Un mismo hombre al mando durante d¨¦cadas: la ¡®monarqu¨ªa¡¯ de los centros de ciencia de ¨¦lite
Los directores de algunas de las instituciones m¨¢s prestigiosas de Espa?a se eternizan en su cargo, superando incluso los 30 a?os, frente a voces que piden acelerar el relevo generacional
Algunos de los centros cient¨ªficos m¨¢s vanguardistas de Espa?a se rigen por un sistema parad¨®jicamente muy antiguo: un mismo hombre al mando durante d¨¦cadas. El m¨¦dico Bonaventura Clotet dirige el Instituto de Investigaci¨®n del Sida IrsiCaixa desde su creaci¨®n, hace 29 a?os en Badalona. El f¨ªsico Pedro Miguel Echenique preside el Donostia International Physics Center desde el primer d¨ªa, hace un cuarto de siglo. El qu¨ªmico Eugenio Coronado gobierna el Instituto de Ciencia Molecular de Valencia desde su apertura, hace 24 a?os. Y no son excepciones. Algunos de los centros m¨¢s innovadores han reinventado una especie de monarqu¨ªa.
La qu¨ªmica Laura Lechuga, de 61 a?os, recuerda que muchos de estos centros se crearon al filo del siglo XXI, con prestigiosos cient¨ªficos al mando. ¡°El problema es que nunca se plantearon la duraci¨®n del mandato de un mismo director. Esto ha dado lugar a que, en la pr¨¢ctica, nunca haya cambio del director y la mayor¨ªa de ellos permanezca en el cargo entre 15 y 20 a?os, incluso 30 a?os¡±, reflexiona Lechuga, jefa de grupo en el Instituto Catal¨¢n de Nanociencia y Nanotecnolog¨ªa, en Barcelona. ¡°El peor efecto de estos mandatos eternos es que no hay mujeres directoras. Yo dir¨ªa que solo el 1% o el 2% de estos centros est¨¢ o ha estado dirigido por una mujer. En el siglo XXI. Es incre¨ªble¡±, lamenta la qu¨ªmica, ganadora del Premio Nacional de Investigaci¨®n en 2020.
Los datos son reveladores. La bi¨®loga Marga Nadal era hace tres a?os la ¨²nica mujer directora en los 41 Centros de Investigaci¨®n de Catalu?a (CERCA), los organismos de excelencia de la Generalitat. Ella era el 2%. Nadal, al mando del Instituto de Investigaci¨®n Biom¨¦dica de Girona, explica que estos centros est¨¢n regidos por patronatos, compuestos por pol¨ªticos y altos cargos de hospitales y universidades. Son ellos los que eligen al director. ¡°A m¨ª me pueden echar ma?ana o me pueden echar dentro de 20 a?os, es as¨ª¡±, resume Nadal, partidaria de instaurar mandatos de cuatro o cinco a?os, renovables por otros tantos. ¡°Estar m¨¢s de 10 a?os es malo. Y estar m¨¢s de tres a?os tambi¨¦n puede ser malo. Si no tienes un proyecto, vete a tu casa. Te tendr¨ªas que ir t¨², no esperar a que te echen¡±, sentencia.
El hombre que ha dirigido los centros CERCA desde 2011, el bi¨®logo Llu¨ªs Rovira, levant¨® ampollas con unas declaraciones el 1 de febrero. ¡°Mi experiencia es que, a menudo, los directores [hombres] son autoritarios y tienen egos muy fuertes, aunque tambi¨¦n encuentras algunos amables con quienes se puede hablar con normalidad¡±, asever¨® en una entrevista con el diario El Punt Avui. El consejero de Investigaci¨®n y Universidades de la Generalitat de Catalu?a, Joaquim Nadal, ces¨® a Rovira el 15 de febrero ¡°para dar un impulso a la instituci¨®n¡±, seg¨²n confirman a este peri¨®dico fuentes de los CERCA. Un portavoz de la Consejer¨ªa explica que la decisi¨®n ya estaba planificada y no tiene nada que ver con las cr¨ªticas al supuesto autoritarismo de algunos directores. Rovira, partidario de las rotaciones, ha declinado hablar con EL PA?S.
El f¨ªsico Llu¨ªs Torner explica que ¨¦l fund¨® en solitario el hoy puntero Instituto de Ciencias Fot¨®nicas (ICFO), en la localidad barcelonesa de Castelldefels, en 2002. Lleva al mando 22 a?os, pero considera que ¡°no hay que eternizarse¡± y pidi¨® hace meses su sustituci¨®n. ¡°Yo empec¨¦ solo. El ICFO ten¨ªa una ¨²nica persona. Yo era el director y me dirig¨ªa a m¨ª mismo. Y ahora somos 450¡å, celebra. Torner rechaza los cargos indefinidos, pero apoya los mandatos largos en centros en construcci¨®n, incluso de 30 a?os si hay evaluaciones peri¨®dicas, como ha ocurrido en su caso cada cuatro a?os. ¡°Como ejemplo y sin querer compararlo, es como si la expedici¨®n de Col¨®n va a Cuba y cambian al comandante en las Azores. Lo que hac¨ªan los griegos, si su general no funcionaba en las batallas contra los persas, era liquidarlo a su regreso a Atenas, pero no por el camino¡±, argumenta. El f¨ªsico Oriol Romero-Isart, de 42 a?os, ser¨¢ el nuevo director a partir del 1 de septiembre, seg¨²n confirma Torner.
