Eusebio P¨¦rez: ¡°La Iglesia debe denunciar los abusos y evitar el corporativismo¡±
El sacerdote vasco, suscriptor de EL PA?S y antiguo miembro del colectivo Gesto por la paz, lamenta que ¡°para obtener votos¡± Ayuso asegurase en campa?a que ETA sigue viva
Eusebio P¨¦rez, de 56 a?os, es sacerdote, licenciado en Derecho y Teolog¨ªa, profesor en la Universidad de Deusto, y uno de los 300.000 suscriptores de EL PA?S. Recuerda leerlo ¡°desde muy joven¡±. ¡°Me gusta mucho la secci¨®n de internacional. Es el peri¨®dico que ofrece una informaci¨®n m¨¢s exhaustiva. Tambi¨¦n leo bastantes art¨ªculos de opini¨®n, de ciencia, de literatura en Babelia... picoteo¡±. Durante la semana consulta la edici¨®n digital y los s¨¢bados y domingos, la impresa. ¡°Me gusta m¨¢s esa lectura pausada¡±. Nos recibe en la residencia de religiosos en la que vive en Bilbao.
Pregunta. ?Y su opini¨®n suele coincidir con la de los opinadores del peri¨®dico? ?Le han hecho cambiar de idea alguna vez?
Respuesta. Lo bueno de EL PA?S es que ofrece opiniones muy diversas. Puedes leer desde Vargas Llosa, al que a uno le puede interesar mucho su calidad literaria y luego disentir en sus opiniones, hasta Soledad Gallego D¨ªaz, que a m¨ª me encanta. En ocasiones uno no va con una opini¨®n formada, simplemente quiere descubrir un an¨¢lisis profundo o una perspectiva sobre algo. Me resultan muy sugerentes determinadas lecturas del peri¨®dico, me ayudan a tener opini¨®n o a contrastarla con la m¨ªa. Por ejemplo, ahora estaba leyendo un art¨ªculo sobre un tema apasionante, la inteligencia artificial, que es algo que me afecta como docente porque me encuentro ante el desaf¨ªo de c¨®mo examinar a un alumno que tiene acceso a ella.
P. Claro, es como el antiguo ¡°rinc¨®n del vago¡±, pero mucho m¨¢s sofisticado, ?no?
R. Ciertamente. Y todo esto al final te hace pensar en qu¨¦ es inteligencia. Es una reflexi¨®n sobre el ser humano y qu¨¦ lo hace distinto. Es apasionante.
P. ?Qu¨¦ perfil tienen sus alumnos?
R. Yo en teolog¨ªa doy sobre todo asignaturas de historia de la iglesia. Tengo un perfil variado de alumnos, algunos son del ¨¢mbito eclesial, es decir, seminaristas o profesores de religi¨®n, pero luego tambi¨¦n doy clases en distintas facultades sobre la influencia la Biblia en la cultura, en el cine, en la m¨²sica...
P. Algo que no le guste o que eche de menos en el peri¨®dico.
R. Bueno, una de las razones por las que tambi¨¦n estoy suscrito a un peri¨®dico local es porque me gustar¨ªa que EL PA?S tuviese un mayor acercamiento a las cuestiones locales o auton¨®micas.
P. ?Recuerda alguna cobertura o columna que le haya gustado especialmente?
R. He le¨ªdo con gran inter¨¦s la serie que se hizo sobre la guerra de Ucrania con un seguimiento diario, pegado al terreno. Y viv¨ª con especial intensidad la cobertura de la pandemia. Salir por la ma?ana a comprar el peri¨®dico era pr¨¢cticamente el ¨²nico momento de libertad. Ah¨ª se demostr¨® el valor de la prensa para informar, para reflexionar. Y era muy interesante leer a cient¨ªficos, epidemi¨®logos... porque necesit¨¢bamos un contraste serio ante tanta especulaci¨®n.
P. Y en su vida personal, ?cu¨¢l ha sido la noticia m¨¢s importante, su gran titular?
R. Cuando decid¨ª ser sacerdote. Yo estudi¨¦ Derecho, era profesor en Deusto, pero siempre hab¨ªa trabajado mucho en el ¨¢mbito de pastoral con j¨®venes, grupos de confirmaci¨®n, campamentos... y ve¨ªa esa tensi¨®n entre la dimensi¨®n acad¨¦mica, que me gustaba, y la eclesial. Llegado un momento, tuve que ver qu¨¦ era lo que m¨¢s me atra¨ªa y finalmente opt¨¦ por lo pastoral. Todos mis compa?eros de la universidad me dec¨ªan que iba a volver y lo hice, pero a la facultad de Teolog¨ªa.
