Demas Nwoko, un Le¨®n de Oro inesperado
Esta semana se inaugura la Bienal de Arquitectura de Venecia comisariada por Lesley Lokko. El premio a la trayectoria se ha concedido por primera vez a un proyectista africano
Demas Nwoko (1935, Idumuje-Ugboko, Nigeria), el primer africano en ver su trayectoria reconocida con el Le¨®n de Oro de la Bienal de Venecia, es un arquitecto integral, total: aborda cada una de las facetas de la disciplina. Adem¨¢s es pintor, escultor y dise?ador. Lo fue antes de convertirse en arquitecto estudiando en Benin City.
Formado en Bellas Artes, en lugar de en una escuela t¨¦cnica, le choc¨® que el arte africano, que hab¨ªa influido tanto en el despegue de las vanguardias europeas de principios de siglo, no se estudiara en su pa¨ªs. Por eso particip¨® en la fundaci¨®n de la asociaci¨®n Zaria Art Society para fomentar la mezcla entre la tradici¨®n africana y el canon art¨ªstico occidental. No ha abandonado nunca esa idea. El ¨¢nimo era integrador. Por encima de rupturas y cancelaciones, Nwoko defend¨ªa estudiar y combinar lo mejor de ambos mundos. Por su parte, se fue a estudiar Escenograf¨ªa en Par¨ªs en los a?os sesenta y regres¨® a la universidad de su ciudad para dar clase. Fue poco despu¨¦s cuando comenz¨® a construir.
Su primera obra, la Capilla de los monjes dominicos en Ibadan, fue un trabajo pro bono: le encargaron un altar y propuso hacer un edificio. Como autodidacta, predic¨® lo que defend¨ªa: la mezcla. La estructura de hormig¨®n exterior encierra ligereza: las vidrieras filtran la luz que construye el interior del templo. Y all¨ª dentro las columnas no son ni d¨®ricas ni j¨®nicas ni corintias: tienen la expresi¨®n individual de los t¨®tems africanos.
En su propio estudio en Ibadan, son unas gradas lo que remite a los anfiteatros griegos. Su obra es, esencialmente, integradora. Por encima de las rupturas, propone una globalizaci¨®n digerida: absorber lo mejor de ambos mundos, el occidental y el nigeriano, la modernidad y el genius loci. ?Por qu¨¦ la modernidad cuestion¨® maneras de construir que llevaban a?os perpetu¨¢ndose sin preguntarse qu¨¦ las hac¨ªa durar? Esa es la pregunta que lanza su arquitectura.
La que Lokko ha querido recuperar para una Bienal que aspira a demostrar que ?frica tiene soluciones para mejorar la arquitectura, y la sostenibilidad, del planeta. El arquitecto nigeriano que ha elegido reconocer con el Le¨®n de Oro cumple tambi¨¦n ese cometido. Nwoko, adem¨¢s de un arquitecto que promueve la digesti¨®n del conocimiento cosmopolita, es un precursor de la sostenibilidad: siempre ha trabajado con materiales locales (kil¨®metro 0) y tratando de actualizar la tradici¨®n para mitigar los efectos del clima. ?C¨®mo? Con las recetas que hoy no nos cansamos de escuchar: el aire debe entrar y salir lentamente de los edificios para mantener una temperatura constante agradable. Parece sentido com¨²n. Un Le¨®n de Oro que demuestra que el pasado, adem¨¢s de una fuente de conocimiento, puede ser una fuente de vanguardia.
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