Algunos de los ¨²ltimos relevos en estos centros de excelencia muestran la perpetuaci¨®n en los cargos. El ingeniero civil Eugenio O?ate dej¨® en 2022 la direcci¨®n del Centro Internacional de M¨¦todos Num¨¦ricos en la Ingenier¨ªa, en Barcelona, tras 35 a?os al mando. El m¨¦dico Llu¨ªs Blanch est¨¢ pendiente de su sustituci¨®n en el Instituto de Investigaci¨®n e Innovaci¨®n Parc Taul¨ª, en Sabadell, tras 21 a?os como director. La inmensa mayor¨ªa de los dirigentes eternos son hombres, pero hay excepciones. La ge¨®grafa Anna Cabr¨¦ dirigi¨® el Centro de Estudios Demogr¨¢ficos de Barcelona durante 30 a?os, desde su creaci¨®n en 1984. ¡°Ahora tenemos siete directoras en 42 centros [el 17%]. Hemos trabajado mucho para que se presentaran m¨¢s mujeres a las convocatorias¡±, explican las mismas fuentes de los CERCA.
El bi¨®logo Emilio Palomares cogi¨® hace tres a?os las riendas del Instituto Catal¨¢n de Investigaci¨®n Qu¨ªmica, en Tarragona, para ¡°dar un giro de 180 grados¡±, tras dos d¨¦cadas al mando de Miquel Peric¨¤s, su fundador. Palomares alerta del riesgo de los liderazgos eternos. ¡°Cuando uno lleva mucho tiempo ostentando un cargo de direcci¨®n, acaba pensando que todo ha sido gracias a ¨¦l y se convierte en un chiringuito. Pasa en los centros cient¨ªficos igual que en la pol¨ªtica o en la empresa. Es humano¡±, reflexiona Palomares, que ha prometido por escrito estar como m¨¢ximo dos mandatos de cinco a?os.
Hay que evitar que se llegue a un excesivo personalismo que pueda da?ar a la instituci¨®nCarmen Vela, exsecretaria de Estado de I+D+I
Uno de los dirigentes perpetuos m¨¢s conocidos es Paco S¨¢nchez, fundador del Instituto de Astrof¨ªsica de Canarias en 1975 y su director durante 38 a?os. La bioqu¨ªmica Carmen Vela, responsable de la ciencia en el Gobierno de Mariano Rajoy, tom¨® la decisi¨®n de buscar un sustituto. ¡°Nosotros promovimos un cambio, porque ya no es que Paco llevase toda la vida, es que el telescopio era ¨¦l¡±, recuerda. Vela invita a no hacer juicios injustos. ¡°En algunos casos hay que evitar que se llegue a un excesivo personalismo que pueda da?ar a la instituci¨®n, pero, en la mayor parte de los casos que conozco, el binomio director e instituci¨®n est¨¢ funcionando extraordinariamente bien¡±, opina.
El ingeniero Mateo Valero dirige el Barcelona Supercomputing Center desde su creaci¨®n hace 20 a?os. El cardi¨®logo Valent¨ªn Fuster lleva ya 15 a?os al frente del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares, en Madrid. Vela, expresidenta de la Asociaci¨®n de Mujeres Investigadoras y Tecn¨®logas, afirma que hay cient¨ªficas ¡°sobradamente preparadas¡± para ocupar las direcciones de este tipo de institutos, pero cree que no hay que forzar el inevitable cambio generacional. ¡°Estos centros son excelentes, son referentes internacionales. Pienso en Pedro Miguel Echenique, Mateo Valero, Valent¨ªn Fuster, Llu¨ªs Torner... Son personas tan absolutamente fuera de la media, rozando la excepcionalidad, que no creo que debamos intervenir, pero s¨ª les pondr¨ªa este tema sobre la mesa para que lo consideren. Yo no ser¨ªa demasiado intervencionista¡±, sostiene Vela.
