Serra y Garc¨ªa Vargas responder¨¢n en el Congreso a la acusaci¨®n de espionaje
El anuncio de la comparecencia conjunta del vicepresidente del Gobierno, Narc¨ªs Serra, y el ministro de Defensa, Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas, para explicar ma?ana, ante la Comisi¨®n de Secretos Oficiales, las escuchas del Cesid al Rey y a otros personajes p¨²blicos no aplac¨® ayer la indignaci¨®n de la oposici¨®n. En una tensa reuni¨®n de la Junta de Portavoces, PNV y CiU, habituales apoyos del Gobierno, se sumaron al resto de los grupos para exigir que Serra d¨¦ la cara en este nuevo esc¨¢ndalo. El PNV incluso se aline¨® con el PP para pedir la comparecencia de Felipe Gonz¨¢lez ante el Congreso.
Con este ¨²ltimo episodio, el Gobierno probablemente escuchar¨¢ lo que nunca imagin¨®. Esta vez, el Partido Popular, por boca de su portavoz parlamentario, Rodrigo Rato, dejar¨¢ en el aire la sospecha de que el Gobierno ha utilizado algunas de estas escuchas ilegales para chantajear a los afectados.
"Hay que preguntarse si ¨¦ste es un Gobierno de obsesos por el poder y quieren controlar la m¨¢s m¨ªnima informaci¨®n o se ha convertido en chantajista", dijo Rato."La famosa frase de Felipe Gonz¨¢lez seg¨²n la cual 'quien me echa un pulso lo pierde', quiz¨¢ tiene que ver con esto", se?al¨® a EL PA?S.
Sobre las declaraciones de Rato, el secretario general de Relaciones con las Cortes, Enrique Guerrero, respondi¨®: "Es parad¨®jico y malintencionado, que se nos hagan estas imputaciones tras las andanadas que estamos sufriendo en los ¨²ltimos tiempos".
Por su parte, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar calific¨® ayer por la tarde de "situaci¨®n muy grave" la desencadenada por el esc¨¢ndalo, informa Victorino Ruiz de Az¨²a. "Ya es cuesti¨®n de pura higiene democr¨¢tica, de decencia democr¨¢tica", dijo. "La situaci¨®n pol¨ªtica ha entrado en un proceso de degradaci¨®n que nos ha llevado a esto". El presidente del PP agreg¨® que existe una alternativa, sancionada en las urnas, y pidi¨® al Gobierno y a Gonz¨¢lez "que no se siga jugando con Espa?a a la ruleta rusa". El l¨ªder de Izquierda Unida, Julio Anguita, dijo en una entrevista radiof¨®nica que el asunto de las escuchas es "una prueba m¨¢s de la descomposici¨®n del Estado".
Desde la Moncloa se constataba ayer que la presidencia europea puede ser un aut¨¦ntico calvario para Gonz¨¢lez. La convicci¨®n de que viejos cad¨¢veres saldr¨¢n de los armarios est¨¢ ya instalada en la Presidencia del Gobierno.
Pero la gravedad del caso hac¨ªa insuficiente esta argumentaci¨®n del Ejecutivo y de los partidos que lo apoyan, especialmente CiU. Prueba de esta situaci¨®n es que algunos militantes socialistas, como ?lvaro Cuesta o Enrique M¨²gica, ¨¦ste ¨²ltimo afectado por las escuchas, resaltaron la gravedad de que un organismo del Estado haya espiado a personajes p¨²blicos y que documentos del Cesid circulen p¨²blicamente.
El ministro de Defensa, Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas, ya hab¨ªa expresa-
do su preocupaci¨®n porque saliesen a la luz secretos del Cesid manejados por antiguos altos cargos de este organismo. La explicaci¨®n m¨¢s probable que ofrecer¨¢n tanto ¨¦l como Serra en la Comisi¨®n de Secretos Oficiales es que no hubo seguimiento concreto de personas. Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana justific¨® ayer las escuchas aduciendo que los servicios de inteligencia "tienen obligaciones que a veces son dif¨ªciles de comprender, pero que son imprescindibles para la seguridad del Estado".Los efectos pol¨ªticos de este nuevo esc¨¢ndalo est¨¢n a¨²n por ver. El desmarque m¨¢s serio vino ayer del PNV. I?aki Anasagasti, su portavoz, pidi¨® inmediatamente la dimisi¨®n del responsable del Cesid, Emilio Alonso Manglano. "Me siento enga?ado, porque cuando visitamos el Cesid hace dos a?os Manglano nos dijo que nunca se hab¨ªa espiado a pol¨ªticos y periodistas", dijo.
Problemas para CiU
La tormenta afecta especialmente a CiU, sometido ahora a una crisis interna tras su revolc¨®n electoral y la consiguiente puesta en cuesti¨®n del apoyo al Gobierno. Joaquim Molins, su porta voz, nad¨® ayer entre dos aguas: exigi¨® la comparecencia de Serra y a?adi¨® que si no le convenc¨ªa su explicaci¨®n exigir¨ªa la comparecencia de Felipe Gonz¨¢lez, como hab¨ªa solicitado el PP. Molins no ocult¨® que el esc¨¢ndalo es "grav¨ªsimo y preocupante" y lanz¨® un duro ataque contra Manglano, del que dijo que "est¨¢ acumulando hechos que no son un ejemplo de eficacia". El PP entr¨® a saco. Loyola de Palacio, acus¨® al Gobierno de "impedir que se d¨¦ una respuesta a la so ciedad espa?ola, que se encuentra alarmada porque comprende que vive en un estado policial". De Palacio describi¨® el esc¨¢ndalo como "uno de los hechos m¨¢s graves de la democracia" y dirigi¨® todas sus bater¨ªas contra Felipe Gonz¨¢lez, del que dijo que "nunca da la cara ni asume su responsabilidad". Un tono igualmente duro utiliz¨® la portavoz de IU, Rosa Aguilar, que calific¨® de "repugnante" el asunto.
Pero las cr¨ªticas tambi¨¦n surg¨ªan del seno del PSOE. Los diputados ?lvaro Cuesta y Manuel de la Rocha consideraron extremadamente grave lo ocurrido. ?lvaro Cuesta se pregunt¨® en la reuni¨®n matutina del grupo parlamentario socialista desde cu¨¢ndo el Cesid conoci¨® el caso Rold¨¢n. De la Rocha pidi¨® responsabilidades penales, reorganizaci¨®n a fondo de los servicios secretos al demostrarse que han actuado "al margen de la legalidad" y, finalmente, "depurar la responsabilidad pol¨ªtica que proceda".
En una l¨ªnea m¨¢s suave, el secretario de organizaci¨®n del PSOE, Cipri¨¤ Ciscar, dijo ayer en nombre del partido que desea que "con absoluta claridad y transparencia se d¨¦ a conocer cualquier hecho que se haya producido y se apliquen responsabilidades si las hubiere".
Felipe Gonz¨¢lez despach¨® ayer con el Rey, como hace todos los jueves, seg¨²n fuentes de la Casa Real. Pese a que nunca se informa del contenido de estas reuniones, es seguro que se hizo referencia a las grabaciones del Cesid, de las que el propio don Juan Carlos ha sido objeto.
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