Una Vuelta con intriga
Sin Pogacar, Vingegaard ni Evenepoel, Roglic parte como favorito frente a un pu?ado de corredores como Kuss, Almeida, Landa, Mas, Carapaz y Carlos Rodr¨ªguez
Bajo la Torre de Bel¨¦m de Lisboa, donde desemboca el Tajo en el Atl¨¢ntico y donde el oc¨¦ano acompa?a mansamente a las olas hasta la orilla entre el jolgorio de las gaviotas, desfilan los diferentes equipos que participar¨¢n en la Vuelta. Los ciclistas se api?an en una improvisada carpa antes de recorrer el pasillo hasta la pasarela, los directores de equipo atienden con una sonrisa a los medios, los hinchas disfrutan de la cercan¨ªa de los protagonistas, las chanzas se suceden entre los exciclistas que acompa?an a la caravana, fiesta sobre dos ruedas. Trona la m¨²sica de la animada DJ, reverberan los aplausos de los aficionados agolpados que se han acercado a la presentaci¨®n de los corredores ¡ªsobre todo a los portugueses Rui Costa (EF), Nelson Oliveira (Movistar) y Jo?o Almeida (UAE)¡ª, y no faltan las an¨¦cdotas como pistoletazo de salida para una edici¨®n que no tiene a un claro favorito, acaso Primoz Roglic, conquistador de tres laureles (2019, 2020 y 2021). Despu¨¦s, un ramillete de candidatos que levantan la mano. Es la apertura del abanico tras la tiran¨ªa de Pogacar, que no se ha animado a lograr un triplete nunca visto, pues ya tiene en el zurr¨®n el Giro y el Tour del curso; tambi¨¦n tras las advertidas ausencias de Vingegaard y el doble campe¨®n ol¨ªmpico, Evenepoel.
Precisamente, Roglic (Bora) se da un ba?o de masas en solitario porque llega tarde a la presentaci¨®n, despistado, tard¨®n, hecho incomprensible porque desaparece sin previo aviso. Su equipo, que ya ha desfilado por la pasarela, abre los ojos y se encoge de hombros como respuesta. Nadie sabe, nadie entiende. Pero cuando la gala estaba por concluir, el esloveno llega sin previo aviso y se sube al estrado, brazos en alto, sonriente, alimentado por el jaleo. No hay respuesta sobre lo que le ha pasado, pues estaba en el autob¨²s del equipo. ¡°Perd¨ª el rumbo¡±, se limita a bromear Roglic, lejos de pasar por una situaci¨®n azarosa. En el Bora, sin embargo, conf¨ªan en que sea la ¨²ltima ocasi¨®n que se pierde en la Vuelta, toda vez que se le presupone la gloria de la carrera, aunque queda por ver c¨®mo le responde el cuerpo tras los dos serios topetazos que se ha dado en el curso, una ca¨ªda masiva en la Itzulia donde bes¨® la cuneta, y la otra en el Tour despu¨¦s de colisionar con una moto y da?arse la espalda y el hombro, abrasiones por doquier.
Desde el 17 de agosto al 8 de septiembre ser¨¢ una Vuelta donde habituales segundones trabajar¨¢n para ellos mismos, sin ataduras ni ¨®rdenes de los oligarcas de la bici, con la responsabilidad del triunfo a sus espaldas. Todo o nada. Pero el recorrido no apunta a treguas, pues solo hay una etapa llana por ocho de monta?a, cinco de media monta?a, otras tantas onduladas con dos finales en alto, adem¨¢s de dos contrarrelojes.
Tras dejar Portugal ¡ªdonde se celebran las tres primeras etapas, ¨²nico pa¨ªs que repite salida fuera de Espa?a, despu¨¦s de hacerlo en 1997 con motivo de la Expo¡ª, se espera la criba en la primera semana, especialmente en la ascensi¨®n del Pico Villuercas (4? etapa) y la doble subida al Alto de Hazallanas de Granada (9?). Las piernas no descansar¨¢n por tierras gallegas con el Puerto de Ancares (13?); y probablemente quebrar¨¢n por Asturias con el Cuitu Negru (15?) y los Lagos de Covadonga (16?). Los que queden en pie en la lucha por el cetro se lo jugar¨¢n en la pen¨²ltima etapa, en el burgal¨¦s Pic¨®n Blanco (20?). Aunque, qui¨¦n sabe, abierto como est¨¢ el abanico, quiz¨¢ sea Madrid el ¨²ltimo juez, pues la Vuelta se cierra con una crono de 22 kil¨®metros por las calles de la capital, espect¨¢culo del bueno.
