¡®Arcana mundi¡¯: ?magia o religi¨®n, alquimia o ciencia, astrolog¨ªa o astronom¨ªa, brujer¨ªa o filosof¨ªa?

En el a?o 158 de nuestra era, el escritor romano Apuleyo, c¨¦lebre hoy por su magn¨ªfica novela El asno de oro ¡ªsobre las andanzas de Lucio, un aprendiz de brujo malogrado y transformado en burro¡ª fue procesado por una acusaci¨®n de magia ante un tribunal de una de las ciudades del ?frica romana. Hab¨ªa iniciado una relaci¨®n con una viuda llamada Pudentila, madre de un excompa?ero suyo de estudios plat¨®nicos en Atenas, que hab¨ªa acabado en matrimonio con aquella mujer, diez a?os mayor que A...

En el a?o 158 de nuestra era, el escritor romano Apuleyo, c¨¦lebre hoy por su magn¨ªfica novela El asno de oro ¡ªsobre las andanzas de Lucio, un aprendiz de brujo malogrado y transformado en burro¡ª fue procesado por una acusaci¨®n de magia ante un tribunal de una de las ciudades del ?frica romana. Hab¨ªa iniciado una relaci¨®n con una viuda llamada Pudentila, madre de un excompa?ero suyo de estudios plat¨®nicos en Atenas, que hab¨ªa acabado en matrimonio con aquella mujer, diez a?os mayor que Apuleyo e inmensamente rica. La familia de su primer marido acus¨® al escritor de usar la brujer¨ªa y los f¨¢rmacos para seducirla, lo que pod¨ªa haber acabado con su condena a muerte. Sin embargo, Apuleyo acab¨® convenciendo al tribunal de su inocencia con un discurso ¡ªque conservamos ¨ªntegro¡ª en el que justificaba su inter¨¦s en el mundo de los esp¨ªritus por su condici¨®n de fil¨®sofo. Argumentaba Apuleyo en su defensa que otros muchos fil¨®sofos, como Pit¨¢goras o Emp¨¦docles, hab¨ªan sido tambi¨¦n acusados injustamente del cargo de brujer¨ªa.

Algunos fil¨®sofos presocr¨¢ticos muchas veces parecen m¨¢s bien santones o taumaturgos que pensadores l¨®gicos o cient¨ªficos

Esta an¨¦cdota, entre muchos otros textos relacionados con lo que hoy llamar¨ªamos ¡°ciencias ocultas¡±, es solo uno entre los muchos testimonios del inter¨¦s por la magia, la adivinaci¨®n, la astrolog¨ªa o la demonolog¨ªa que hab¨ªa en la vida cotidiana del mundo antiguo: desde la pol¨ªtica a la judicatura, de ah¨ª a la literatura o las artes, se puede decir que todo entonces estaba, en cierto modo, marcado por esa pasi¨®n por lo sobrenatural. Pero, ?de qu¨¦ estamos hablando exactamente?: ?magia o religi¨®n, alquimia o ciencia, astrolog¨ªa o astronom¨ªa, brujer¨ªa o filosof¨ªa? Sobre todo cuando recordamos los nombres de algunos fil¨®sofos presocr¨¢ticos, como los citados, es dif¨ªcil trazar la l¨ªnea divisoria, pues muchas veces parecen m¨¢s bien santones o taumaturgos que pensadores l¨®gicos o cient¨ªficos.

Desde hace al menos cuatro d¨¦cadas la investigaci¨®n en filolog¨ªa cl¨¢sica, historia antigua y ciencias de las religiones se ha centrado con preferencia sobre temas como estos y, sobre todo, ha examinado su incidencia en la historia social, pol¨ªtica, de las mentalidades y las religiones. Justamente por aquel entonces se public¨® en la editorial acad¨¦mica de la Johns Hopkins University un volumen que, en cierto modo, simbolizaba el inter¨¦s moderno por desmenuzar todo el conglomerado del ocultismo antiguo como v¨ªa de conocimiento de aquel mundo prestigioso, pero a veces tan mal entendido, que denominamos cl¨¢sico, y que tanto tiene que ver con nuestra actual idiosincrasia. Se trata del libro del estudioso suizo Georg Luck Arcana mundi. Magia y ciencias ocultas en el mundo griego y romano (1985). Recientemente rescatado en Alianza, el libro presenta de una amplia antolog¨ªa de textos comentados en seis apartados, con sus seis introducciones, y enumera las razones por las que no podemos entender a los griegos y romanos sin estas facetas que no se compadecen con la fama de racionalidad y serenidad que les solemos atribuir. Y es que casi todos los grandes escritores antiguos, desde los naturalistas como Plinio a los fil¨®sofos como Plat¨®n o Arist¨®teles, evidencian un notable ¨¦nfasis en ¡°lo sobrenatural¡±, simplemente como la parte oculta de la naturaleza y del ser humano que hay que estudiar y conocer seriamente.

