Llega a la Estaci¨®n Espacial la nave de rescate de los dos astronautas ¡®atrapados¡¯ en ¨®rbita

La misi¨®n Crew-9 ha llegado con solo dos astronautas a la Estaci¨®n Espacial Internacional (ISS) en la noche del domingo, a las 23:32 hora peninsular espa?ola, tras despegar de Cabo Ca?averal (Florida, EE UU) en la tarde del s¨¢bado. Lo que iba a ser una misi¨®n rutinaria con cuatro tripulantes se ha convertido en algo extraordinario. Debido a los problemas de una nave Starliner de Boeing que hab¨ªa llevado a otros dos astronautas a la estaci¨®n espacial, la NASA decidi¨® dejarlos all¨ª hasta que una nave Dragon de SpaceX ¡ªla que acaba de atracar en la ISS¡ª pueda traerlos de vuelta a la Tierra, lo que est¨¢ previsto que suceda en febrero de 2025.

Suni Williams y Butch Wilmore, los astronautas de la agencia espacial estadounidense que viajaron en junio un el vuelo de prueba inaugural de las naves Starliner ¡ªque deb¨ªa permanecer tan solo ocho d¨ªas en la ISS¡ª, pasan ahora a formar parte de la misi¨®n Crew-9. Es la novena del servicio de vuelos comerciales que SpaceX ofrece desde 2020 a la NASA para renovar la tripulaci¨®n de la Estaci¨®n Espacial Internacional, que lleva regularmente cuatro astronautas que pasan all¨ª seis meses y regresan a tierra despu¨¦s de seis meses. El fallo de la Starliner ha alterado por completo esos planes.

Primero, la misi¨®n, inicialmente prevista para el pasado 18 de agosto, qued¨® pospuesta debido a los numerosos peque?os fallos de propulsi¨®n detectados en la Starliner durante su viaje de ida a la ISS. La Crew-9 ten¨ªa que esperar al retorno de la nave de Boeing, que se aplaz¨® varias veces durante el verano mientras la agencia espacial y la compa?¨ªa aeron¨¢utica analizaban la causa de los problemas. Hasta que a finales de agosto la NASA decidi¨® que Williams y Wilmore se quedar¨ªan en la estaci¨®n y la Starliner volver¨ªa vac¨ªa, en medio de fuertes tensiones con Boeing.

Al tener que cumplir con su fecha de regreso en febrero de 2025, la Crew-9 ha pasado a reducir su duraci¨®n a solo cinco meses. Y adem¨¢s, para poder acomodar en el viaje de vuelta a los astronautas atrapados en la ISS ha tenido que reducir su tripulaci¨®n en la ida, de cuatro a dos miembros. Conservaron su plaza el estadounidense Nick Hague y el ruso Alexander Gorbunov, que entraron a la estaci¨®n espacial pasada la 1.00 de la madrugada del domingo. Se quedaron en tierra dos mujeres: Zena Cardman y Stephanie Williams, que iban a ser la comandante y la especialista de misi¨®n y ahora tendr¨¢n que esperar una nueva oportunidad para poder cumplir el gran reto de pasar seis meses trabajando en la ISS.

Las dos astronautas de la tripulaci¨®n original ceden su puesto a Butch Wilmore y Suni Williams, que ya hab¨ªan realizado antes largas estancias en la ISS y no contaban con repetir la experiencia. Ambos se han integrado en los trabajos de investigaci¨®n y mantenimiento del complejo orbital y, aunque inicialmente ten¨ªan previsto pasar solo una semana en la estaci¨®n espacial, finalmente estar¨¢n ocho meses, si su regreso no sufre m¨¢s retrasos.

Pese a la insistencia de Boeing en traer a ambos astronautas de vuelta su Starliner, la nave regres¨® sin tripulaci¨®n el pasado 7 de septiembre. Se pos¨® suavemente y sin ning¨²n incidente en la base espacial de White Sands (Nuevo M¨¦xico, EE UU); y, dos d¨ªas despu¨¦s, tras analizar todos los datos del vuelo de vuelta, la NASA admiti¨® que Wilmore y Williams habr¨ªan llegado sanos y salvos dentro de la c¨¢psula espacial: ¡°Si hubi¨¦ramos tenido tripulaci¨®n a bordo, habr¨ªamos seguido la misma secuencia de separaci¨®n de la ISS, el mismo encendido de motores para desorbitar la nave y ejecutado la misma reentrada. As¨ª que habr¨ªa sido un aterrizaje seguro y exitoso¡±, declar¨® en una conferencia de prensa Steve Stich, director del programa de vuelos comerciales tripulados de la NASA.