P. ?Cu¨¢ntos a?os ten¨ªa entonces?
R. Ten¨ªa 30 a?os. Fue una vocaci¨®n que se dice tard¨ªa, pero ahora normalmente ese tipo de decisiones, tanto el sacerdocio como el matrimonio, se toman a esa edad.
P. ?Alguien en su familia hab¨ªa seguido el mismo camino?
R. No. Hab¨ªa gente religiosa, como mi madre, y no tan religiosa, como mi padre... Era una familia normal.
P. ?Y c¨®mo se lo tomaron? ?Qu¨¦ le dijeron?
R. Bueno, hubo una perplejidad inicial. Yo ya ten¨ªa un modo de vida consolidado y dejarlo todo les llam¨® la atenci¨®n. Luego mi madre reaccion¨® con ilusi¨®n y mi padre asumi¨® mi decisi¨®n.
P. ?Qu¨¦ le parece la informaci¨®n que se da en el peri¨®dico sobre religi¨®n?
R. Ah, ese es un tema delicado. Yo soy lector de EL PA?S desde hace a?os y confieso que a veces no s¨¦ si el tratamiento de lo religioso es el m¨¢s adecuado. Coincido mucho con los planteamientos del peri¨®dico, pero a veces creo que hay una cierta tendencia a pensar en progresista y anticlerical como si fueran sin¨®nimos, y a m¨ª eso me parece un planteamiento decimon¨®nico, una fase superada.
P. EL PA?S ha investigado a fondo los abusos sexuales en la Iglesia. ?Le sorprendi¨® la magnitud, la cantidad de casos? ?Cree que la Iglesia ha reaccionado bien?
R. La primera reacci¨®n es de tristeza porque es algo muy doloroso. Creo que la Iglesia, tras una fuerte perplejidad inicial, porque nos cuesta asumir esa realidad, que esas brutalidades se puedan cometer, est¨¢ reaccionando. En Alemania, en EEUU... esto surgi¨® antes y la sensibilidad sobre el tema tambi¨¦n. Aqu¨ª nos cuesta asumir que se cometa eso, es muy duro. Pero la Iglesia tiene que hacer frente a esa situaci¨®n y la sociedad en otros ¨¢mbitos tambi¨¦n, tomar todas las precauciones y tener sobre todo presente a las v¨ªctimas.
P. En el caso de la Iglesia, ?cu¨¢l cree que ser¨ªa la mejor forma de afrontar los abusos y evitar que se produzcan?
R. Por lo pronto, hacer frente a la realidad, reconocer estos casos y ayudar a las v¨ªctimas en la medida de lo posible. Y en segundo lugar, tomar las m¨¢ximas cautelas posibles para evitar que se vuelva a producir. Esto hay que denunciarlo y evitar planteamientos corporativistas o de gremio que no llevan a nada.
P. ?Qu¨¦ opina de estos grupos que saltan ahora a las p¨¢ginas de pol¨ªtica como Hazte O¨ªr, El Yunque... o la intervenci¨®n de la telepredicadora Yadira Maestre en un acto del PP?
R. El mundo religioso es muy plural y diverso. Ese grupo es muy, muy conservador, con planteamientos muy peligrosos. En cuanto a la telepredicadora, choca porque tiene un talante muy populista y sin gran recorrido o formaci¨®n. Estos movimientos existen, pero creo que no se puede identificar catolicismo, protestantismo con uno u otro, no dejan de ser una peque?a corriente.
La identificaci¨®n de la fe con una determinada ideolog¨ªa pol¨ªtica es peligros¨ªsima
P. ?Y le sorprende la relaci¨®n de estos grupos con la pol¨ªtica? Hazte o¨ªr, por ejemplo, funciona como un lobby de presi¨®n.
R. No me sorprende en absoluto. Las corrientes evang¨¦licas radicales est¨¢n muy identificadas con determinados planteamientos ideol¨®gicos. Pero creo que la Iglesia no puede ni debe identificarse con una corriente ideol¨®gica concreta. En el Evangelio caben distintas opciones ideol¨®gicas.
P. Una cosa son los votantes y otra los feligreses.
R. El creyente puede tener distintas opciones ideol¨®gicas. Adem¨¢s, el Concilio Vaticano segundo est¨¢ as¨ª planteado. La identificaci¨®n de la de la fe con una determinada ideolog¨ªa es peligros¨ªsima y adem¨¢s, ataca nuestra labor.
