Fallece la poeta nicarag¨¹ense Claribel Alegr¨ªa a los 93 a?os

La poetisa nicarag¨¹ense Claribel Alegr¨ªa (Estel¨ª, Nicaragua; 1924), galardonada el pasado noviembre con el Premio Iberoamericano de Poes¨ªa Reina Sof¨ªa, falleci¨® la ma?ana del jueves en su casa de Managua, informaron familiares. Ten¨ªa 93 a?os.

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La poetisa Claribel Alegr¨ªa recuerda en Granada a su mentor, Juan Ram¨®n Jim¨¦nez

Alegr¨ªa era una de las voces m¨¢s prominentes de la poes¨ªa latinoamericana. Es relacionada con la llamada Generaci¨®n Comprometida, cuyos autores ¨Centre ellos el salvadore?o Roque Dalton¨C estaban muy influenciados para la realidad centroamericana, una regi¨®n hundida en la desigualad, el olvido y desangrada por dictaduras y guerras civiles. Aunque Alegr¨ªa rechaza formar parte de la Generaci¨®n Comprometida, afirm¨® en una entrevista con EL PA?S el a?o pasado: ¡°Dicen que mi poes¨ªa es comprometida, pero no es una poes¨ªa comprometida. Lo que pasa es que el sufrimiento de mis pueblos se refleja en m¨ª, porque yo soy ser humano antes de ser poeta y me duele mucho lo que sufren mis pueblos¡±.

La escritora, hija de madre salvadore?a, ha dejado una vasta producci¨®n literaria, que incluye poes¨ªa, novelas, ensayos e historia. Disc¨ªpula de Juan Ram¨®n Jim¨¦nez, quien la gui¨® en sus primeros pasos en la poes¨ªa, m¨¢s tarde su compromiso con un cambio social en Centroam¨¦rica la llev¨® a apoyar la lucha revolucionaria del Frente Sandinista de Liberaci¨®n Nacional (FSLN) en Nicaragua, que en 1979 derrib¨® la dictadura somocista que durante m¨¢s de 40 a?os machac¨® a este peque?o pa¨ªs. Parte de su obra la dedic¨® a documentar esa revoluci¨®n, as¨ª como el asesinato del dictador Anastasio Somoza Debayle. Es autora, entre otras obras, de Otredad, Saudade, Soltando amarras y, Umbrales.

El fallecimiento de su esposo, el escritor y diplom¨¢tico estadounidense Darwin J. Flakoll, hace 23 a?os, la marc¨® profundamente, as¨ª como su producci¨®n literaria. Bud, como lo llamaba de cari?o, fue su c¨®mplice y compa?ero de viaje literario, parte de su obra la comparte con ¨¦l. ¡°Todo los que amo est¨¢n en ti y t¨² en todo lo que amo¡±, escribi¨® en su poema Amor. El dolor causado por la muerte de Flakoll le impidi¨® escribir por un tiempo. Claribel contaba a sus amigos que tras la muerte de su esposo realiz¨® un viaje ¨ªntimo, sola por Asia, donde visit¨® templos budistas y playas que le parec¨ªan encantadas. Ese periplo le sirvi¨® de limpieza espiritual y a?os despu¨¦s se refugiar¨ªa en la poes¨ªa. ¡°Fue una salvaci¨®n total. Mi marido y yo tuvimos una amistad enorme, y cuando ¨¦l muri¨® cre¨ª que el mundo se me ven¨ªa abajo y que ya no iba a escribir. Y vino la poes¨ªa y la poes¨ªa me salv¨®¡±, dijo a este periodista en febrero de 2015.

La casa de Claribel, en el barrio de Los Robles de Managua ¨Cel mismo donde tambi¨¦n habitan sus amigos Ernesto Cardenal y Sergio Ram¨ªrez¨C era un punto de peregrinaci¨®n para amigos y admiradores de la escritora. Alegr¨ªa los recib¨ªa todas las tardes, cuando el calor menguaba en la sofocante Managua, y con su voz suave y su hablar pausado, como si estuviera recitando uno de sus poemas, contaba las an¨¦cdotas que hab¨ªan marcado su vida.

Con vaso de ron en la mano, rodeada entre sus plantas y sus flores, Alegr¨ªa ten¨ªa una risa que contagiaba. Aseguraba que a su edad no ten¨ªa miedo a la muerte. ¡°No le temo a la muerte en absoluto ¨Cafirm¨®¨C. O vamos a ser solo cenizas que van a ayudarle a las plantas a crecer, o nuestra energ¨ªa se convertir¨¢ en ¨¢tomos de luz, o va a ser un viaje inesperado, que me guste. Me gusta pensar en eso¡±.

La escritora recibi¨® el pasado 14 de noviembre el XXVI Premio de Poes¨ªa Iberoamericana, en el Palacio Real de Madrid. En su discurso de agradecimiento record¨® nuevamente a su esposo, aunque el premio lo dedic¨® a la Reina Sof¨ªa, a su mentor Jim¨¦nez y al poeta y novelista Rainer Mar¨ªa Rilke, de quien dijo ¡°que a trav¨¦s de uno de sus libros me se?al¨® mi vocaci¨®n¡±. En aquella ocasi¨®n, Alegr¨ªa hizo un emotivo reconocimiento de las escritoras latinoamericanas, homenajeando desde a sor Juana In¨¦s de la Cruz hasta Alfonsina Storni, Delmira Agustini, Gabriela Mistral, Juana de Ibarbourou y Claudia Lars. Hizo, tambi¨¦n, una f¨¦rrea defensa del feminismo y los espacios ganados por las mujeres en Am¨¦rica Latina, tan marcada por el machismo. ¡°En cuanto a las mujeres escritoras, les aconsejo que se liberen del sentido de culpa por no ser amas de casa perfectas y observen lo que dijo Joseph Campbell: ¡°Follow your bliss¡±, es decir, sigue tu vocaci¨®n¡±, aconsej¨® Alegr¨ªa.

La familia de la poetisa inform¨® de que organizar¨¢ un funeral privado y el cuerpo de Alegr¨ªa descansar¨¢ en el cementerio Las Sierritas, de Managua, al lado de su amado Bud.