¡®Entrevistes breus amb dones excepcionals¡¯: mujeres al borde de la normalidad

La vida de los textos es impredecible: algunos aguardan durante a?os dentro de un caj¨®n, otros viajan por el mundo y llegan a nuestros escenarios un pel¨ªn tarde. Este es el caso de Entrevistes breus amb dones excepcionals (entrevistas breves con mujeres excepcionales), una obra de Joan Yago que se ha representado antes en Par¨ªs y Montreal que en nuestros lares. Ahora se acaba de estrenar en el TNC, con un montaje dirigido por M¨°nica Bofill e interpretado por seis actrices estupendas. El dramaturgo de La Cal¨°rica escribe teatro pol¨ªtico para todos los p¨²blicos, comedias con ideolog¨ªa que llevan a escena algunos de los temas m¨¢s candentes de nuestra sociedad. Sin ir m¨¢s lejos, la sala Espai Texas est¨¢ recuperando estos d¨ªas Fairfly, el brillante montaje cal¨®rico sobre el timo del emprendimiento.

Entrevistes breus¡­ sorprende por la sencillez de su planteamiento: cinco entrevistas con mujeres exc¨¦ntricas que representan, de diferentes maneras, d¨®nde puede llegar la pr¨¢ctica extrema de la libertad. El autor se ha inspirado en los Estados Unidos de Am¨¦rica y, en especial, en programas televisivos tan fascinantes como Mi extra?a adicci¨®n, donde pod¨ªamos descubrir personajes enamorados de su coche o que com¨ªan tierra todos los d¨ªas. M¨°nica Almirall ejerce de presentadora: la actriz de Atresbandes, que tantos buenos momentos nos ha dado con el director Albert Arribas y que siempre recordaremos como la diva de Opening night, est¨¢ aqu¨ª muy comedida. Entiendo lo que la directora ha querido hacer: no jugar la baza de la farsa o la comedia y tratar a todos los personajes con el m¨¢ximo respeto. El montaje acaba rezumando una extra?a frialdad, y se hace inevitable imaginar qu¨¦ hubiera pasado si lo hubiera dirigido el director cal¨®rico Israel Sol¨¤.

La directora ha querido tratar a las protagonistas con el m¨¢ximo respeto, pero el montaje acaba rezumando frialdad

Elisabet Casanovas interpreta a una modelo ucraniana conocida como ¡°la Barbie humana¡±. Ni el autor, ni la directora ni la int¨¦rprete quieren representarla como una rubia tonta, y su retrato resulta un tanto rob¨®tico y cerebral. (Casanovas est¨¢ mucho mejor en sus otros personajes). Anna Barrachina es una pol¨ªtica republicana que defiende a ultranza el derecho (tan yanqui) a llevar armas de fuego bajo la greguer¨ªa ¡°La soluci¨®n a los tiroteos son m¨¢s armas¡±. No estamos ante una caricatura: este y todos los personajes son perfectamente plausibles. El parecido m¨¢s que razonable de Barrachina con Hillary Clinton despista en un primer momento, pero su defensa alucinada de la libertad la acaba acercando a Isabel D¨ªaz Ayuso. El populismo no tiene fronteras.

Joan Yago tensa las costuras del espectador progre cuando nos pone frente a un personaje como el de Rose Mary Powell (Muntsa Alca?iz), una se?ora que ha decidido vivir como una ni?a de seis a?os. No hay juicios de valor, ni en el texto ni en la interpretaci¨®n de Alca?iz, y este debate sobre la identidad puede llegar a incomodar a personas con ideolog¨ªas diametralmente opuestas. Yolanda Sikara interpreta a una cient¨ªfica que ha llevado su investigaci¨®n sobre el alma humana al extremo de convertir a su propia madre en una atracci¨®n de feria. Finalmente, Miranda Gas defiende a una mujer sure?a adicta a tomar plata coloidal, que a resultas de su extra?a dieta tiene la piel de color azul. ¡°Azul y lesbiana¡±, para m¨¢s inri. La escena a?adida por Yago con los tres se?oros comentando la jugada acaba resultando lo mejor de la funci¨®n: Alca?iz, Barrachina y Casanovas (perfectamente caracterizadas) retratan estupendamente a esos hombres que ya no se siente representados ¡°porque no pertenecen a ning¨²n colectivo¡±. Las transiciones musicales, el impoluto espacio de Joana Mart¨ª y el colorista vestuario de Maria Armengol acaban de configurar la velada. Feliz semana de la mujer.

¡®Entrevistes breus amb dones excepcionals¡¯. Texto: Joan Yago. Direcci¨®n: M¨°nica Bofill. Teatre Nacional de Catalunya, Barcelona. Hasta el 31 de marzo.

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