Eduard Fern¨¢ndez: ¡°Madre, si¨¦ntate en primera fila, esc¨²chame y disfruta, que te he hecho un homenaje¡±
El actor cuenta y canta sobre el escenario a su progenitora, fallecida durante la pandemia, con ¡®Todas las canciones de amor¡¯, el primer mon¨®logo de su carrera


Ana Mar¨ªa falleci¨® en Barcelona durante la pandemia. Su hijo, Eduard Fern¨¢ndez, estaba en Madrid y no pudo viajar a la ciudad condal para despedirse de ella. Ahora lo hace con el primer mon¨®logo teatral de su dilatada y exitosa carrera ¨Dtres premios Goya y papeles inolvidables¨D y su proyecto m¨¢s personal, Todas las canciones de amor, en la que el actor barcelon¨¦s, de 58 a?os, pone voz a su madre para contarla y cantarla sobre un escenario. El propio autor, con la ayuda del director de espect¨¢culo, Andr¨¦s Lima, ha reescrito el texto original, obra del autor argentino Santiago Loza, para introducir datos reales, muy concretos, de la personalidad y car¨¢cter de Fern¨¢ndez, de su propia madre y tambi¨¦n del padre, Jes¨²s, gran aficionado a la pintura.
Eduard, un ni?o enclenque al que le gustaba el mar, se enfrenta con Todas las canciones de amor a un texto muy ¨ªntimo y po¨¦tico, con grandes dosis de humor y, en ocasiones, incorrecto. La funci¨®n se estrena el pr¨®ximo 21 de enero en el Teatro Calder¨®n de Valladolid, para pasar luego a los Teatros del Canal de Madrid, del 27 de enero al 12 de febrero, a lo que seguir¨¢ una larga gira.
Pregunta. ?C¨®mo fue el descubrimiento de Santiago Loza?
Respuesta. Llevo mucho tiempo queriendo hacer un mon¨®logo. Debe ser fruto de la edad personal y de las tablas, porque llevo tiempo con ese gusanillo. Pens¨¦ incluso en hacer Informe para una Academia [el cuento de Franz Kafka], pero lo le¨ª y lo encontr¨¦ pesado. Le fui dando vueltas a otras cosas y, en un viaje que hice a Buenos Aires a ver a un gran amigo, este me llev¨® a una sala de teatro off a ver un mon¨®logo, que result¨® ser de Santiago Loza. Se titulaba El mar de noche y lo protagonizaba Luis Mach¨ªn. Era excelente, una maravilla, un t¨ªo sentado en una silla, lo m¨¢ximo que hizo fue un amago de levantarse, de lo que se arrepinti¨® de inmediato. Me dijeron que lo montara yo en Espa?a, pero no pude, era tan perfecto que si quisiese aportar algo solo podr¨ªa hacerlo peor. No se puede hacer mejor que Mach¨ªn. Vi otro tambi¨¦n de Loza buen¨ªsimo y me decid¨ª a comprar su libro de mon¨®logos. All¨ª descubr¨ª Todas las canciones de amor. Poco despu¨¦s muri¨® mi madre en Barcelona y a m¨ª me pill¨® en Madrid, en plena pandemia. No pude ir a despedirla. Fue muy duro. De alguna manera encontr¨¦ en este texto la despedida y homenaje que no pude hacer a mi madre.
P. ?Por qu¨¦ sinti¨® tan cercano este texto?
R. Hay muchas cosas en Todas las canciones de amor que se asemejan a mi relaci¨®n con mi madre, con esa simbiosis de todo lo bueno y lo malo. Cuando habla del hijo me siento muy identificado en esa debilidad y fragilidad del ni?o que era enclenque (eso lo hemos a?adido) al que le gustaba el mar (tambi¨¦n lo hemos a?adido), que ten¨ªa los pies planos como yo y que no pod¨ªa con la vida como me pasaba a m¨ª. Ese soy yo. Es una funci¨®n en la que hablo de mi madre, pero tambi¨¦n hablo mucho de m¨ª. Adem¨¢s, a m¨ª que no me gusta el naturalismo puro y duro en teatro, que amo la poes¨ªa, este texto me daba el espacio para estar, para expresarme en el escenario de una manera no naturalista, para viajar. Me atrap¨® tambi¨¦n el poder de la palabra de Santiago Loza, con un cierto nivel po¨¦tico, un punto literario. Todo ello lo convert¨ªa en un reto y me lanc¨¦. Ahora estoy acojonad¨ªsimo.

