Las plataformas digitales se comen al viejo Hollywood
La adquisici¨®n del estudio MGM por Amazon y la compra del m¨ªtico teatro Egipcio de Hollywood por Netflix son la culminaci¨®n de un cambio de paradigma en la industria del cine, que la pandemia ha acelerado con el cierre de salas y el consumo masivo de oferta digital
Amazon ha logrado cazar al le¨®n de la Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) despu¨¦s de semanas de especulaciones y 18 meses de negociaciones. No es el primer matrimonio entre Hollywood y las grandes tecnol¨®gicas, pero s¨ª una importante muestra de c¨®mo las plataformas digitales se comen Hollywood. La compra por 8.400 millones de d¨®lares (6.910 millones de euros) de los legendarios estudios fundados hace 97 a?os, ganadores de m¨¢s de 170 premios Oscar y due?os de la distribuci¨®n de la saga James Bond, es una manifestaci¨®n de la ardua batalla por el control del mercado. La operaci¨®n, junto a la fusi¨®n anunciada la semana pasada de la divisi¨®n de contenidos de AT&T/WarnerMedia y Discovery, vislumbran para los espectadores una nueva era dorada bajo demanda que llegar¨¢ en los pr¨®ximos a?os.
La pandemia transform¨® los h¨¢bitos de consumo de televisi¨®n. El tiempo frente a la pantalla viendo contenidos en las plataformas digitales aument¨® un 44% en todo el mundo durante los ¨²ltimos tres meses de 2020 respecto al mismo periodo de 2019, seg¨²n cifras de Conviva, una firma de investigaci¨®n ubicada en California. Con estos datos en mano, los grandes actores han comenzado lo que un analista de Wall Street llam¨® el mi¨¦rcoles una ¡°carrera armament¨ªstica¡± por hacerse de los arsenales m¨¢s potentes, enormes archivos que permitan hacer m¨¢s atractiva la oferta de contenidos para los suscriptores. Un an¨¢lisis de tendencias digitales de Deloitte hall¨® que el usuario promedio est¨¢ abonado a cinco servicios, dos m¨¢s que antes de la pandemia. Los analistas creen que los acuerdos de licencia, contratos de los estudios con compa?¨ªas de telecomunicaciones para que estas dispusieran de sus productos, tienen los d¨ªas contados. Las pel¨ªculas y las series m¨¢s apetitosas tendr¨¢n exclusividad en servicios como Disney+, Paramount+, Netflix, HBO Max y Peacock, de la cadena de televisi¨®n NBC.
Es cierto que Hollywood siempre fue un term¨®metro de qu¨¦ industria mandaba en el mundo. En 1989, la empresa japonesa Sony compr¨® Columbia cuando la tecnolog¨ªa nipona estaba en pleno auge. En octubre de 2017 la empresa telef¨®nica AT&T anunci¨® un acuerdo de adquisici¨®n de Time Warner, proceso que se remat¨® en junio de 2018 y as¨ª naci¨® WarnerMedia. La semana pasada AT&T decidi¨® escindir de su tronco WarnerMedia y que se fusionara con Discovery, otro gigante de la creaci¨®n de contenidos, surgiendo as¨ª una poderosa divisi¨®n de productos que alimentar¨¢ su plataforma. La fusi¨®n, que se cerrar¨¢ en 2022, permite a ambas compa?¨ªas poner bajo un mismo techo las ficciones de HBO, las noticias de CNN, los documentales de Animal Planet y Discovery, los programas de estilo de vida de Oprah Winfrey y las populares emisiones de Food Network, por ejemplo.
En esa guerra se entiende la compra de MGM: la major (estudio de Hollywood) tiene varios acuerdos de venta de contenidos con diversos canales de televisi¨®n y plataformas (Disney, Netflix, WarnerMedia...) que se convertir¨¢n en sus competidoras una vez que los reguladores den luz verde a la operaci¨®n confirmada el mi¨¦rcoles, algo que podr¨ªa tardar hasta un par de a?os. Estos contenidos, 4.000 t¨ªtulos en total, ser¨¢n migrados al servicio Prime de Amazon, que tiene m¨¢s de 200 millones de suscriptores, pero a¨²n no hay una fecha fija.
