Nadal, certezas e inc¨®gnitas hacia el punto final
La reaparici¨®n de Barcelona ilusiona al tenista, que apunta a Roland Garros como objetivo ¨²ltimo sin que se despeje el enigma f¨ªsico: ¡°Pueden pasar muchas cosas¡±
Barcelona es el primer punto de una escalada emocional que apunta, o as¨ª lo desliza el protagonista, a alcanzar el cl¨ªmax en la arena de Par¨ªs. Dentro de poco m¨¢s de un mes ¡ªel 26 de mayo exactamente¡ª comenzar¨¢ Roland Garros, objetivo para el que Rafael Nadal concentra todos sus esfuerzos porque el boceto que insinuaba su mente durante la pretemporada ha ido saltando por los aires y al tenista no le ha quedado m¨¢s remedio que improvisar sobre la marcha. Dicta el d¨ªa a d¨ªa, en realidad. Pelota a pelota. No pudo jugar en Australia, tampoco en Indian Wells y, tras descartar Montecarlo, punto de partida de la gira sobre tierra batida, encontr¨® un oasis inesperado en el club de su vida. El del God¨® es un primer adi¨®s de alta carga simb¨®lica ¡ªel desenlace parte del origen¡ª, resumido en siete d¨ªas que concentran tantas certezas como interrogantes: conf¨ªa el mallorqu¨ªn en disfrutar de un ¨²ltimo baile en el Bois de Boulogne, pero hoy por hoy, todo sigue estando en el aire.
Juego, pero condicionado. Los duelos contra Flavio Cobolli (62?) y Alex de Mi?aur (11?) han revelado que el instinto competitivo de Nadal sigue intacto, m¨¢s all¨¢ del marcador y la estad¨ªstica. En cuanto cogi¨® un punto de temperatura, su tenis le permiti¨® rendir con suficiencia al joven italiano y retar de t¨² a t¨² al australiano, aunque conforme se le fue agotando la gasolina, su rendimiento cay¨® de forma abrupta. Ante rivales de perfil liviano como el primero, su inteligencia y su jerarqu¨ªa pueden ser suficientes, pero la historia cambia si el de enfrente propone un ritmo de bola lineal. ¡°He jugado con lo que tengo¡±, se sincer¨®. Y los hechos dicen que el drive y el rev¨¦s son f¨¢cilmente recuperables, pero no as¨ª el servicio. Mermado del abdominal, la velocidad media de su saque (alrededor de 190 km/h) se ha reducido de forma sensible, aunque lo increment¨® de la primera (160 km/h) a la segunda aparici¨®n (170 km/h) del torneo.
El f¨ªsico, con alfileres. L¨®gicamente, los contratiempos de los ¨²ltimos tiempos y el paso por el quir¨®fano han pasado factura a un jugador que el pr¨®ximo 3 de junio cumplir¨¢ 38 a?os, y que arrastra tras de s¨ª un extenso historial de lesiones y parones forzosos. Si la incertidumbre ya era considerable, en este ¨²ltimo tramo se ha redimensionado. ¡°Pueden pasar muchas cosas¡±, indic¨® antes de la puesta en escena en Pedralbes. Admite Nadal que ¡°hoy d¨ªa, lo principal no es ganar, sino salir sano del torneo, m¨¢s que cualquier otra cosa¡±. Y el temor a que el cuerpo pueda volver a fallarle en un momento u otro sigue presente. ¡°No s¨¦ c¨®mo puede responder a seg¨²n qu¨¦ tipo de exigencias; he jugado muy poquito durante el ¨²ltimo a?o y medio, o sea que vamos a ver hasta d¨®nde puedo. Intentar¨¦ no cruzar l¨ªneas peligrosas¡±, agrega. Eso s¨ª: ¡°Salgo reforzado¡±.
Los sorteos y el ritmo. Situado en el puesto 644? del listado mundial, el espa?ol se ve obligado a un doble peaje para poder acceder a los torneos: las invitaciones o el ranking protegido. La p¨¦rdida de estatus comporta, adem¨¢s, que desde las primeras rondas deba afrontar a adversarios de peso como el propio De Mi?aur, por lo que el terreno se inclina desde el principio. A diferencia de las ¨¦pocas de bonanza, cuando dispon¨ªa de un margen relativamente amable para ir calibrando su juego y aplicando ajustes, ahora no encontrar¨¢ escapatoria. En Indian Wells, por ejemplo, su segunda confrontaci¨®n apuntaba a ser contra el dan¨¦s Holger Rune ¡ªn¨²mero siete en aquel momento¡ª. Si no logra ir m¨¢s lejos, como en el caso de Barcelona, la posibilidad de ganar ritmo competitivo se reduce la carga que pueda incorporar en los entrenamientos con jugadores de primer nivel. ¡°Si mi cuerpo va habitu¨¢ndose, podr¨¦ dar un paso adelante. Tengo que ir midiendo c¨®mo me voy encontrando. Pero siento que he dado un paso adelante¡±, se?ala.