P. ?La identificaci¨®n fue total entonces?
R. S¨ª, s¨ª. Esa madre se parece tanto a la m¨ªa en tantas cosas, la relaci¨®n entre madre e hijo me record¨® mucho a la nuestra. Me permit¨ªa hablar mucho de m¨ª sin hablar. Me vino a la cabeza el Joker de Joaquin Phoenix, en el que uno adivina muchas cosas del actor en ese personaje que no es ¨¦l. De los actores dicen que somos t¨ªmidos y as¨ª, a trav¨¦s de un personaje, te atreves a mostrarte y ense?arte en un escenario. A todo eso se a?ad¨ªan las cinco canciones de amor, bell¨ªsimas, que hemos elegido entre Andr¨¦s Lima y yo.
P. ?Qu¨¦ hay del Eduard real en esta funci¨®n?
R. La fragilidad del ni?o, la peque?ez, el que se hac¨ªa pis en la cama, el que ten¨ªa los pies planos. Un ni?o al que su madre le proteg¨ªa de todo, de los vampiros que le chupan la sangre, de los sue?os. Mi madre era sobreprotectora conmigo. Fui un ni?o absolutamente protegido. Yo era el tercero de cuatro hijos y durante mucho tiempo, hasta que naci¨® mi hermana peque?a, fui el peque?o. En mi casa solo hab¨ªa fotos m¨ªas.
P. ?Y de su madre?
R. Me atrajo esa manera po¨¦tica que tiene el texto de contar el paso al m¨¢s all¨¢, la muerte, el infinito, el olvido. Como le pasaba a mi madre, aquejada de deterioro senil durante a?os, que fue perdiendo la memoria de ella misma. Esos blancos que tiene el personaje que son tan teatrales. Esta funci¨®n me hace estar muy cerca del primer deterioro que sufri¨® mi madre hasta llegar al ¨²ltimo y definitivo.

P. ?Es la mejor manera de contar y cantar a una madre?
R. La pretensi¨®n es esa. No pude estar con ella en el momento de su muerte. La tuvimos que ingresar meses antes por el gran deterioro y la imposibilidad de estar en casa. Fue muy duro el ingreso, nosotros que nos hab¨ªamos prometido no hacerlo nunca. Al no ser una obra escrita por m¨ª, el texto sirve de ayuda exterior para hacerlo m¨ªo. He sentido que era la forma m¨¢s adecuada de hacer un homenaje a mi madre, una mujer muy de izquierdas y profundamente religiosa, con un gran sentido de lo trascendental, que cre¨ªa en el misterio.
P. ?Y ah¨ª est¨¢n, de alguna manera, todas las madres?
R. Hay una generaci¨®n de madres, sin duda la de la m¨ªa y seguramente tambi¨¦n la de ahora, que dedicaron y dedican su vida a cuidar a los dem¨¢s para que ellos pudieran salir al mundo. Eran de una generosidad profunda. Si yo tuviera que escribir algo a mi madre, ser¨ªa para agradecerle todos los pa?ales que me cambi¨®, las comidas, los acompa?amientos al colegio. Todo eso no es algo menor, sino fundamental en la vida y muy trascendente.
P. ?No tiene miedo de caer en el sentimentalismo?
R. He cogido la distancia suficiente para que la historia no me arrastre, no me invada y no caiga en una cierta debilidad. Todo esto me lo da la profesi¨®n y las tablas, tambi¨¦n el director que no te deja caer en sentimentalismos.
P. ?Y qu¨¦ han dicho sus hermanos?
R. Que soy un valiente y que tienen muchas ganas de verla.
P. ?Por qu¨¦ busc¨® a Andr¨¦s Lima para dirigir esta obra?
R. Le ten¨ªa muchas ganas. Hab¨ªamos trabajado una vez juntos como actores hace 29 a?os, con la obra Retorno al hogar. Lo recuerdo porque entonces naci¨® mi hija. Como director es excelente, hablamos el mismo lenguaje, tenemos una edad parecida, venimos de una historia com¨²n desde donde abordar el teatro. Al ser un texto tan personal, necesitaba a alguien con quien dejarme llevar y que me dirigiera. Es el primer mon¨®logo que hago en mi vida y necesitaba confiar en alguien. Nadie mejor que Andr¨¦s.