Pero el inter¨¦s por estos textos, que nos acercan a una antig¨¹edad muy diferente a la de un logos de rectas formas, se remonta m¨¢s atr¨¢s en el tiempo. De hecho, hace ya mucho que sabemos que el consabido el ¡°paso del mito al logos¡±, parafraseando el famoso libro de W. Nestle (1940), tiene mucho de simplificaci¨®n positivista, y que el pensamiento m¨ªtico o m¨¢gico sigue siendo muy relevante ¡ªpese a la genealog¨ªa progresiva que quiso establecer Frazer como paso previo a una siempre mitificada ciencia¡ª tanto para los antiguos como para nosotros. Tras algunos trabajos pioneros, fue el revolucionario estudio Los griegos y lo irracional de E.R. Dodds (1951) el que marc¨® un antes y un despu¨¦s. Otros grandes estudiosos del siglo XX, cuya influencia se reconoce en la obra de Luck y que han trabajado sobre la confluencia entre magia, filosof¨ªa y religi¨®n, son A.J. Festugi¨¨re o A. D. Nock, herederos a su vez de estudios pioneros en siglos anteriores, como los de Fontenelle, Creuzer, Lobeck o Bouch¨¦-Leclercq. Hoy todos est¨¢n superados, tambi¨¦n en cierto modo Luck, pero hay que reconocer el camino que marcaron.

En el comienzo, parecen apuntar estos textos, fue la soph¨ªa, que adopta varias m¨¢scaras o vertientes que tuvieron muy diversos desarrollos. Entre las analog¨ªas y las diferencias, el lector puede tratar de ir deslindando entre magia y religi¨®n, con dominios que se tocan de cerca, como el de la adivinaci¨®n, el ensalmo o la plegaria, o de investigar a la par, como propone Luck, los paralelos entre magia y filosof¨ªa, en los campos de la astronom¨ªa, la teurgia y la alquimia. Otra manera posible de establecer delimitaciones est¨¢ en la m¨ªstica, como esboz¨® en su d¨ªa Ren¨¦ Gu¨¦non, trazando las diferencias entre ocultismo y esoterismo. En todo caso, el fondo de pensamiento com¨²n se basa en la noci¨®n de que existe una ¡°fuerza¡± ¡ªla d?namis, poder de ¨ªndole divino, o mejor dicho dem¨®nico¡ª que vincula todo en el universo en una especie de symp¨¢theia, o conexi¨®n c¨®smica, que aparece en varias escuelas filos¨®ficas, desde el platonismo al estoicismo, y en diversas figuras sapienciales o milagreras, desde Pit¨¢goras a Sim¨®n el Mago. Esta fuerza trascendente, que conecta la materia y la conciencia, se basa en la idea de mediaci¨®n o comunicaci¨®n, otra noci¨®n clave para entender c¨®mo funcionan los d¨¦mones o seres intermedios ¡ªo, a veces, los ¡°hombres divinos¡± (theioi andres, seg¨²n la denominaci¨®n cl¨¢sica)¡ª y los or¨¢culos. De hecho, la noci¨®n de daimon, que atraviesa la historia de la antig¨¹edad desde la ¨¦poca arcaica a la cristiana, se puede rastrear como ejemplo de mediaci¨®n con lo divino en diversas tradiciones esot¨¦ricas, desde un presunto ¡°chamanismo antiguo¡± hasta el caso de ciertos ¡°hombres divinos¡±, de la antig¨¹edad hasta los santos de la Antig¨¹edad tard¨ªa, ya fueran paganos o cristianos, magos orientales o te¨²rgos neoplat¨®nicos.