Fallo del cohete de SpaceX tras el lanzamiento

Sin embargo, tras las pruebas realizadas durante el verano tanto en la Starliner como en tierra con motores iguales a los suyos, los modelos inform¨¢ticos de Boeing ¡ªpara simular la degradaci¨®n de los propulsores de la nave durante el regreso¡ª no convencieron del todo a la NASA. La agencia espacial estadounidense vio limitaciones e incertidumbres en esos modelos y consider¨® que podr¨ªa haber demasiado riesgo para los astronautas. Tras el regreso de la nave sin problemas, se abri¨® una esperanza para que Boeing pueda conservar el programa de vuelos comerciales regulares a la ISS con sus naves Starliner. La NASA deber¨ªa hacer p¨²blicos en los pr¨®ximos meses los cambios que pide a la empresa para evitar nuevos problemas y la fecha en la que una Starliner podr¨ªa volver a volar. De momento est¨¢ descartado que lo haga antes del verano de 2025, acumulando un a?o m¨¢s a la larga lista de retrasos del proyecto.

Y por lo menos hasta esa fecha SpaceX, la empresa aeroespacial de Elon Musk seguir¨¢ sin tener competidores en el servicio privado de transporte a la Estaci¨®n Espacial Internacional que ofrece a la NASA. A pesar de que todos los vuelos tripulados en c¨¢psulas Dragon han sido un ¨¦xito, en los ¨²ltimos meses ha habido varios problemas menores con los cohetes Falcon 9 que las lanzan. El ¨²ltimo fue el s¨¢bado: tras el lanzamiento de la misi¨®n Crew-9, la etapa superior del cohete ¡ªque es la que da el empuj¨®n final a la Dragon para colocarla en ¨®rbita¡ª cumpli¨® su funci¨®n correctamente, pero luego cay¨® al oc¨¦ano fuera de la zona que estaba prevista para ello. Por ello, SpaceX ha decidido poner en pausa los lanzamientos con cohetes Falcon 9 hasta saber por qu¨¦ se ha producido el fallo. Es la tercera vez, en los ¨²ltimos tres meses, que hay un par¨®n de esos cohetes, sin los que la compa?¨ªa privada no puede lanzar m¨¢s sat¨¦lites Starlink ni misiones tripuladas.

R¨¦cord de permanencia en el espacio

Hoy por hoy, la ¨²nica alternativa a las naves Dragon de Musk son las naves Soyuz rusas. En una de ella regresaron a la Tierra hace una semana dos cosmonautas de Roscosmos, Nikolai Chub y Oleg Kononenko, junto con la astronauta de la NASA Tracy C. Dyson. Chub y Kononenko han batido el r¨¦cord de la misi¨®n m¨¢s larga en la ISS, con 375 d¨ªas; y sum¨¢ndolos a los de sus cuatro estancias anteriores, Kononenko se ha convertido en la primera persona que pasa m¨¢s de 1.000 d¨ªas en el espacio.

Con la partida de la Soyuz MS-25 con esos tres tripulantes comenz¨® oficialmente la expedici¨®n n¨²mero 72 de permanencia en la Estaci¨®n Espacial Internacional, comandada por Sunita Williams, una de los dos astronautas de la Starliner que a partir de ahora ya no est¨¢n atrapados en el espacio: tienen su plaza de regreso en una nave y, por fin, su traje espacial compatible para la vuelta. Hasta hoy habr¨ªan tenido que regresar sin traje en una nave Dragon, en caso de emergencia en la ISS.

Junto a ellos se quedaron otros cuatro oficiales de la NASA y tres cosmonautas de Roscosmos. Ahora, con la llegada del estadounidense Hague y el ruso Gorbunov en la misi¨®n Crew-9 de SpaceX, un total de 11 personas viven en la ISS. Pero ser¨¢ solo por unas horas, hasta que la misi¨®n Crew-8 regrese a la Tierra este lunes o martes con sus cuatro tripulantes. Despu¨¦s de eso, tras un verano de suspense y planes trastocados, hasta febrero de 2025 no est¨¢ previsto el viaje a la estaci¨®n de nuevos astronautas, que ser¨¢n los que den el relevo a los atrapados Williams y Wilmore y a sus dos nuevos compa?eros que acaban de llegar.