨²n el ¨²ltimo balance anual realizado por el Instituto de Investigaciones Espaciales de Brasil (INPE) y divulgado este jueves. Es decir, la mayor selva tropical del mundo, un ecosistema clave para mitigar el calentamiento global, perdi¨® en ese periodo 9.001 kil¨®metros cuadrados, una superficie equivalente al tama?o de Chipre. El dato es una buena noticia para el presidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva, que desde su regreso al poder ha colocado la protecci¨®n de la Amazonia y el medioambiente entre sus prioridades. Durante el mandato de Jair Bolsonaro la tala ilegal aument¨® de manera acelerada y solo en su ¨²ltimo a?o cambi¨® la tendencia para empezar a disminuir. Fue considerado un villano ambiental planetario.

El dato de deforestaci¨®n anual en la Amazonia es una especie de examen de fin de curso para los gobernantes brasile?os de cara al exterior. Todos ellos son conscientes de que, desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas, el mundo mide el desempe?o de su pa¨ªs en materia ambiental por el porcentaje de aumento o disminuci¨®n. Durante la campa?a electoral, Lula prometi¨® deforestaci¨®n cero para 2030, un objetivo de lo m¨¢s ambicioso.

Al presentar los resultados, la ministra de Medio Ambiente y Cambio Clim¨¢tico, Marina Silva, declar¨®: ¡°Este resultado es fruto del trabajo de todos nosotros. Es un trabajo para el que ya ten¨ªamos know-how [conocimientos t¨¦cnicos] de nuestra gesti¨®n anterior. Ahora lo hemos actualizado y estamos viendo estos resultados¡±, ha explicado la veterana pol¨ªtica que ya ostent¨® ese mismo cargo hace dos d¨¦cadas, tambi¨¦n con Lula. Fue el periodo en el que la deforestaci¨®n de la Amazonia cay¨® de manera m¨¢s abrupta. Durante sus cinco a?os como ministra en aquella primera etapa, la tala ilegal se redujo a la mitad hasta los 12.900 kil¨®metros cuadrados.

Los estragos del cambio clim¨¢tico tambi¨¦n se notan en la Amazonia. El rio Amazonas, el m¨¢s largo y caudaloso del mundo, sufre una sequ¨ªa hist¨®rica agravada por El Ni?o mientras Manaos y otras ciudades de la regi¨®n llevan semanas envueltas en un humo asfixiante que procede de los incendios ilegales.

Lula tiene previsto viajar a la COP28, que empieza a finales de mes en Dub¨¢i. Sin duda, el mandatario brasile?o esgrimir¨¢ en la cumbre clim¨¢tica de la ONU esta ca¨ªda del 22,3% en la deforestaci¨®n en la Amazonia como baza negociadora. Tambi¨¦n es de esperar que la utilice en las complejas negociaciones que Mercosur mantiene con la Uni¨®n Europea para intentar cerrar de una vez por todas el acuerdo comercial, atascado por exigencias medioambientales. Uruguay ha dado un ultim¨¢tum para cerrarlo antes de fin de a?o. Y tanto Lula como el presidente de Espa?a, Pedro S¨¢nchez, se han comprometido ha reforzar los esfuerzos para esa fecha ahora que Brasil preside Mercosur y Espa?a, la UE.

El Instituto de Investigaciones Espaciales elabora este balance anual de la deforestaci¨®n en base a las mediciones hechas por sat¨¦lite con un sistema llamado Prodes, que es mucho m¨¢s preciso para calcular la superficie arb¨®rea desaparecida que el sistema Deter, que ofrece datos semanales pero basados en las alertas que usan los equipos de agentes medioambientales para movilizar a los inspectores.

El presidente Lula y Marina Silva aparcaron sus diferencias para unirse en la campa?a electoral con la misi¨®n compartida de derrotar a Bolsonaro en las urnas. La exigencia de la antigua recolectora de caucho para apoyar al l¨ªder de la izquierda brasile?a fue que la pol¨ªtica de protecci¨®n medioambiental fuera transversal. Exig¨ªa voluntad pol¨ªtica y medios. La ministra Silva se ha felicitado de que los inspectores ambientales se hayan duplicado con este Gobierno.

Bolsonaro lleg¨® al poder en 2018 con un discurso de desprecio de las pol¨ªticas ambientales y de negaci¨®n de la emergencia clim¨¢tica que envalenton¨® a todo tipo de delincuentes que explotan ilegalmente la Amazonia. Para el antiguo militar, la v¨ªa m¨¢s eficaz de combatir la miseria en esa regi¨®n, la m¨¢s pobre de Brasil, era explotar las riquezas de la selva tropical.

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