Preguntado por si se plantea acotar los mandatos de los directores, el Ministerio de Ciencia, encabezado por Diana Morant, se limita a responder que, adem¨¢s de la duraci¨®n, hay que tener en cuenta la calidad de las investigaciones y ¡°los resultados en base a los objetivos marcados¡±. Un portavoz de la consejer¨ªa catalana explica que no hay cambios normativos a la vista. ¡°La Ley de la Ciencia de Catalu?a, en vigor desde el a?o pasado, no establece limitaciones de mandatos en las direcciones de los centros CERCA participados por la Generalitat. Las directrices corresponden a los patronatos o consejos de gobierno de cada centro¡±, subraya. Las im¨¢genes son elocuentes. Seis centros de investigaci¨®n de excelencia constituyeron en 2015 The Barcelona Institute of Science and Technology para impulsar un proyecto com¨²n. Los 20 prestigiosos miembros de su patronato eran hombres. Casi una d¨¦cada despu¨¦s, son 19 hombres y tres mujeres.
El m¨¦dico Bonaventura Clotet coincidi¨® en 1981 con el primer caso de sida descrito en Espa?a y decidi¨® dedicar su vida a esta enfermedad, que desde entonces ha matado a m¨¢s de 40 millones de personas en el mundo. ¡°Esto empez¨® como un proyecto personal. Consegu¨ª convencer a la Generalitat y, con la ayuda de la Fundaci¨®n ¡°la Caixa¡±, montamos el primer laboratorio de retrovirus que exist¨ªa en Catalu?a. Empezamos cuatro personas y ahora somos 120¡å, rememora el experto, que dirige el Instituto de Investigaci¨®n del Sida IrsiCaixa desde 1995, recibiendo auditor¨ªas peri¨®dicas. ¡°A nosotros nos eval¨²an continuamente y esto es innegociable. Nadie tiene que estar aposentado para siempre¡±, se?ala.
?Se puede ser director tanto tiempo sin crear malos h¨¢bitos y malas praxis?Laura Lechuga, qu¨ªmica
Clotet recalca que la situaci¨®n es similar en organismos de otros pa¨ªses. El c¨¦lebre m¨¦dico estadounidense Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas durante 38 a?os, renunci¨® en 2022 recordando que hab¨ªa trabajado para siete presidentes, desde Ronald Reagan a Joe Biden. A juicio de Clotet, lo esencial en un director es ofrecer ideas, dar ¡°absoluta independencia¡± a sus investigadores y promocionar a los mejores, manteniendo una paridad de sexos. En IrsiCaixa, afirma, hay un 60% de mujeres.
¡°El manejo interno de un gran equipo requiere un l¨ªder o una l¨ªder. Esto es como los entrenadores de f¨²tbol de equipos muy buenos: el problema m¨¢s complicado es manejar los egos¡±, opina. ¡°Somos el grupo m¨¢s importante de Espa?a en investigaci¨®n de enfermedades infecciosas e inmunolog¨ªa. Creo que el proyecto ha sido muy ¨²til para el pa¨ªs. Cuando yo no pueda aportar nada, no seguir¨¦¡±, argumenta Clotet, que tras 29 a?os como director sigue ¡°con fuerzas y energ¨ªa¡±.
Los ejemplos se encuentran por toda Espa?a. El microbi¨®logo Eugenio Santos acaba de dejar la direcci¨®n del Centro de Investigaci¨®n del C¨¢ncer de Salamanca, tras 25 a?os en el poder. El qu¨ªmico Jos¨¦ Mar¨ªa Mato dirige el Centro de Investigaci¨®n Cooperativa en Biociencias (CIC bioGUNE) desde su creaci¨®n, hace 19 a?os en el Gran Bilbao. El f¨ªsico Rodolfo Miranda est¨¢ al mando del Instituto Madrile?o de Estudios Avanzados en Nanociencia desde hace 17 a?os. La bioqu¨ªmica Maria Lois, directora del Centro de Investigaci¨®n en Agrigen¨®mica desde hace apenas dos a?os, cree que ¡°un plan de medidas de apoyo durante la direcci¨®n y despu¨¦s de dejarla¡± har¨ªa el cargo m¨¢s atractivo, incrementar¨ªa las candidaturas y facilitar¨ªa las salidas. ¡°Y cuanta m¨¢s rotaci¨®n, mayor diversidad¡±, sentencia.
La qu¨ªmica Laura Lechuga destaca que los mandatos de direcci¨®n en el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) duran cuatro a?os y se pueden renovar. Los rectores de las universidades pueden estar un m¨¢ximo de seis a?os, improrrogables. ¡°Por muy buenos cient¨ªficos y gestores que se hayan seleccionado para el puesto de direcci¨®n, ?se puede ser director tanto tiempo sin crear malos h¨¢bitos y malas praxis?¡±, se pregunta Lechuga, tambi¨¦n investigadora del CSIC. ¡°Esto suele derivar, claramente, en din¨¢micas muy poco sanas dentro de los centros, convirti¨¦ndose al final en aut¨¦nticos reinos o chiringuitos del director de turno. Dado el poder que acumulan estos directores, pueden llegar a manejar, seg¨²n su ¨²nico criterio, presupuestos millonarios, el reparto de los espacios, las plazas, los despidos, las infraestructuras¡±, opina la qu¨ªmica.
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