En torno al siglo II, se da el momento de cambio crucial, que coincide con la emergencia del cristianismo, el auge de nuevos misterios orientales paralelos a este, desde Mitra a Isis, y un aut¨¦ntico boom de lo espiritual

De forma muy sugerente, Luck trata en su introducci¨®n algunas aplicaciones de categor¨ªas en principio extra?as a la religi¨®n antigua y procedentes de la antropolog¨ªa, la psicolog¨ªa o la historia de las religiones ¡ªcomo tab¨², mana, chamanismo, m¨¦dium, etc.¡ª, pero que pueden ser ¨²tiles para dilucidar la especial relaci¨®n con lo divino de algunas de estas figuras cl¨¢sicas. Especialmente fascinantes son los desarrollos desde el comienzo de nuestra era. Los primeros siglos despu¨¦s Cristo muestran un ambiente espiritual apasionante en el Imperio Romano, especialmente el siglo del citado Apuleyo, de Plutarco o Marco Aurelio, tambi¨¦n ¨¦ste devoto de alguna de estas ciencias ocultas. Entre el declive de los or¨¢culos y la descreencia de la religi¨®n tradicional grecorromana, en torno al siglo II. se da el momento de cambio crucial, que coincide con la emergencia del cristianismo ¡ªcon textos muy significativos de dentro y fuera del canon neotestamentario¡ª, el auge de nuevos misterios orientales paralelos a este, desde Mitra a Isis, y un aut¨¦ntico boom de lo espiritual en medio de un mundo en crisis incipiente. Es lo que recoge la afortunada expresi¨®n de Dodds ¡°una ¨¦poca de angustia¡±. En ella, la magia y lo oculto en general, como explica Luck en sus enjundiosas introducciones a cada bloque de textos antologados, son sin duda la clave de b¨®veda.

En suma, los materiales que nos presenta Arcana mundi son b¨¢sicos para una mejor comprensi¨®n del mundo de lo sobrenatural en la antig¨¹edad grecorromana: desde el esoterismo m¨¢s elevado de los m¨ªsticos, te¨²rgos y alquimistas, hasta el ocultismo de amuletos dem¨®nicos, or¨¢culos enigm¨¢ticos, tabellae defixionis o conjuros de amor. La recopilaci¨®n de testimonios y textos marc¨® un punto de referencia para los estudios actuales. Poco despu¨¦s de Luck se public¨® otro volumen fundacional de los estudios sobre el tema, Magika Hiera (1991), editado por Christopher Faraone y Dirk Obbink, a partir del cual surge una imprescindible generaci¨®n de estudiosos. Entre ellos, nombres como Daniel Ogden o Sarah Iles Johnston, pero tambi¨¦n muchos espa?oles, por cierto. Si Luck ya citaba a Caro Baroja y La¨ªn Entralgo, hay que subrayar que, ya desde mediados del siglo pasado, estudiosos como Luis Gil, y su escuela, han trabajado sobre los milagros, los sue?os prof¨¦ticos, los ensalmos y toda esta amalgama cultural con gran repercusi¨®n, hasta llegar a los m¨¢s brillantes estudiosos actuales, como Sof¨ªa Torallas, Raquel Martin, Miriam Blanco o Carlos S¨¢nchez.

Hay varios grupos de investigaci¨®n sobre magia y religi¨®n en las Universidades de Granada, Madrid, Valladolid, Barcelona o M¨¢laga, encabezados por destacados investigadores como Aurelio P¨¦rez Jim¨¦nez ¡ªfundador hace 20 a?os de MHNH. Revista Internacional de Investigaci¨®n sobre Magia y Astrolog¨ªa Antiguas¡ª o Emilio Su¨¢rez de la Torre, organizador de una serie de congresos sobre la magia en la antig¨¹edad grecolatina, entre otros. La investigaci¨®n espa?ola ha aportado grandes avances en los estudios sobre orfismo, hermetismo, or¨¢culos o papiros m¨¢gicos con publicaciones internacionales de gran relevancia. Pero tambi¨¦n ha producido publicaciones para un p¨²blico m¨¢s amplio. Recordar¨¦ s¨®lo tres muy recientemente aparecidas: los libros de Marco Alviz, Vidas de santos paganos (Dykinson, 2022); Miguel Herrero, Cat¨¢basis: El viaje infernal en la Antig¨¹edad (Alianza, 2023), y Diego Chapinal-Heras, La voz de los dioses. Los or¨¢culos y la adivinaci¨®n en el mundo griego (?tico de los Libros, 2023) son tres excelentes ejemplos de alta divulgaci¨®n que, como no puede ser de otra forma, son el resultado de a?os de investigaci¨®n en el marco de estas escuelas. Otros autores espa?oles han seguido tambi¨¦n la senda de Luck a la hora de recopilar, traducir y comentar textos m¨¢s divulgativos sobre magia en la antig¨¹edad, como Fernando Lillo (Fantasmas, brujas y magos en Grecia y Roma, 2013) o Gonzalo Fontana (Sub luce maligna. Antolog¨ªa de textos de la antigua Roma sobre criaturas y hechos sobrenaturales, Contrase?a, 2021).

