Una divisa multiplicada por 12
Los planes nacionales de adopci¨®n del euro no son tan comunes como la nueva moneda europea
Dos euros espa?oles se convierten en dos euri en Italia, dos ¨¨vro en Grecia, dos euroa en Finlandia y dos euro en Alemania. La cantidad siempre es la misma, pero la moneda ¨²nica deja de ser un poco com¨²n en cuanto a ortograf¨ªa y gram¨¢tica se refiere. M¨¢s all¨¢ de estas peque?as diferencias, la introducci¨®n del euro tampoco ser¨¢ igual del todo para los 12 pa¨ªses que integran la zona.
Peculiaridades en la forma, nunca en el fondo. La raz¨®n de ser de la moneda ¨²nica se mantiene invariable: el valor de los euros es id¨¦ntico y se pueden utilizar en los 12 pa¨ªses que los han adoptado, independientemente de en cu¨¢l se haya fabricado, a partir de esta medianoche. Los billetes comparten dise?o. Las monedas se han reservado una cara nacional (v¨¦ase gr¨¢fico). Aun as¨ª, con las piezas que contienen el retrato de Miguel de Cervantes acu?adas en Espa?a se podr¨¢ comprar en Francia o Italia. Y al rev¨¦s.
En Alemania, Holanda y Austria el cambio de monedas viejas a euros no siempre ser¨¢ gratis
Las condiciones para que se alcance esta situaci¨®n, sin embargo, var¨ªan. Alemania, considerado el pa¨ªs con mayores reticencias a abandonar su divisa, opta por la v¨ªa r¨¢pida. El marco dejar¨¢ de ser moneda de curso legal esta misma medianoche. No habr¨¢ periodo de convivencia como en el resto de la zona euro, aunque existe el compromiso por parte de los comerciantes de aceptar marcos durante los dos primeros meses.
El flor¨ªn holand¨¦s ser¨¢ el siguiente en pasar a la historia: el 28 de enero. Le seguir¨¢n la libra irlandesa (9 de febrero) y el franco franc¨¦s (17 de febrero). El resto, incluida la peseta y la dracma griega (¨¦sta con m¨¢s de 2.600 a?os de historia), compartir¨¢n fecha: 28 de febrero. El 1 de marzo el euro se convertir¨¢ en la ¨²nica moneda v¨¢lida en 12 pa¨ªses.
En el camino pueden presentarse problemas. ?stos, en mayor o menor medida, ser¨¢n comunes: distribuir m¨¢s de 14.000 millones de billetes y 50.000 millones de monedas, tratar de evitar que se aproveche el cambio al euro para subir precios sin justificaci¨®n, escapar del enga?o, de las falsificaciones y, sobre todo, saber cu¨¢nto valen las cosas en euros.
Para cubrir imprevistos, una parte de las sucursales bancarias abrir¨¢ ma?ana, aunque sea festivo. S¨®lo las entidades de B¨¦lgica, Francia, Finlandia, Irlanda e Italia permanecer¨¢n cerradas. En cualquier caso, siempre quedar¨¢n los cajeros autom¨¢ticos. Entre el 80% y casi el 100% servir¨¢ euros desde el primer d¨ªa. En Portugal y Finlandia, sin embargo, este porcentaje apenas alcanzar¨¢ el 54% y el 25%, respectivamente, durante las primeras 24 horas. En cualquier caso, el 15 de enero estar¨¢n todos adaptados.
Los primeros en notar los cambios del euro ser¨¢n los ciudadanos que hagan turismo en los primeros d¨ªas del a?o, los empressarios que viajen por razones de trabajo o los estudiantes en el extranjero. Todos podr¨¢n extraer euros en los cajeros con su tarjeta de pago, que no har¨¢ falta cambiar por el cambio de moneda. Y, si llevan dinero en divisa nacional, podr¨¢n cambiarlo en las sucursales de los bancos centrales siempre y cuando sean billetes.
El cambio de la moneda nacional a euros ser¨¢ gratuito en la mayor¨ªa de los pa¨ªses. Pero un espa?ol que viaje a Alemania deber¨¢ de tener en cuenta que la mayor¨ªa de las entidades financieras alemanas no prestar¨¢ este servicio a sus no clientes gratis. En Holanda y Austria, el cambio, en general, comportar¨¢ una comisi¨®n. El viajero debe de tener en cuenta que en Holanda no se acu?ar¨¢n monedas de un c¨¦ntimo y en Portugal no se pondr¨¢n en circulaci¨®n billetes de 500 euros, pero, en uno y otro caso, el turista podr¨¢ visitar estos pa¨ªses sin problemas, porque estas piezas tendr¨¢n que ser aceptadas de todas formas.
Las ventajas del euro se notar¨¢n en los bolsillos. Se calcula que los europeos se ahorrar¨¢n hasta 3.300 millones de euros en comisiones por cambio de divisa cuando viajen a Espa?a, Francia, Italia, Alemania, Luxemburgo, B¨¦lgica, Portugal, Austria, Irlanda y Grecia. En la actualidad, estas comisiones suelen ser del 3% en los bancos y hasta del 5% en los hoteles. El euro las eliminar¨¢.
Y no s¨®lo en estos 12 pa¨ªses. La nueva moneda europea tambi¨¦n ser¨¢ la divisa de Andorra, M¨®naco, San Marino y el Vaticano (donde se acu?ar¨¢n monedas con la efigie de Juan Pablo II). Adem¨¢s, el euros tambi¨¦n se podr¨¢ utilizar en los pa¨ªses de los Balcanes, cuya moneda de referencia es ahora el marco alem¨¢n.
Euros en Londres
La influencia del euro llegar¨¢ a la capital del euroescepticismo. Algunos establecimientos de Londres los aceptar¨¢n, aunque el cambio se devolver¨¢ en libras esterlinas. Todo apunta que el uso de la nueva divisa tambi¨¦n ser¨¢ habitual en Suecia y Dinamarca. Estos dos pa¨ªses, miembros de la Uni¨®n Europea, han decidido seguir los pasos del Reino Unido y quedarse fuera del euro. Pero sus relaciones comerciales con Finlandia, que s¨ª que es socio, son muy estrechas.
La moneda ser¨¢ la misma. No har¨¢ falta echar mano de la calculadora para saber el coste de un producto en moneda nacional. Aun as¨ª, los precios no ser¨¢n iguales. La nueva divisa pondr¨¢ en evidencia las diferencias, que en el sector del autom¨®vil puede llegar a ser del 30%. Otro ejemplo es el del precio del suelo: el coste medio del metro cuadrado es de 1.439 euros en Madrid, de 716 euros en Lisboa, mientras que en Par¨ªs alcanza los 9.123 euros, seg¨²n datos del grupo inmobiliario CB Richard Ellis.
El vocabulario tambi¨¦n estar¨¢ sujeto a revisi¨®n. Los ling¨¹istas vigilar¨¢n c¨®mo se crea una jerga local sobre el euro, palabra que pasar¨¢ a formar parte de las charlas cotidianas. Los austriacos ya han bautizado a los billetes como kalinas, en referencia a Robert Kalina, que los dise?¨®. Pero s¨®lo el tiempo dir¨¢ cu¨¢les ser¨¢n las palabras que sustituyen a las balles francesas o las pelas espa?olas.
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