El golpe m¨¢s duro para Carolina Mar¨ªn: vuelve a pasar por el quir¨®fano y se pierde los Juegos Ol¨ªmpicos

El pasado viernes, cuando Fernando Rivas, entrenador de Carolina Mar¨ªn, se encontr¨® con varias llamadas perdidas del segundo t¨¦cnico, Anders Thomsen, supo que algo hab¨ªa pasado. ¡°?Urgente, ll¨¢mame!¡±, le escribi¨® el dan¨¦s por WhatsApp tras ver que no consegu¨ªa localizarlo. Rivas, que estaba aislado por covid en su casa, sol¨ªa conectarse a los entrenamientos por Zoom. Ese d¨ªa se lo perdi¨® porque ten¨ªa una reuni¨®n. Cuando llam¨® a su ayudante, se encontr¨® con la imagen de Carolina Mar¨ªn llorando en el suelo y agarr¨¢ndose la rodilla izquierda. Se acababa de romper el ligamento cruzado; a?o y medio despu¨¦s de operarse el de la rodilla derecha. Si en Indonesia, en enero de 2019, el ligamento se parti¨® tras un mal apoyo esta vez fue por una rotaci¨®n, un movimiento completamente diferente. Se despide de los Juegos de Tokio de este verano y volver¨¢ a pasar por el quir¨®fano. Todav¨ªa no hay fecha, est¨¢n valorando opciones. Ya la han advertido de que esta vez har¨¢n falta al menos tres semanas antes de que pueda volver a pisar y apoyar el pie.

¡°Si hace falta contratar a un cham¨¢n, recurriremos a un cham¨¢n¡±, les dec¨ªa el t¨¦cnico al resto del equipo mientras Mar¨ªn se somet¨ªa a una resonancia magn¨¦tica en la Cl¨ªnica CEMTRO. El diagn¨®stico no pudo ser peor: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda adem¨¢s de una rotura parcial del menisco externo e interno. ¡°Un desastre¡±, resumen en el equipo.

Ese d¨ªa le explicaron los m¨¦dicos a Mar¨ªn que hab¨ªa alguna opci¨®n de que no tuviera que someterse a cirug¨ªa. Le recomendaron que intentara hacer una terapia conservadora durante un tiempo, ya que el ligamento roto parec¨ªa haberse quedado en su sitio, dentro de la vaina, esta s¨ª intacta. Le explicaron que hab¨ªa alguna opci¨®n (remota, el 1% de los casos) de que el ligamento pudiera ir creciendo dentro de la vaina. Eso era una forma de intentar aguantar al menos hasta los Juegos y optar por el quir¨®fano a la vuelta de Tokio. La jugadora y el equipo consideraron que, de poder acudir a la cita ol¨ªmpica, lo har¨ªa para participar, en ning¨²n caso en condiciones de competir y pelear por repetir el oro de R¨ªo 2016. Adem¨¢s, al ser zurda, la izquierda es su pierna dominante, imprescindible para las frenadas y las salidas en el juego.

Se dieron 48 horas de margen, con el fisio trabajando a destajo y la psic¨®loga, Mar¨ªa Mart¨ªnez, reforzando las sesiones de relajaci¨®n y meditaci¨®n. Y con el apoyo de su madre, que hab¨ªa viajado de Huelva a Madrid para pasar el fin de semana con la deportista. Tras una segunda revisi¨®n el domingo por la tarde, la onubense de 27 a?os ha decidido volver a pasar por el quir¨®fano. Para, al menos, intentar recuperarse a tiempo para disputar el Mundial de Huelva, su casa, previsto entre el 29 de noviembre y el 5 de diciembre. La rotura es diferente a la que tuvo en la rodilla derecha; esa vez, necesit¨® siete meses para volver a las pistas.

El golpe an¨ªmico ha sido enorme para Mar¨ªn, que en Tokio buscaba revalidar el t¨ªtulo de R¨ªo y entrar en la historia como la mejor jugadora de b¨¢dminton. Iba por el camino correcto. ¡°Le ense?amos un indicador de rendimiento con muy buenos resultados y estaba enchufad¨ªsima. Est¨¢bamos muy, muy contentos con el trabajo porque la preparaci¨®n en esta recta final estaba siendo muy fina. El arranque de 2021 que ha tenido Carolina ha sido el mejor de su carrera¡±, confiesa Rivas. Gan¨® dos abiertos en Tailandia el pasado mes de enero; lleg¨® a la final de la Copa de Maestros, gan¨® tambi¨¦n el abierto de Suiza y a principios de mayo se hizo con su quinto Europeo seguido.

Despu¨¦s de la grave lesi¨®n de 2019, la peor lesi¨®n de su carrera, Mar¨ªn fue capaz de volver sin que su juego ¡ªmuy f¨ªsico¡ª se resintiera. A la semana de operarse ya estaba en la pista, rodeada de los suyos y entren¨¢ndose a la pata coja. No hab¨ªa un minuto que perder: coj¨ªn en la silla para apoyar la pierna operada; y a trabajar con la otra. Ya estaba el fisio para descargarle las lumbares, sobrecargadas por esa forma at¨ªpica de trabajar.

¡°Esto ha sido muy, muy duro. Demasiado incluso para una t¨ªa tan fuerte como Carol. Esto es muy duro de digerir. Estamos muy jodidos, sobre todo por lo que ha sido capaz de hacer en estos dos ¨²ltimos a?os¡­ Si hay alguien que no se lo merec¨ªa, es ella, parece que cada vez que consigue sacar la cabeza, llega otra hostia¡±, resume Fernando Rivas, que lleva trabajando con Carolina desde que lleg¨® al CAR de Madrid con 14 a?os.

De hecho, en esta recta final hacia Tokio, en el equipo hac¨ªan mucho hincapi¨¦ en el trabajo mental, en hacerle ver lo que hab¨ªa conseguido, lo que hab¨ªa superado: primero con la grave lesi¨®n de 2019 y un a?o y medio despu¨¦s con el fallecimiento de su padre que la dej¨® muy tocada emocionalmente. Consigui¨® transformar ambas cosas como una motivaci¨®n extra para conseguir el oro en Jap¨®n. Ahora est¨¢n intentando animarla haci¨¦ndole ver que Par¨ªs 2024 tampoco queda tan lejos. Llegar¨ªa con 30 a?os.

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