¡®Monsters and men¡¯, tres perspectivas sobre la violencia policial en Estados Unidos
El estadounidense Anthony Ramos, de ra¨ªces puertorrique?as, protagoniza el filme de Reinaldo Marcus Green
El director Reinaldo Marcus Green se encontraba en Sundance en 2015. Estaba celebrando la presentaci¨®n de su cortometraje Stop en el festival fundado por Robert Redford. Lo acompa?aba su amigo y uno de los protagonistas del filme, Brian Pollock, quien, aparte de ser actor, forma parte de la Polic¨ªa de Nueva York. Ambos se pusieron a hablar sobre el caso de Eric Garner, un afroamericano que muri¨® estrangulado a manos de un agente del orden en otro caso de excesivo uso de fuerza contra personas de color. El hecho sali¨® a luz a trav¨¦s de un v¨ªdeo que se hizo viral en Internet. Los dos amigos plantearon sus perspectivas, y no pod¨ªan ser m¨¢s diferentes. Ese momento fue el catalizador para la concepci¨®n de Monsters and men, la ¨®pera prima del realizador.
Green, que es de ascendencia afroamericana y puertorrique?a, volvi¨® tres a?os despu¨¦s al Festival de Sundance, donde Monsters and men se hizo con el premio especial del jurado al mejor largometraje destacado en enero pasado. Despu¨¦s de debutar a lo grande con su primer filme, ahora alista su estreno comercial en Estados Unidos este viernes. La pel¨ªcula, que es una expansi¨®n de su cortometraje original ¨Cque aborda la pol¨ªtica de detenci¨®n y registro que realiza la Polic¨ªa de Nueva York¨C, seg¨²n explica, cuenta con las interpretaciones de su compatriota Anthony Ramos y de los actores estadounidenses John David Washington y Kelvin Harrison Jr. en los roles protag¨®nicos.
En Monsters and men, Green cuenta c¨®mo la polic¨ªa mata a un hombre de color desarmado en una calle de un barrio de Brooklyn. Este suceso afecta a Manny (Ramos), que graba el acto y tiene dudas acerca si debe compartir o no el v¨ªdeo. A Dennis (Washington), un agente del orden que queda atrapado entre la espada y la pared frente a la presi¨®n de la comunidad y sus colegas. Y a Zyric (Harrison Jr.), un joven con una gran oportunidad universitaria para jugar b¨¦isbol y que se siente impulsado a involucrarse en las protestas de la comunidad. Tres perspectivas que el director usa para explorar esta problem¨¢tica. ¡°[el filme] Me permiti¨® plasmar estas diferentes perspectivas de c¨®mo una comunidad puede ser afectada por un v¨ªdeo, adem¨¢s de c¨®mo puede haber distintos puntos de vista mirando exactamente un mismo hecho¡±, explica el director v¨ªa telef¨®nica.
La pel¨ªcula se estrena en un momento en el que tanto latinos como afroamericanos, contin¨²an siendo v¨ªctimas de violencia, discriminaci¨®n y racismo. Sin embargo, la pel¨ªcula no es simplemente acerca de la opresi¨®n de polic¨ªas blancos hacia estas dos comunidades. ¡°Muchas veces vivimos en nuestra propia burbuja y rodeados de personas que piensan igual que nosotros, y no estamos interactuando con las diferentes voces que hay afuera. Mi esperanza es que la pel¨ªcula se presente de una forma que, aun cuando te sientas inc¨®modo con algunas de las cosas que refleja, hay un punto de vista con el cual puedes entablar una conversaci¨®n y escuchar¡±, afirma Green.
Narrativa lineal
A diferencia de pel¨ªculas como Babel (2006), de Alejandro Gonz¨¢lez I?¨¢rritu, o Las horas (2002), de Stephen Daldry, que presentan una tem¨¢tica de historias cruzadas, la trama de los tres personajes en Monsters and men opta por una narrativa lineal, sin cortes o escenas retrospectivas. Es un formato no tradicional, seg¨²n Green, que empieza con el personaje de Ramos, lo sigue a ¨¦l, el p¨²blico empieza a generar un afecto hacia este y la perspectiva cambia al personaje de Washington por c¨®mo avanza el argumento. Dice que filmes como Elefante (2003), de Gus Van Sant, o El lugar m¨¢s all¨¢ de los pinos (2013), de Derek Cianfrance, fueron algunas de las cintas que lo ayudaron para lograr intencionalidad de su largometraje.
¡°Fue un desaf¨ªo dif¨ªcil, asegurarme de que se sienta como una historia cohesiva. Trat¨¦ de pensar la que ser¨ªa la mejor estructura para la pel¨ªcula. Fue como, tengo mi punto de vista, te mostr¨¦ un poco de ello y ahora vamos a seguir a alguien m¨¢s. Entonces ah¨ª te cuestionas si la gente seguir¨¢ este formato que no es tradicional. Esta fue la forma en la que, personalmente, pens¨¦ que podr¨ªa conectar con el tema de fondo, al menos de una forma que fuera original¡±, agrega el realizador.
Green dice que la pel¨ªcula tiene cierta familiaridad por su tem¨¢tica y afirma que ¡°si eres una persona de color crees que podr¨ªas saber de qu¨¦ trata el filme, conoces bastante bien todas las situaciones que suceden, pero creo que es una nueva forma de relacionarnos con el tema de fondo que creemos que conocemos¡±. Por este motivo tambi¨¦n, hablar sobre la perspectiva de Dennis, el polic¨ªa afroamericano, era importante. ¡°Tuve una conversaci¨®n con mi primo el otro d¨ªa. Es detective y nunca tuvimos una mala conversaci¨®n al respecto. ?l hace un gran trabajo y me ayuda a tratar de ver su lado de su trabajo y creo que hago mi mejor esfuerzo para hacerle ver los argumentos de personas como Colin Kaepernick, que protestan contra la violencia policial¡±, afirma Ramos en una entrevista para Entertainment Studios.
El v¨ªdeo grabado en el filme funciona como un dispositivo o, incluso, como otro personaje de la historia. La pel¨ªcula retrata el alcance que las redes sociales y los tel¨¦fonos inteligentes han tomado en lo que era la realidad secretamente vivida por las minor¨ªas en Estados Unidos. Sin embargo, Green nunca muestra lo que sucede en la grabaci¨®n y esa fue una decisi¨®n deliberada. Dice que para ver ese tipo de violencia, basta con poner las noticias en la televisi¨®n. ¡°Nos quedamos con el audio, que es m¨¢s inquietante escucharlo y no verlo¡±, dice Green.
Monsters and men no ofrece ni la desesperaci¨®n pura, ni la esperanza inveros¨ªmil. Aborda la forma en que la gente de color y latina vive ahora en EE UU, movi¨¦ndose por las calles con pasi¨®n, prop¨®sito y un ojo siempre atento.
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