Le gusta a Roglic, en busca de la cuarta victoria para superar al suizo Tony Rominger y el espa?ol Alberto Contador (tambi¨¦n con tres triunfos), y para atrapar el r¨¦cord del bejarano Roberto Heras (cuatro). Tras Primoz, en cualquier caso, hay un pu?ado de corredores que pide turno.
Lo hace Sepp Kuss (Visma), que ya gan¨® en 2023 ¡ªtriunfo validado por las ¨®rdenes de equipo porque completaron el podio sus compa?eros Vingegaard y el propio Roglic, entonces en Visma¡ª. Pero en este curso no ha rodado con fluidez, como si el liderazgo, habitual gregario de lujo ¨¦l, le lastrara. Aunque al fin se le vio desatado en la pasada Vuelta a Burgos. ¡°Sin Pogacar ni Vingegaard, los dem¨¢s, los humanos, tenemos una oportunidad. Todo est¨¢ m¨¢s abierto¡±, reflexiona el americano; ¡°aunque preferir¨ªa que estuviera Jonas Vingegaard porque con ¨¦l en el equipo me quita mucha presi¨®n¡±.
Lo hace Mikel Landa (Soudal), quinto en el Tour reciente y en la pasada Vuelta. ¡°S¨ª, sin ellos se abre la carrera y, salvo Roglic, no hay un favorito claro. Los dem¨¢s estamos muy parejos y me gustar¨ªa hacer podio. Pero no s¨¦ c¨®mo estoy f¨ªsicamente despu¨¦s del Tour. Estoy viejo, soy un T-Rex, a ver si tengo fuerza¡±, brome¨®.
Y, claro, lo hace tambi¨¦n el joven Carlos Rodr¨ªguez (Ineos), que afronta dos grandes vueltas por primera vez ¡ªya corri¨® el Tour, aunque enferm¨® en la ¨²ltima semana y baj¨® su rendimiento¡ª y pone tanta cautela como ambici¨®n: ¡°?Por qu¨¦ no ganar la Vuelta? Voy a luchar por ello, para eso he venido aqu¨ª. S¨¦ que es muy dif¨ªcil, que hay corredores muy fuertes, aunque no est¨¦n los tres que hicieron podio en el Tour, pero hay que luchar y creer que se puede conseguir¡±.
Richard Carapaz tambi¨¦n se apunta: ¡°Las ausencias de estos grandes corredores marca la carrera. Roglic es uno de los aspirantes y tiene algo especial con la Vuelta. Pero Landa, Carlos Rodr¨ªguez, Kuss¡ Estar¨¢ bonita la pelea, aunque mi ambici¨®n es ganar¡±, reflexion¨® el ecuatoriano.
La ¡®exigencia¡¯ de Almeida
Enric Mas (Movistar), sin embargo, tambi¨¦n saca billete, toda vez que comenz¨® renqueante el Tour, pero lo acab¨® de la mejor de las maneras, code¨¢ndose con los l¨ªderes en la monta?a. ¡°Termin¨¦ bien en Francia y espero seguir as¨ª ahora, veremos c¨®mo responde el cuerpo. Lo que est¨¢ claro es que me encanta ganar y tengo la voluntad de hacerlo¡±. Otros se ponen a la cola, como Jo?o Almeida (UAE) ¡ªtercero en el Giro de hace dos cursos y cinco top-6 en las grandes vueltas¡ª, que tiene la dif¨ªcil empresa de ganar la Vuelta para que el UAE haga pleno en el a?o [Pogacar se llev¨® las otras dos grandes] como hiciera el Visma en el curso anterior.
Otro que tambi¨¦n quiere significarse es Tao Geoghegan Hart, campe¨®n del Giro en 2020. Aunque en la presentaci¨®n de equipos las pas¨® canutas, pues la speaker hizo un tierra tr¨¢game de arrea. Resulta que se acerc¨® al ciclista, le pregunt¨® por su estado f¨ªsico y ambiciones... Y se llev¨® un buen chasco porque le pregunt¨® a un compa?ero de equipo que no era ¨¦l. ¡°Tao est¨¢ all¨ª¡±, se esforz¨® en contestar. ¡°Con ganas de hacerlo lo mejor posible¡±, se limit¨® a responder el brit¨¢nico, entre mosqueado y desconcertado por el despiste.
Arranca el certamen con la contrarreloj de hoy ¡ª12 kil¨®metros con final en Oeiras¡ª, una Vuelta con mucha intriga y desenlace incierto.
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