La Organizaci¨®n Meteorol¨®gica Mundial advierte del peligro de quedar atrapados en el ¡°c¨ªrculo vicioso¡± del calentamiento
El aumento constante de la concentraci¨®n de CO? en la atm¨®sfera amenaza con incrementar los incendios y reducir la capacidad del oc¨¦ano de retener el carbono, retroalimentando as¨ª el cambio clim¨¢tico
La Organizaci¨®n Meteorol¨®gica Mundial (OMM) ha advertido este lunes del peligro de que la humanidad quede atrapada ¡°en un c¨ªrculo vicioso¡± en un futuro cercano debido al crecimiento constante de la acumulaci¨®n de gases de efecto invernadero en la atm¨®sfera. El aumento de la presencia de estos gases en el aire est¨¢ detr¨¢s del calentamiento global. El principal es el di¨®xido de carbono (CO?) y su concentraci¨®n no ha parado de acrecentarse desde la era preindustrial hasta alcanzar ahora unos niveles nunca vistos entre tres y cinco millones de a?os, sostiene la OMM.
Pero el problema no es solo de cantidad, sino tambi¨¦n de velocidad: ¡°Nunca antes en la historia de la humanidad la acumulaci¨®n de di¨®xido de carbono en la atm¨®sfera hab¨ªa sido tan r¨¢pida¡±, ha advertido este organismo con motivo de la publicaci¨®n del bolet¨ªn anual en el que hace un seguimiento de los principales gases de efecto invernadero. Veinte a?os justos lleva haciendo ese marcaje la OMM, y solo en ese periodo (2004-2023) la presencia del di¨®xido de carbono en la atm¨®sfera ha aumentado un 11,4%.
El bolet¨ªn lanza una advertencia sobre lo que puede ocurrir en ¡°un futuro cercano¡± con las ¡°retroalimentaciones del cambio clim¨¢tico¡±. La principal fuente de las emisiones de CO? es en este momento la quema de combustibles f¨®siles (petr¨®leo, gas y carb¨®n). Pero no todo el di¨®xido de carbono que se libera al quemarlos se acumula en el aire. En la ¨²ltima d¨¦cada, por ejemplo, alrededor del 43% de lo emitido acab¨® en la atm¨®sfera; un 26% qued¨® atrapado en el oc¨¦ano y el 31% en sumideros terrestres, principalmente, los bosques.
El problema de la retroalimentaci¨®n al que hace referencia la OMM apunta por un lado a la p¨¦rdida de capacidad de adsorci¨®n del CO? del oc¨¦ano debido al incremento de la temperatura del mar generado tambi¨¦n por el cambio clim¨¢tico. Adem¨¢s, esta crisis ceba los incendios, lo que provoca a su vez que se libere m¨¢s di¨®xido de carbono a la atm¨®sfera y que se reduzca la superficie vegetal, es decir, los sumideros terrestres.
¡°Corremos el riesgo de vernos atrapados en un c¨ªrculo vicioso¡±, ha resumido la secretaria general adjunta de la OMM, Ko Barrett, a trav¨¦s de un comunicado. ¡°Estas retroalimentaciones clim¨¢ticas son retos cr¨ªticos para las sociedades de todo el mundo¡±, alerta el bolet¨ªn de esta organizaci¨®n vinculada a la ONU.
La OMM cuenta con una red de estaciones de medici¨®n que colaboran en el seguimiento de los gases de efecto invernadero m¨¢s importantes. En 2023 la concentraci¨®n media de CO? alcanz¨® las 420 partes por mill¨®n (ppm). Comparado con los niveles preindustriales, antes de que empezara la quema masiva de combustibles f¨®siles, supone una concentraci¨®n un 51% mayor que en 1750. La OMS explica que aunque la tasa de crecimiento de las emisiones de los combustibles se ha desacelerado en la ¨²ltima d¨¦cada en comparaci¨®n con la primera del siglo XXI, estas emisiones f¨®siles ¡°siguen siendo altas¡±. Con lo que se sigue cebando el problema.
Una vez que acaban en la atm¨®sfera, los gases permanecen ah¨ª d¨¦cadas o siglos, con lo que a?o a a?o se hipoteca m¨¢s el futuro del planeta. ¡°Aunque las emisiones se redujeran r¨¢pidamente hasta alcanzar el cero neto, el nivel de temperatura observado actualmente persistir¨ªa durante varios decenios, porque el CO? es un gas que permanece en la atm¨®sfera durante per¨ªodos extremadamente prolongados¡±, explica la Organizaci¨®n Meteorol¨®gica Mundial.
¡°Otro a?o, otro r¨¦cord. Esto deber¨ªa hacer saltar todas las alarmas entre las instancias decisorias. No hay duda de que estamos muy lejos de cumplir el objetivo del Acuerdo de Par¨ªs de mantener el calentamiento global¡±, ha afirmado la secretaria general de la OMM, Celeste Saulo. ¡°No son meras estad¨ªsticas. Cada parte por mill¨®n y cada fracci¨®n de grado de incremento de la temperatura conllevan consecuencias reales para nuestras vidas y nuestro planeta¡±, ha a?adido.
En el bolet¨ªn se analizan otros gases de efecto invernadero, como el metano (CH?) y el ¨®xido nitroso (N?O). En el caso del metano, en 2023 se alcanzaron las 1.934 partes por mil millones (ppb), lo que supone un 65% m¨¢s que en 1750. Aproximadamente el 40% de las emisiones de metano procede de fuentes naturales (por ejemplo, los humedales); el ser humano es responsable del 60% restante, por ejemplo, debido al cultivo de arroz, el ganado o las explotaciones de extracci¨®n de petr¨®leo, gas y carb¨®n.
En el caso del ¨®xido nitroso la concentraci¨®n registrada en 2023 (336,9 ppb) supone un 25% m¨¢s que en 1750. Y en este caso alrededor del 57% son de origen natural; el 43% es responsabilidad del hombre, ya sea por la quema de biomasa, el uso de fertilizantes o procesos industriales
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