P. En el pasado hay ejemplos de esto.
R. S¨ª, el nacionalcatolicismo, por ejemplo, es una expresi¨®n de lo que nunca deber¨ªamos volver a repetir.
P. Se ha criticado mucho al Papa actual, al que algunos tachan de comunista, por sus cr¨ªticas al capitalismo.
R. Creo que eso es fruto de la ignorancia, porque el papa Francisco no est¨¢ diciendo nada nuevo, es la moral de la Iglesia. Juan Pablo II tambi¨¦n alertaba del sistema capitalista: ¨¦l vio el riesgo del marxismo en sus claves de autoritarismo y el riesgo del capitalismo en cuanto al radical individualismo que diluye las estructuras de solidaridad. Escuece en determinados ¨¢mbitos que el Papa cuestione el capitalismo o los planteamientos que hace desde la ecolog¨ªa, acerc¨¢ndose a la naturaleza desde claves econ¨®micas.
P. ?Ha seguido la campa?a electoral de las auton¨®micas y municipales?
R. Confieso que ha sido tan virulenta y tan tensa que me apartaba. No hab¨ªa propiamente debates, eran descalificaciones...
Me resulta escandaloso que se recurra a ETA para obtener votos
P. ?Por qu¨¦ cree que la pol¨ªtica ha llegado a eso?
R. Creo que ese tono violento es un recurso de movilizaci¨®n del electorado. Est¨¢ la tentaci¨®n de movilizarlo mediante discursos que demonizan al otro y le acusan de barbaridades, pero a la larga eso es agotador y el electorado de todas las corrientes ideol¨®gicas puede acabar distanci¨¢ndose.
P. Isabel D¨ªaz Ayuso dijo durante la campa?a que ETA segu¨ªa viva. ?Qu¨¦ pens¨® cuando lo oy¨®?
R. Como vasco, confieso que me preocup¨® porque se estaba utilizando algo que no deb¨ªa utilizarse nunca. En una contienda pol¨ªtica recurrir a este tema para obtener votos me resultaba profundamente escandaloso. Es un tema que ha generado muchas heridas aqu¨ª. Ha habido muchas v¨ªctimas de esa violencia y no se puede equiparar la situaci¨®n actual con la de entonces: vidas sesgadas, la libertad de expresi¨®n coartada...
P. ?Ha estado en contacto con v¨ªctimas del terrorismo?
R. En mis tiempos j¨®venes estaba en Gesto Por la paz y tambi¨¦n desde el ¨¢mbito eclesial ha habido acercamientos a v¨ªctimas concretas. Para m¨ª, Gesto por la paz es un movimiento que deber¨ªa tener mayor reconocimiento social. No obedec¨ªa a planteamientos pol¨ªticos, sino ¨¦ticos, de defensa de la vida y los derechos humanos frente a cualquier agresi¨®n. Supo aglutinar a gente de distintas trayectorias pol¨ªticas y creo que actu¨® de un modo honesto. Para m¨ª, fue un proceso de crecimiento fuerte estar en ese movimiento, en esas concentraciones en silencio.
P. Consuelo Ord¨®?ez asegura que ese grupo de gente la salv¨® del odio tras el asesinato de su hermano. Y contaba que en las concentraciones les tiraban piedras y gritaban cosas como ¡°ETA, m¨¢talos¡±.
R. S¨ª, hubo experiencias duras, pero siempre era mucho m¨¢s duro lo que sufr¨ªa la v¨ªctima. En esta sociedad hubo un ambiente en el que te insultaban por expresar tu oposici¨®n a la violencia. Afortunadamente,lo considero una etapa pasada porque aquel movimiento y otros lograron sensibilizar a la sociedad de la importancia del respeto de la dignidad humana, que no pod¨ªa ser una herramienta, parte de una estrategia pol¨ªtica.
P. ?Conoce a periodistas? ?Qu¨¦ piensa de nosotros?
R. No tengo mucho trato con periodistas. Supongo que no hay un ¨²nico tipo de periodista. Percibo la necesidad de que el que trate un tema tenga alg¨²n conocimiento sobre el asunto, eso hay que cuidarlo. Y a veces me pregunto c¨®mo se siente un periodista en un medio que tiene una l¨ªnea de pensamiento diferente. Tambi¨¦n pienso que en este momento en el que est¨¢n tan presentes los bulos, los periodistas son muy importantes, hay que contrastar todo y eso lo veo en EL PA?S. Si ha sido importante siempre, ahora mucho m¨¢s.
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