Tambi¨¦n es cierto que hace ya d¨¦cadas de los mejores a?os de MGM, que ya empez¨® su decadencia en 1952 cuando una ley antimonopolio oblig¨® a la major a desprenderse de sus cines. Y su vieja idea del cine de Hollywood choc¨® con los nuevos aires de los sesenta. En 1969 el magnate del juego Kirk Kerkorian compr¨® el 40% de las acciones de MGM y lo ¨²nico que hizo fue crear un casino hotel MGM en Las Vegas, mientras recortaba la divisi¨®n cinematogr¨¢fica. M¨¢s interesado en el poder de la marca que en nada relacionado con el cine, compr¨® el 40% del stock de la compa?¨ªa. En 1985 el comprador fue Ted Turner, m¨¢s interesado en su cat¨¢logo que en la producci¨®n de aquel momento; por eso los t¨ªtulos de MGM anteriores a 1986 est¨¢n en manos de WarnerMedia (actual due?a de las empresas Turner), y se han quedado fuera de los adquiridos por Amazon. Curiosamente, Turner se la devolvi¨®, sin esos contenidos, a Kerkorian y este vendi¨® la major a un hombre de negocios italiano. Tras otro par de vueltas, retorn¨®, otra vez, a Kerkorian que en 2005 se la vendi¨® a Sony por 5.000 millones de d¨®lares (2.000 millones fueron directos a pagar deudas). El agujero era tan grande que en 2010 MGM se declar¨® en bancarrota. Y desde entonces la gestiona la sociedad de cartera MGM Holdings.
¡°La compra de Amazon no se trata tanto de que se haya convertido en propietario de un estudio. Es un tema de influencia. MGM les da credibilidad, no dominioTim Hanlon, consultor
Entonces, ?qu¨¦ hace atractiva a MGM? Adem¨¢s de los otros productos audiovisuales antes comentados en otras plataformas, tienen a James Bond. La brit¨¢nica Eon Productions posee los derechos del personaje creado por Ian Fleming y tiene un acuerdo de distribuci¨®n con United Artist, parte del conglomerado MGM.
Tim Hanlon, fundador del grupo Vertere, consultora enfocada a los medios de comunicaci¨®n y entretenimiento, explica la tendencia: ¡°El modelo de una televisi¨®n lineal y escasa se ha desintegrado y se ha convertido en el triunfo del v¨ªdeo bajo demanda, que es muy abundante. Ahora todo depende de la elecci¨®n. Las bibliotecas de contenidos son m¨¢s importantes que los negocios de las empresas¡±.
¡°La compra de Amazon no se trata tanto de que se haya convertido en propietario de un estudio. Es un tema de influencia. MGM les da credibilidad, no dominio¡±, considera Hanlon. El especialista cree que la compa?¨ªa de Bezos puede profundizar los cambios en las ventanas de distribuci¨®n, el tiempo que una pel¨ªcula o serie deben ser exhibidas antes de saltar a medios digitales o f¨ªsicos como los DVD o los Blu-ray. En EE UU esa ventana se mov¨ªa en torno a los 90 d¨ªas, que se est¨¢ renegociando a 45 d¨ªas: las salas de cine pierden negocio, las plataformas digitales disfrutan antes de nuevos contenidos. ¡°El gran reto ahora es c¨®mo rentabilizar y modernizar esas ventanas. Amazon tiene una posici¨®n ¨²nica para hacerlo porque conoce todos los h¨¢bitos de consumo de los usuarios¡±, a?ade el analista. El Hollywood sostenido en las proyecciones en locales f¨ªsicos se tambalea. Y ese terremoto lo inici¨® Netflix, que curiosamente compr¨® en enero un cine emblem¨¢tico, el Teatro Egipcio de Hollywood, y que estos d¨ªas se plantea la renovaci¨®n de la sala.
Estos anuncios han revolucionado un mercado en profunda transformaci¨®n. Netflix, con cerca de 205 millones de suscriptores, intenta mantenerse en cabeza de esta carrera. En un anuncio m¨¢s discreto hecho en abril la empresa afirm¨® que Sony se convertir¨¢ en uno de sus principales proveedores entre 2022 y 2026. Desde el pr¨®ximo a?o, las 15 o 20 pel¨ªculas estrenadas por los estudios har¨¢n su salto, con una ventana de exhibici¨®n reducida en salas de cine, al servicio digital. Sony tambi¨¦n tiene la obligaci¨®n de ofrecer primero a Netflix las producciones que haga cuya salida sea solo bajo demanda. Proveer¨¢ munici¨®n para que el gigante digital pueda librar una guerra cada vez m¨¢s competida.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.