La cara B de la alegre Celia
Dos vol¨²menes de impactantes cartas a una amiga argentina retratan los ¨²ltimos a?os de Elena Fort¨²n, marcados por la incomprensi¨®n familiar hacia su homosexualidad
El renacer de Elena Fort¨²n (1886-1952) en la democracia se lo debemos en primer lugar a la profesora de la Universidad de C¨¢diz Marisol Dorao, quien al hilo del centenario de su nacimiento public¨® en la editorial Aguilar (la de cabecera de toda la obra de Fort¨²n hasta que Renacimiento tom¨® el testigo) un texto que hab¨ªa permanecido in¨¦dito por su componente pol¨ªtico. Dorao lo hab¨ªa recuperado de manos de la nuera de la escritora, Anne Marie Hugh, residente en Nueva York. Se trataba de Celia en la revoluci¨®n, y la nueva entrega del ciclo fue presentada con todos los honores en la BNE en 1987, contando con la presencia entusiasta de Carmen Mart¨ªn Gaite, quien por momentos acarici¨® la idea de escribir la biograf¨ªa de Fort¨²n (lo desestim¨® por falta de informaci¨®n).
Sin embargo, el experimento no cuaj¨® del todo. La novela apenas ha tenido papel en el corpus narrativo sobre la Guerra Civil y me temo que sigue sin tenerlo, a pesar del encomiable esfuerzo que hac¨ªa Andr¨¦s Trapiello en su primera edici¨®n en Renacimiento, en 2016, consider¨¢ndola un fruto directo y privilegiado de la experiencia de la guerra en ciudades cruciales como Madrid, Valencia y Barcelona. En todo caso, Dorao no solo se trajo de Nueva York el manuscrito de Celia en la revoluci¨®n, sino que vino con papeles personales de la escritora gracias a los cuales pudo escribir Los mil sue?os de Elena Fort¨²n (1999), una primera biograf¨ªa, valios¨ªsima por suministrar informaci¨®n desconocida ¡ªy lo desconoc¨ªamos todo¡ª de la vida de Fort¨²n en el exilio y de su regreso a Espa?a en 1948, cuando viaj¨® en solitario queriendo tantear las posibilidades de una vuelta definitiva. Dorao culmin¨® el libro al l¨ªmite de sus fuerzas, debido a las primeras evidencias del alzh¨¦imer que sufr¨ªa y del que fallecer¨ªa en 2017. Con todo, abri¨® la puerta a futuras estudiosas de la obra de Fort¨²n, entre las que me permito destacar por su tenacidad a Mar¨ªa Jes¨²s Fraga. Y desde entonces se ha procedido a la recuperaci¨®n de ¡°las Celias¡± (me valgo de la expresi¨®n que utilizaba la propia Fort¨²n): 13 libros publicados por Renacimiento, entre los cuales sobresale otro in¨¦dito, Oculto sendero, una novela ajena al conocido ciclo infantil-juvenil y donde Fort¨²n hace una valiente defensa del lesbianismo en el contexto de la vida espa?ola de los a?os veinte. El texto causar¨ªa un notable impacto al publicarse en 2016 por la resignificaci¨®n que supon¨ªa de la homosexualidad femenina en fecha tan temprana: lejos de las miradas aviesas, despectivas y hostiles, hab¨ªa mujeres que rechazaban el matrimonio, que amaban la compa?¨ªa de otras mujeres y eran personas cultas, refinadas, sensuales, expresi¨®n de un orden de vida simplemente diferente. No eran marimachos.
Y en paralelo a la recuperaci¨®n de su obra narrativa, asistimos en los ¨²ltimos a?os al conocimiento de su importante correspondencia. De modo que con la nueva y tercera edici¨®n de Celia en la revoluci¨®n ¡ªque incorpora como ap¨¦ndice un valioso texto autobiogr¨¢fico de la autora¡ª nos llegan ahora dos vol¨²menes con las cartas dirigidas a su amiga argentina In¨¦s Field entre 1948 y 1951, ambos editados por Nuria Capdevila-Arg¨¹elles. Dos libros estremecedores que no pueden leerse sin ser previamente conscientes como lectores de que vamos a adentrarnos en un universo de sufrimiento infinito.
Tuve la oportunidad de conocer de primera mano la ¨²ltima y desdichada etapa de Elena Fort¨²n, la que transcurre entre 1948 y 1952, al leer su correspondencia cruzada con Carmen Laforet, utilizada en la redacci¨®n de la biograf¨ªa de la autora de Nada. Lo cierto es que aquellas primeras impresiones, siendo impactantes, quedaron cortas. Fort¨²n deb¨ªa haber nacido en una sociedad m¨¢s favorable. Pero naci¨® en 1886, y la relativa burbuja de libertad vivida por las mujeres del Lyceum Club chocar¨ªa con una atm¨®sfera social y familiar de abierto rechazo.
Cuando Fort¨²n visita a su hijo, Luis de Gorbea Aragoneses, en Nueva Jersey a finales de 1949, queda horrorizada al ver de cerca su desequilibrio emocional: la relaci¨®n de amor-odio que mantiene con ella a pesar de los a?os transcurridos. Necesita a su madre tanto como detesta a Elena Fort¨²n y la independencia de costumbres que representa. En la soledad moral en la que vivi¨® la escritora sus ¨²ltimos a?os, en el abismo que se abri¨® a sus pies por un acontecimiento que no desvelar¨¦ porque es el punto de inflexi¨®n en su vida y que las cartas a In¨¦s Field recogen con exactitud, se halla la espina dorsal del epistolario que ahora nos ofrece Capdevila-Arg¨¹elles.
La edici¨®n es aturullada y falta de rigor acad¨¦mico, pero el contenido es impresionante. En sus cartas a la te¨®loga argentina ella no es la escritora, es Encarnaci¨®n (Aragoneses Urquijo), su verdadero nombre. Una mujer que se cree (injustamente) la responsable de haber destrozado la felicidad dom¨¦stica de su marido y de su hijo, y que ante la desolaci¨®n a la que se enfrenta en lo sucesivo elige a su amiga y compa?era como depositaria de sus dificultades y, en definitiva, de su final. Eso debi¨® de sostenerla un tiempo. Pero sus cartas a Field contienen adem¨¢s las fibras de una realidad latente, y esta es, podr¨ªa ser, que su deseo de comunicarse es secundario porque el impulso de la escritora es interior. Y bien podr¨ªan titularse los dos vol¨²menes de su correspondencia con Field as¨ª: diario p¨®stumo del injusto funcionamiento del mundo.
SABES QUI?N SOY
Autor: Elena Fort¨²n.
Edici¨®n: Nuria Capdevilla-Arg¨¹elles.
Editorial: Renacimiento, 2020.
Formato: tapa blanda (296 p¨¢ginas, 19,90 euros).
MUJER DOLIENTE. CARTAS A IN?S FIELD
Autor: Elena Fort¨²n.
Edici¨®n: Nuria Capdevilla-Arg¨¹elles.
Editorial: Renacimiento, 2020.
Formato: tapa blanda (276 p¨¢ginas, 19,90 euros).
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