De tres a cinco sets. A principios de a?o, a Nadal ya se le hizo largo el pulso con el australiano Jordan Thompson. Ese d¨ªa, 5 de enero, el reloj registr¨® 3h 25m, extensi¨®n que su cuerpo no fue capaz de soportar. Aunque incide en que hoy su objetivo prioritario es poder saltar a la pista, ¡°no ganar¡±, para aproximarse al prop¨®sito de despedirse siendo realmente competitivo tendr¨¢ que adquirir una continuidad que deber¨¢ ser a¨²n superior en el hipot¨¦tico caso del aterrizaje en Par¨ªs. All¨ª, los partidos pasar¨ªan al exigente formato de las cinco mangas, sin olvidar los requerimientos del contexto de la arcilla. Menos lesivo en t¨¦rminos de rodillas o apoyos, es el m¨¢s demandante desde el punto de vista de la resistencia y de la fuerza. ¡°A veces es dif¨ªcil jugar cuando sabes que no vas a poder luchar todo el partido; hoy, porque dentro de unas semanas seguramente s¨ª [¡]. Una vez que se pierde el primer set, el partido se acaba¡±, reconoci¨® tras ceder ante De Mi?aur.
Roland Garros, ?¨²ltimo destino? Durante su ¨²ltima alocuci¨®n ante los periodistas, Nadal enfatiz¨® que la meta real es Par¨ªs, donde no pudo jugar el curso pasado como consecuencia de la lesi¨®n en el psoas il¨ªaco: ¡°All¨ª, que sea lo que Dios quiera. Si hay que intentarlo [arriesgar], ah¨ª es el momento de decir: ¡®pase lo que pase, aqu¨ª s¨ª¡±. Acot¨® el deseo al grande franc¨¦s, citando de camino los Masters 1000 de Madrid y Roma; sin embargo, en ning¨²n instante mencion¨® los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs, evento que tendr¨¢ lugar a partir de finales de julio y que ahora mismo queda muy lejano para ¨¦l. ¡°Tengo que ir midiendo c¨®mo me voy encontrando. Entiendo que para la gente que no est¨¢ en mi d¨ªa a d¨ªa, es dif¨ªcil entender mi momento actual y mis ¨²ltimos meses, pero tengo que actuar en funci¨®n de c¨®mo vaya encontr¨¢ndome¡±, prioriza. No obstante, ya ha manifestado en alguna ocasi¨®n que le har¨ªa ilusi¨®n poder hacer un quinto desfile ol¨ªmpico.
Retirada: s¨ª pero no. En una entrevista concedida a EL PA?S a finales de diciembre, mientras se preparaba en la sede de su academia en Kuwait, el deportista asegur¨® que antes de que empezara el major parisino ya sabr¨ªa si iba a colgar la raqueta o no. Nadal siempre ha sido reacio a anticipar su adi¨®s porque, en el momento en el que lo piensas o lo visualizas, entiende, ¡°ya est¨¢s entrando en esa din¨¢mica¡±, ha afirmado m¨¢s de una vez. Admite que ese momento est¨¢ cada vez m¨¢s cerca y en su resignaci¨®n se percibe que acepta el devenir de los acontecimientos a rega?adientes, obligado a marcharse de un lugar, el de la competici¨®n, que todav¨ªa no desea abandonar. Sin embargo, la falta de regularidad que persegu¨ªa est¨¢ esclareciendo el horizonte y gui¨¢ndole hacia una decisi¨®n definitiva. ¡°Nunca se sabe lo que te depara el futuro, y la vida probablemente te marca tu camino. Ahora me lo est¨¢ marcando de una manera bastante clara. He jugado este torneo como si fuera mi ¨²ltima vez en el God¨®¡±, respond¨ªa el mi¨¦rcoles, mientras el aficionado compart¨ªa de manera generalizada la misma impresi¨®n.
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