Nadal: ¡°Estoy orgulloso de estar f¨ªsicamente vivo¡±
El mallorqu¨ªn, ¨²nico superviviente espa?ol en el torneo, enlaza 14 presencias consecutivas en los cuartos de un grande y afronta al imprevisible Shapovalov
Sea cual sea la circunstancia, haga fr¨ªo o calor, se juegue de d¨ªa o de noche y llegue mejor o peor, Rafael Nadal es todav¨ªa imperecedero. A sus 35 a?os, m¨¢s que de vuelta y con el escafoides del pie izquierdo partido por la mitad, el mallorqu¨ªn dispone de un kit de supervivencia ¨²nico y casi siempre encuentra la soluci¨®n, por muy feo que haya podido ponerse el partido o por mucho que desde el otro lado se insista e insista, se le rete una y otra vez, caso de Adrian Mannarino. El franc¨¦s, un veterano (33 a?os) con bastante m¨¢s potencial del que refleja su ranking (69?), le condujo hacia una situaci¨®n l¨ªmite durante hora y media, pero se top¨® con la cruda realidad: para tumbar a Nadal (7-6(14), 6-2 y 6-2, en 2h 40m) hacen falta varios bombarderos.
Para sellar su pase a los cuartos de final y encontrarse con el canadiense Denis Shapovalov, l¨ªmite de Alexander Zverev (6-3, 7-6(5) y 6-3), el espa?ol se vio sometido a una situaci¨®n insospechada y ¨²nica. Nunca hab¨ªa dirimido un tie-break tan prolongado, 30 puntos (16-14) que se extendieron durante 28 minutos y 40 segundos. En cualquier caso, marc¨® territorio y exhibi¨® filo. Cuanto m¨¢s arriba est¨¢ el agua y m¨¢s peliaguda es la situaci¨®n, mejor es la reacci¨®n del balear, que sorte¨® las cuatro opciones que se granje¨® el rival para cerrar el set y le liquid¨® al s¨¦ptimo intento, dejando varias de esas llamaradas tan caracter¨ªsticas, esprintando de un lado a otro y firmando un mu?ecazo cruzado que puso a la Rod Laver (y al propio Rod Laver, presente) en pie.
Tiene Nadal un sinf¨ªn de vidas, repertorio para escapar de casi todas. Ante el franc¨¦s resolvi¨® el desempate m¨¢s largo de su carrera, no demasiado lejos de los tres m¨¢s dilatados que se han registrado hasta ahora: los 36 puntos que totalizaron Lorenzo Sonego y Taylor Fritz en el Roland Garros de 2020, la misma cifra que Jarkko Nieminen y John Isner en el tie-break m¨¢s largo que se ha jugado hasta hoy en Wimbledon, en 2014, y que Johanna Konta y Denisa Satralova en Par¨ªs hace siete cursos. En cualquier caso, todos ellos por detr¨¢s del que protagonizaron el franc¨¦s Jo-Wilfred Tstonga y el estadounidense Andy Roddick en el Open de Australia de 2007: 38 puntos, 20-18.
¡°He puesto un poquito m¨¢s de lo que estoy acostumbrado ¨²ltimamente, a nivel de impactos y de salvar bolas¡±, valor¨® el de Manacor, garant¨ªa en los grandes escenarios y con 45 presencias en los cuartos de los majors a sus espaldas. ¡°De lo que m¨¢s orgulloso estoy es de poder estar aqu¨ª, de haber podido jugar siete partidos desde que llegu¨¦ a Australia [tres en el preparatorio de Melbourne y cuatro en el Open] y de estar vivo f¨ªsicamente, sentirme m¨¢s o menos bien. Era algo dif¨ªcil de imaginar hace unas semanas, as¨ª que estoy feliz por ello. Esto ha sido una inyecci¨®n de moral¡±, agreg¨® en declaraciones al canal Eurosport, convertido ya en el ¨²nico superviviente espa?ol en el torneo puesto que las dos opciones restantes, las de Paula Badosa y Pablo Carre?o, se esfumaron en la apertura y el cierre de la jornada, de manera respectiva.
Oscila la cotizaci¨®n
Son ya 73 triunfos en Australia ¨Cen t¨¦rminos de victorias, su segundo terreno m¨¢s productivo tras Roland Garros (105)¨C, 295 en los Grand Slams, 498 sobre pistas duras y 14 presencias consecutivas entre los ocho mejores de un grande, registro r¨¦cord en su carrera. No falta en dicha estaci¨®n desde que cediera ante los ca?onazos del luxemburgu¨¦s M¨¹ller en Wimbledon 2017.
El martes (horario por confirmar) se expondr¨¢ al talento de Shapovalov, protagonista del pelotazo del d¨ªa. El canadiense, de 22 a?os y tan delicioso como intermitente, zurdo creativo y con un impacto de bola por encima de la media, ser¨¢ una prueba de alto nivel a tenor del ofrecido en su ¨²ltimo partido. Despach¨® al n¨²mero tres, el favorito en las quinielas junto al ruso Daniil Medvedev. Vista la progresi¨®n del balear, oscila la cotizaci¨®n. ¡°Ganarle a Zverev en tres sets es muy dif¨ªcil, y ¨¦l lo ha conseguido. Tiene un potencial ten¨ªstico enorme y soy consciente de que tendr¨¦ que jugar a mi mejor nivel, pero bueno, aqu¨ª estoy¡±, zanj¨® feliz el campe¨®n de 2009. Una vez m¨¢s al frente.
¡°?Si ahora soy favorito o puedo ganar el domingo? No lo s¨¦, ni me lo planteo. Voy d¨ªa a d¨ªa¡±, rebaj¨®. ¡°Dije que a priori, antes de empezar el torneo no era candidato y a?ad¨ª que en el deporte las cosas cambian muy r¨¢pido. Lo que hoy parece una cosa, al siguiente d¨ªa puede parecer otra. Han pasado diez d¨ªas y evidentemente estoy en una posici¨®n mejor; dicho esto, no soy de hablar sobre si me considero o no, sobre si estoy o no. La pista manda. Yo solo espero estar preparado para competir¡±, zanj¨®.
Apeadas Garbi?e Muguruza (2? ronda) y Badosa, tambi¨¦n Carlos Alcaraz (3?) y el combativo Carre?o, su continuidad mantiene al tenis espa?ol en el escaparate de Melbourne. Sea como sea, contra viento y marea y algo m¨¢s, Nadal siempre est¨¢ ah¨ª.
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