Carabanchel 34, los pisos de la era de Carmena que atraen a arquitectos daneses

Los pisos de protecci¨®n oficial suelen tener muchos novios, pero lo normal es que atraigan a potenciales moradores interesados en su precio y no tanto a arquitectos que recorren media Europa solo para visitarlos. Ese ha sido el caso de la Fase II de Carabanchel 34, la estrella de la Empresa Municipal de la Vivienda del Ayuntamiento de Madrid, que la semana pasada recibi¨® la visita de una delegaci¨®n de funcionarios daneses provenientes de la ciudad de Aarhus, la segunda m¨¢s grande de Dinamarca.

La promoci¨®n de Carabanchel 34, ubicada en el distrito del sur de la capital,?es la primera del Ayuntamiento con consumo energ¨¦tico casi nulo. Son 25 pisos con certificado Passivhaus, un tipo de construcci¨®n de vanguardia promovido por un instituto privado alem¨¢n que est¨¢ avanzando a pasos r¨¢pidos por Europa y Estados Unidos. Su ¨¦xito no reside tanto en su est¨¦tica, que no permite distinguirlos del resto, como en la t¨¦cnica y materiales empleados, ideados para encapsular la vivienda de modo que no se produzcan p¨¦rdidas de fr¨ªo o calor.

Los futuros inquilinos ser¨¢n doblemente afortunados: pagar¨¢n menos renta por el alquiler del inmueble y tambi¨¦n una factura energ¨¦tica m¨¢s reducida. Un edificio Passivhaus consume un 90% menos que uno ordinario en Espa?a, seg¨²n los promotores de este concepto.

Los 25 pisos forman parte de las m¨¢s de 4.000 viviendas de alquiler social que prometi¨® la anterior alcaldesa, Manuela Carmena. Ser¨¢n sorteados junto con otras viviendas sociales previsiblemente antes de fin de a?o entre los m¨¢s de 20.000 madrile?os inscritos en la lista de solicitantes de alquiler a precio asequible, seg¨²n fuentes de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo, EMVS.

Los daneses, que vinieron a Madrid deliberadamente para conocer de primera mano el edificio Carabanchel 34, destacan que la visita les permiti¨® comparar su experiencia con la construcci¨®n de viviendas sostenibles con la de la ciudad de Madrid.?

"La construcci¨®n de viviendas buenas y asequibles nos impresion¨® y encontramos una inspiraci¨®n cultural al comprar la forma de organizar las viviendas con los modelos daneses", le dice a este peri¨®dico el Arquitecto de la Ciudad de Aarhus, Stephen Willacy. Su delegaci¨®n estaba compuesta de 24 miembros, entre ellos juristas, urbanistas y arquitectos.

Carabanchel 34 ser¨¢ uno de los 71 edificios que se podr¨¢n visitar en la Semana de la Arquitectura de Madrid que comienza este lunes. El cupo de visitas ya est¨¢ completo y hay lista de espera, seg¨²n los organizadores, el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM).?

"Dar ejemplo"

Uno de los arquitectos socios que han proyectado Carabanchel 34, Antonio G¨®mez, cree que la promoci¨®n va a dar un espaldarazo a la construcci¨®n de viviendas Passivhaus en Espa?a. "La administraci¨®n debe dar ejemplo para que el sector privado y los compradores tambi¨¦n recurran a este tipo de construcciones de bajo consumo", dice G¨®mez, del estudio?Ruiz-Larrea & Asociados.

Los edificios que obtienen el certificado Passivhaus deben cumplir una serie de requisitos para asegurar que su consumo de energ¨ªa ser¨¢ muy bajo. Los muros son m¨¢s gruesos y las ventanas suelen tener triple acristalamiento. Las viviendas est¨¢n orientadas hacia el sur de modo que aprovechan la luz del sol. Adem¨¢s cuentan con bombas de ventilaci¨®n que permiten renovar el aire y mantener estable la temperatura interior. Las ventajas son numerosas: ahorro, menor contaminaci¨®n y calidad de vida ya que los moradores suelen reportar mayor bienestar al respirar un aire m¨¢s limpio.

En Alemania y otros pa¨ªses de Europa hay barrios enteros construidos seg¨²n este est¨¢ndar, pero Espa?a est¨¢ a¨²n muy atr¨¢s. En la ¨²ltima d¨¦cada hemos pasado de solo dos edificios Passivhaus en 2009 a 106 este a?o, seg¨²n la Plataforma de Edificaci¨®n Passivhaus (PEP), una asociaci¨®n que difunde este est¨¢ndar en Espa?a.

El Ayuntamiento de Madrid no es la primera administraci¨®n que se ha sumado a esta corriente. Las empresas p¨²blicas de viviendas de Navarra, Pa¨ªs Vasco y Arag¨®n ya han construido edificios Passivhaus, seg¨²n PEP.