La ONU pugna por superar su caos en la coordinaci¨®n de la ayuda

Un gigantesco y s¨²bito aluvi¨®n de deportados, s¨ª. Pero tambi¨¦n el obstruccionismo del Gobierno macedonio y el caos organizativo de la agencia especializada de la ONU (el Alto Comisionado para los Refugiados) son las causas de la "confusi¨®n" registrada en la operaci¨®n humanitaria de acogida a los kosovares huidos en los pa¨ªses vecinos. El secretario general, Kofi Annan, ha cambiado a sus delegados en la zona, lo que permite una mejor coordinaci¨®n.

Las dram¨¢ticas im¨¢genes de los deportados pueden inducir a enga?o. A diferencia de otras crisis -Ruanda o Sud¨¢n-, los refugiados "han encontrado techo" en plazo breve, "y se ha logrado evitar epidemias y muertes", destaca la comisaria europea de Ayuda Humanitaria, Emma Bonino. Pero ha habido, denuncia, m¨¢s "confusi¨®n" de la inevitable.En Macedonia, la culpa principal del caos recae sobre el Gobierno de Ljubo Georgiyevsky. Puso a los deportados contra las cuerdas de sus perseguidores serbios en Blace. Abre y cierra fronteras sincopadamente. Y acaba de decidir el traslado por fases de 60.000 kosovares -la mitad de los que acoge- a la vecina Albania. Todo por temor a que rompan el delicado equilibrio ¨¦tnico de su pa¨ªs y de su propio Gobierno.

En Albania -donde est¨¢ el grueso del problema, 400.000 refugiados, m¨¢s del 10% de la poblaci¨®n local-, las causas son distintas, pues gobernantes y ciudadanos se han volcado con sus hermanos. "Existen razones objetivas para el caos, la avalancha ha sido enorme y s¨²bita", alega Kastriot Islami, el ministro alban¨¦s que coordina el Grupo de Gesti¨®n de Emergencia, creado por su Gobierno y las grandes agencias humanitarias. "Es como si Espa?a absorbiese cuatro millones de refugiados", compara el enviado especial de Annan, Stefan di Mistura.

"Pero la respuesta internacional ha sido lenta e insuficiente", critica Islami. Las familias que acogen a la mitad de los llegados (unos 200.000) "todav¨ªa no han recibido m¨¢s ayuda que un 20% de los alimentos necesarios, y est¨¢ claro que esto no es una crisis albanesa, sino internacional", denuncia.

En Tirana es un secreto a voces pero oculto -por renuencia a criticar a Naciones Unidas o por falso temor a que deteriore la imagen de los espl¨¦ndidos esfuerzos humanitarios- que la culpable del caos organizativo es la agencia de la ONU, ACNUR, responsable internacional de coordinar las crisis, que preside la japonesa Sadako Ogata. Hasta el punto de que Kofi Annan acaba de nombrar a su m¨¢s eficaz apagafuegos, Di Mistura, como enviado en calidad de "asesor especial" de Ogata. Y tuvo que sustituir a su delegado en la zona, el tailand¨¦s Tom Meechvoet, por el franc¨¦s Jacques Mouchet.

Algo ol¨ªa a podrido en las huestes de Ogata. Si se hubiera actuado a tiempo, se habr¨ªan afrontado mejor los dramas imprevisibles. Ya el pasado junio llegaron a Albania 20.000 deportados albanokosovares. Aquel preludio se gestion¨® fatal. ACNUR tard¨® siete meses en registrarlos, algo b¨¢sico para cuantificar y organizar la cobertura de sus necesidades, coordinar a las otras agencias y ONG, y a ¨¦stas con el Gobierno, sus principales deberes.

Peor a¨²n, en vez de trabajar en complicidad con los naturales del lugar, multiplicando los esfuerzos internacionales y locales, como habitualmente, "lo trajeron todo de fuera, desde el pan hasta los tractores, en plan grandioso", describe un experto. La poblaci¨®n se irrit¨®. Tambi¨¦n el Gobierno.

Cuando a finales de marzo se produjo el gran ¨¦xodo, la inepcia y el gusto por las vacaciones de su responsable tailand¨¦s casi provocaron la desaparici¨®n de ACNUR en el pa¨ªs. El viceprimer ministro Ilir Meta pidi¨® su cabeza, coreado por los embajadores occidentales. Los europeos, a trav¨¦s de la agencia humanitaria de la Comisi¨®n, ECHO, trataron de separar persona de instituci¨®n para que no se esfumara la ¨²nica capaz de coordinar a todos. Se produjo el cambio. Ahora las cosas mejoran.

Pero persisten dos graves problemas organizativos. Uno es el registro de los 400.000 refugiados. Por fin, la pr¨®xima semana, ACNUR dispondr¨¢ de un sistema de identificaci¨®n, brindado por Microsoft, tras desechar por protagonismo corporativo encargarlo a la Agencia Internacional para las Migraciones. ?Cu¨¢nto tardar¨¢ el proceso? Di Mistura aspira a que "se inicie para final de mayo".

El registro es esencial para resolver el otro cuello de botella -el apoyo a las familias que acogen hu¨¦spedes, a veces hasta media docena, en viviendas min¨²sculas de 40 metros -, para orientar bien la ayuda y evitar que se esfume. El proyecto es darles "dinero a cambio del cobijo" que ofrecen. Algo que funcion¨® en la ordenada Croacia. Pero que amenaza con suscitar desestabilizaci¨®n, discriminaciones y corrupci¨®n en un pa¨ªs apenas recuperado de la crisis de la "econom¨ªa de la pir¨¢mide", el bandidismo y la anarqu¨ªa de 1997.