Los sue?os de emperadores, fil¨®sofos o santos, convenientemente interpretados y literaturizados, cambiaron para siempre la faz del mundo antiguo, como todo este multiforme mundo de lo sobrenatural

Me interesa especialmente destacar, en fin, en este abigarrado mundo de las ciencias ocultas de la antig¨¹edad, algunos campos como el de la adivinaci¨®n, con su variedad de procedimientos, inspirados o de azar, el de los sue?os, como los compilados por Artemidoro en su Onirocr¨ªtica (tan cara a Freud), los signos y prodigios en la paradoxograf¨ªa y todo tipo de literatura prof¨¦tica que acaba verti¨¦ndose en antolog¨ªas ap¨®crifas, como la sibilina o la caldea, de amplio uso en la Antig¨¹edad tard¨ªa. Como apunt¨® Luck, es claro que, en los estudios sobre este cap¨ªtulo fascinante de la historia de las mentalidades en la antig¨¹edad, conviene adoptar la perspectiva de la larga duraci¨®n, que atraviesa todo el mundo cl¨¢sico, desde Homero al primer cristianismo, y que ahora est¨¢ trabajando tambi¨¦n con preferencia la investigaci¨®n espa?ola: un ejemplo estupendo es el de los sue?os prof¨¦ticos y evocadores, desde la taxonom¨ªa simplificada que expone Pen¨¦lope en la Odisea, a los sue?os curativos de Asclepio y las teor¨ªas posteriores del jud¨ªo Fil¨®n o el obispo neoplat¨®nico Sinesio. Y es que los sue?os de emperadores, fil¨®sofos o santos ¡ªlos muy memorables de Santa Perpetua¡ª, convenientemente interpretados y literaturizados, cambiaron para siempre la faz del mundo antiguo, como todo este multiforme mundo de lo sobrenatural.

As¨ª se ve, por ejemplo, en la novela El asno de oro, para terminar donde empezamos, donde se describe con especial vivacidad el ambiente que rodea la metamorfosis de Lucio: es este un mundo plagado de brujas, milagros, sacerdotes ambulantes, m¨¢gicos azares y extraordinarios sue?os. Entre ocultismo y esoterismo, como quer¨ªa Gu¨¦non, quiz¨¢ medie solamente lo sublime ¡ªy en Apuleyo lo encontramos, desde luego, en la memorable f¨¢bula de Amor y Psique, de tan rica recepci¨®n¡ª, que otorga un inolvidable simbolismo m¨ªstico-literario a alguna de las p¨¢ginas que recoge la antolog¨ªa aqu¨ª comentada. Pero cabe recordar que ambas facetas, la popular y la elevada, son dos caras de un mismo y apasionante fen¨®meno que toca lo irracional o lo subconsciente en nosotros y que bien merec¨ªa una investigaci¨®n y una evocaci¨®n como la que nos propone este libro. Es de agradecer que ahora, cuarenta a?os despu¨¦s de su publicaci¨®n, se rescate la recopilaci¨®n de textos que, de cierta forma, inici¨® el desarrollo actual de las investigaciones sobre la pasi¨®n por lo sobrenatural de nuestros queridos cl¨¢sicos.

David Hern¨¢ndez de la Fuente. Es escritor, traductor y catedr¨¢tico de Filolog¨ªa Griega en la UCM.

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