P. Usted viene de formaci¨®n teatral, pero ¨²ltimamente se prodiga muy poco en el teatro. ?Por qu¨¦?
R. Para m¨ª el teatro es medio sagrado y, s¨ª, soy m¨¢s selectivo. El cine no tanto y las series¡ Veremos qu¨¦ pasa a partir de esta funci¨®n, a lo mejor sigo igual con otro mon¨®logo o con un d¨²o. No lo preveo. Depende de lo que te ofrecen y tambi¨¦n de lo que te pagan. Con el tiempo se trata de ir siendo m¨¢s y m¨¢s selectivo, tambi¨¦n en el cine, aunque es dif¨ªcil. Soy muy perfeccionista y preciso, me gusta sentirme c¨®modo. Tengo mucho compromiso con mi trabajo.
P. Empez¨® de mimo callejero. ?Echa de vez en cuando la vista atr¨¢s? ?Qu¨¦ ve?
R. Que era absolutamente feliz. Mis ¨ªnfulas y mis aspiraciones eran hacer mimo y que me cogieran en un local, El Llantiol, en el que empezaban las funciones a las 12 de la noche y en el que hab¨ªa un showman al que le segu¨ªa un mago y luego un mimo. Yo hac¨ªa un n¨²mero de siete minutos y era feliz. Poco a poco, pas¨¦ por Els Joglars, trabaj¨¦ con Llu¨ªs Pasqual y Calixto Bieito y luego lleg¨® el cine. Pero mi sensaci¨®n siempre ha sido que ten¨ªa que ir escal¨®n a escal¨®n y eso es lo que le cuento yo a mi hija [Greta Fern¨¢ndez, tambi¨¦n actriz]. El que sube de golpe se arriesga a meterse un hosti¨®n del quince. Y eso son tablas y en esta profesi¨®n las tablas son mucho.
P. Ha trabajado dos veces con su hija, en la pel¨ªcula La hija de un ladr¨®n y en la serie 30 monedas, de ?lex de la Iglesia. ?Le gusta, se siente c¨®modo?
R. S¨ª. Fue f¨¢cil con Greta. Pens¨¢bamos que nos ¨ªbamos a emocionar, pero nada. Sale todo normal. Ella ha heredado muchas tablas de mi parte, ese es el regalo que le he hecho.
P. La tensi¨®n independentista en Catalu?a ha bajado. ?C¨®mo se vive desde Madrid?
R. Mira, con esta obra tengo gira en todas partes menos en Barcelona. M¨¢laga, Bilbao, Sevilla, Murcia y muchas m¨¢s... y solo una en el Prat de Llobregat. No pude ir a Barcelona a despedirme de mi madre porque est¨¢bamos en plena pandemia y ahora tampoco con esta funci¨®n. A veces cuando voy a Catalu?a tengo una sensaci¨®n dif¨ªcil de contar, algo inc¨®moda. Por ejemplo, cuando me llamaron de TV3 para una entrevista y me cortaron la mitad de la respuesta. Me advirtieron que me iban a cortar porque, dijeron, la gente no lo entender¨ªa, que lo hac¨ªan por mi bien. Eso se llama censura. La pregunta fue: ¡°Sabemos que no eres independentista, pero ?est¨¢s a favor del derecho a decidir?¡±. Les contest¨¦ que s¨ª, lo expliqu¨¦ y a?ad¨ª que me hab¨ªa parecido una barbaridad la declaraci¨®n unilateral de independencia, sabiendo que ten¨ªan menos de la mitad de la poblaci¨®n a favor. Fue esto lo que me cortaron y ah¨ª mismo me lo dijeron.
P. Por ¨²ltimo, ?qu¨¦ le dir¨ªa hoy a su madre?
R. Madre, ven, si¨¦ntate en primera fila, esc¨²chame y disfruta, cari?o, que te he hecho un homenaje.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
