Una medievalista seducida por la Red
La ambici¨®n de Carly Fiorina consiste en crear otro Renacimiento a trav¨¦s de Internet
Para ser una medievalista, lo que ha hecho Carly Fiorina no est¨¢ nada mal. Por si eso no fuera poco, es mujer: la primera y ¨²nica en el mundo de las gigantescas corporaciones de Estados Unidos, caracter¨ªstica que no ha dejado de crearle situaciones inc¨®modas. ?Qui¨¦n se preocupa de c¨®mo viste el presidente de IBM? De su formaci¨®n en el mundo medieval, Fiorina sac¨® la lecci¨®n de que la iniciativa y el riesgo intelectual abrieron el mundo al Renacimiento. Su ambici¨®n es contribuir a un nuevo Renacimiento, que ella llama Renacimiento Digital, a partir de Internet, proyecto en el que la adquisici¨®n de Compap es una piedra angular.
Carleton (Carly) Sneed -que cambi¨® el apellido a Fiorina tras casarse con Frank, que fuera vicepresidente de la ATT- naci¨® en Tejas en 1954 en una familia acomodada y con intereses intelectuales: el padre era un abogado que accedi¨® a la judicatura y la madre, artista. La ni?a viaj¨® acompa?ando al padre por medio mundo y estuvo en colegios de Ghana, Inglaterra y Carolina del Norte antes de que la familia se estableciera en California. Llegada la hora de la universidad, la brillante Carly fue admitida en Stanford, donde estudi¨® historia medieval y filosof¨ªa en el coraz¨®n del Silicon Valley, sin aparente inter¨¦s por el fen¨®meno tecnol¨®gico que se produc¨ªa a su alrededor. HP s¨®lo le interes¨® entonces como un lugar en el que trabajar un verano como secretaria para sacar unos d¨®lares.
Licenciada en Stanford en 1976, Carly comenz¨® Derecho en UCLA, siguiendo los pasos paternos, estudios que abandon¨® para conseguir, primero, un m¨¢ster en Administraci¨®n de Empresas en Maryland y luego otro en Ciencias por el Instituto de Tecnolog¨ªa de Massachusetts, el reputado MIT, algo que ya le colocaba en la plataforma de lanzamiento hacia el mundo que ha tomado al asalto. En 1980 consigui¨® su primer trabajo serio en la ATT, donde su car¨¢cter abierto, empuje, vitalidad, capacidad de lucha y buena vista para el negocio en las ¨¢reas de venta y m¨¢rketing le auparon r¨¢pidamente en la escala ejecutiva. Cuando ATT desgaj¨® Lucent Technologies, Fiorina fue colocada al frente de la divisi¨®n encargada de la provisi¨®n de servicios en todo el mundo, desde la que salt¨® en julio de 1999 a la c¨²pula de HP, tan venerable como esclerotizada. Fiorina se convert¨ªa antes de cumplir 45 a?os en la primera mujer que alcanzaba la posici¨®n de presidente y consejera delegada de una empresa con un volumen de negocios de 50.000 millones de d¨®lares anuales.
Sus dos a?os all¨ª no han sido f¨¢ciles, a lo que ha contribuido la crisis del sector de la alta tecnolog¨ªa. La cabeza le ha llegado a oler a p¨®lvora, a pesar de que el plan para poner a HP en forma ten¨ªa un plazo de ejecuci¨®n de tres a?os. Su objetivo ahora es que HP sea recordado en el futuro como uno de los agentes que trajeron ese nuevo Renacimiento. Galileo, Copernico, Levenholt. Microsoft, IBM, HP.
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