El trabajo oculto detr¨¢s de la piragua

El K4-500 que luchar¨¢ por el oro ol¨ªmpico en Tokio est¨¢ compuesto por cuatro pirag¨¹istas (Sa¨²l Craviotto, Cristian Toro, Marcus Cooper y Rodrigo Germade); pero en realidad es un equipo de seis. Lo dirige, incansable, Miguel Garc¨ªa, el entrenador. David Calvente se uni¨® a ellos antes de los Juegos de R¨ªo: del K2-200 de oro de Craviotto y Toro ¨Cdistancia que no ser¨¢ ol¨ªmpica en Tokio- ha pasado ahora al K4-500.

Este inform¨¢tico de 48 a?os es el que se encarga del trabajo oculto, el que no se ve y que permite ara?ar cent¨¦simas valiosas en una prueba y en una distancia en la que la salida y la t¨¦cnica de palada son fundamentales. ¡°En un momento en el que intent¨¢bamos mejorar por muchas v¨ªas la t¨¦cnica de la salida y la general del equipo y no ten¨ªamos manera de medir y cuantificar esa mejora, apareci¨® la pala, nuestra herramienta, esa gran desconocida. Yo puedo clavar la punta con un zapato, pero si la clavo con un martillo la voy a clavar mejor y de una forma m¨¢s sencilla. Nosotros est¨¢bamos utilizando la pala como un zapato¡±, es la met¨¢fora que emplea Garc¨ªa. ¡°Hab¨ªa muchas cosas de la t¨¦cnica que hac¨ªamos de forma correcta, pero sin un fundamento te¨®rico. David tuvo la inquietud de buscar el porqu¨¦ de las cosas¡±, a?ade. Adem¨¢s de los estudios y an¨¢lisis sobre la t¨¦cnica de palada, fabric¨® una m¨¢quina espec¨ªfica para mejorar ambas cosas. Tambi¨¦n ha incorporado asientos giratorios y desarrollado una serie de software, aparatos y aplicaciones que puede controlar y activar desde el agua o desde China.

¡°La salida en R¨ªo fue clave, la mejoramos much¨ªsimo con el trabajo de David¡±, afirma Craviotto a orillas del Guadalquivir, donde est¨¢n concentrados en los meses invernales. En mayo de 2016 se lo jugaron todo en el clasificatorio de Duisburg. S¨®lo val¨ªa ganar para obtener la plaza ol¨ªmpica. La ganaron y en menos de cinco meses consiguieron un barco ganador que arras¨® en R¨ªo. ¡°Despu¨¦s de muchos an¨¢lisis determinamos que hab¨ªa una manera ¨®ptima de hacer la salida, pero ¨ªbamos contrarreloj y necesit¨¢bamos un sistema que explicara fuera del agua el concepto que permitiera al palista sentir lo que quer¨ªamos nosotros y que adem¨¢s hubiera una transferencia inmediata al agua. Dise?amos una m¨¢quina de unos seis metros con unos railes sobre un soporte en el que colocamos la piragua. Se pueden dar dos paladas sobre unos brazos articulados y con movimientos laterales y circulares que simulan la palada de una manera bastante fiel¡±, explica Calvente, que ahora trabaja a destajo con el K4-500, el buque insignia del pirag¨¹ismo espa?ol, campe¨®n de Europa y subcampe¨®n del mundo en 2018.

Calvente, que tiene una empresa de I+D en Castell¨®n, se junta con el K4-500 en momentos puntuales de la temporada. Se ha implicado por amor al pirag¨¹ismo que practic¨® de peque?o y a la tecnolog¨ªa. La Federaci¨®n empez¨® a pagarle las estancias y los desplazamientos con el equipo en 2018; de momento no est¨¢ en n¨®mina y la m¨¢quina que construy¨® en 2016 ¨Cunos 4.000 euros- la pag¨® de su bolsillo. Para software y aplicaciones que ha desarrollado en los a?os anteriores ha recibido una peque?a compensaci¨®n econ¨®mica a la espera que se formalice su colaboraci¨®n dentro del equipo nacional.

Entre sus aportaciones est¨¢ la incorporaci¨®n de asientos giratorios. ¡°Los asientos tambi¨¦n tienen que ver con la t¨¦cnica: es importante averiguar el rango de giro ¨®ptimo que tienen. En mi empresa dise?amos un dispositivo electr¨®nico que se conecta debajo del asiento giratorio y tiene un sensor de giro conectado al tel¨¦fono. Recibimos gr¨¢ficas de los movimientos de la piernas y le se?alamos a los pirag¨¹istas cu¨¢l es el rango ¨®ptimo. Si est¨¢n demasiado encogidos no tienen rango, si est¨¢n demasiado estirados enseguida se les corta. Son cosas b¨¢sicas que te da el dispositivo¡±, explica.

Antes de que comience el entrenamiento carga mesa, silla y una serie de cachivaches y monta su oficina a pie del canal. ¡°Desarroll¨¦ un software en el que guardo la base de datos de los cuatro palistas. Puedo seleccionar al que quiera, desde China, desde mi casa o desde aqu¨ª, activar las c¨¢maras de salida y recibir directamente el video y la gr¨¢fica de oscilaci¨®n de su piragua y en tiempo real advertirle si hay algo raro. Es una herramienta muy potente¡±, a?ade Calvente sentado en el hangar del centro de alto rendimiento de Sevilla despu¨¦s de una larga jornada de trabajo que a¨²n no ha terminado. Las salidas, esta ma?ana, se han grabado en c¨¢maras de alta velocidad. Los v¨ªdeos se descargan enseguida mientas Craviotto y compa?¨ªa vuelven al punto de salida; all¨ª ven las im¨¢genes a c¨¢mara lenta en un monitor sin bajarse de la piragua. ¡°Nos aporta una capacidad de correcci¨®n inmediata para la siguiente pr¨¢ctica¡±, matiza Calvente.

Miguel Garc¨ªa trabaja con ¨¦l codo con codo. Fue pirag¨¹ista antes que entrenador y dice que en este ambiente siempre ha costado innovar. ¡°David no para, siempre est¨¢ ah¨ª inventando¡­ ¨¦l quiere dar un paso de dos metros, yo de uno y al final quedamos en uno y medio. Va muy r¨¢pido y es bueno, pero a nosotros a veces nos cuestan los cambios. Yo todav¨ªa tengo el recuerdo de cuando estaba en el agua y a veces sin querer me dejo llevar por esas situaciones y me da la impresi¨®n de que son cambios demasiado bruscos¡±, apunta el entrenador. Calvente dice que le ha costado cuatro a?os ganarse la confianza de los palistas. ¡°Poco a poco fueron entendiendo qu¨¦ hac¨ªa yo aqu¨ª. Ha sido un trabajo de miner¨ªa intenso, de pico y pala porque no se puede zarandear el ¨¢rbol de arriba abajo, las cosas tienen que ser asimiladas poco a poco¡±, a?ade.

S¨®lo el K4-500 disfruta de esas mejoras. ¡°Es necesario aportar tecnolog¨ªa y ciencia si queremos seguir cosechando resultados porque no van a durar si no invertimos¡­ Y la federaci¨®n tiene que invertir mucho m¨¢s¡±, resume Calvente.