De 2,2 millones a 5: el paro se dobla en la era Zapatero
El agravamiento de la crisis se cobra 144.700 puestos de trabajo entre junio y septiembre - La tasa de paro sube al 21,5%, la m¨¢s alta desde 1996
"La peor previsi¨®n de paro que podamos tener por delante ser¨¢ siempre una previsi¨®n de paro mejor que la que mejor tuvo el PP". Ni por asomo pod¨ªa pensar Zapatero cuando pronunci¨® esta frase en abril de 2008 que el balance laboral de su presidencia iba a ser tan triste como que como el que dio a conocer la Encuentra de Poblaci¨®n Activa el viernes. M¨¢s de siete a?os despu¨¦s de su llegada a La Moncloa, el saldo final arroja 291.ooo empleos m¨¢s, hasta llegar a 18,5 millones de puestos de trabajo. Una ganancia que se debe exclusivamente al avance del empleo p¨²blico. Pero si por algo se medir¨¢ su presidencia ser¨¢ por el paro que acaba en casi cinco millones de personas (2,7 millones m¨¢s que en 2004) y por la tasa de paro, el 21,5%, la m¨¢s alta desde 1996.
El n¨²mero de asalariados p¨²blicos marca un nuevo r¨¦cord
En casi 1,5 millones de hogares espa?oles nadie tiene un empleo
La de ayer es la ¨²ltima encuesta de poblaci¨®n activa que se publica con Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero como presidente del Gobierno. En algo m¨¢s de siete a?os, el n¨²mero de empleos ha aumentado en 291.000, hasta 18,156 millones y el de parados se ha disparado de 2,22 a casi 5 millones, un balance que, previsiblemente, a¨²n empeorar¨¢ este trimestre.
Pero es algo que hay que cambiar lo m¨¢s r¨¢pido que podamos.
Espa?a no despierta de su peor pesadilla: el paro. Ya roza los cinco millones de desempleados. La crisis, cuatro a?os despu¨¦s, ha vuelto a sorprender. Y una vez m¨¢s, para muy mal. El escenario es dantesco: 4.978.300 desempleados (m¨¢s de cinco millones si se limpia el dato de los efectos estacionales), una tasa de paro del 21,5%, 1,4 millones de hogares donde nadie trabaja, 2,3 millones de parados buscando empleo m¨¢s de un a?o. Y el parte de la encuesta de poblaci¨®n activa (EPA) no desvela lo peor: la pesadilla continuar¨¢, al menos, otro medio a?o. Llega el invierno y el estacional mercado laboral espa?ol se adentra en su peor ¨¦poca.
Pocos esperaban un golpe as¨ª. La temporada tur¨ªstica estimula el empleo entre julio y septiembre. El Gobierno esperaba un mejor dato. Y ahora, a menos de un mes de las elecciones, se da de bruces contra una realidad que amenaza a Espa?a con otra recesi¨®n casi dos a?os despu¨¦s de salir de la ¨²ltima.
El ministro de Trabajo, Valeriano G¨®mez, confiaba en el verano hace unos d¨ªas cuando dijo que esperaba "un tercer trimestre relativamente bueno". Olvidaba la mala evoluci¨®n de la afiliaci¨®n a la Seguridad Social, que como recuerda Florentino Felgueroso, de la Universidad de Oviedo, anticip¨® la tragedia.
La realidad, al final, ha convertido al pasado verano en el peor tercer trimestre de la crisis. Se han destruido 146.800 empleos. La poblaci¨®n activa, el n¨²mero de personas en edad y disposici¨®n de trabajar, ha ca¨ªdo en 2.100 personas. Resultado: 144.700 parados m¨¢s en tres meses.
Y la estad¨ªstica a¨²n guarda m¨¢s le?a desagradable para la lucha por los votos. El desempleo desestacionalizado -limpio de los efectos del calendario- sube a 5.098.000 parados, seg¨²n datos difundidos por el Ministerio de Econom¨ªa. Munici¨®n electoral para Mariano Rajoy. El candidato popular se apresur¨® a culpar a la "reforma laboral del PSOE".
La de ayer es la ¨²ltima encuesta de poblaci¨®n activa que se publica con Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero como presidente del Gobierno. En algo m¨¢s de siete a?os, el n¨²mero de empleos ha aumentado en 291.000, hasta 18,156 millones y el de parados se ha disparado de 2,22 a casi 5 millones, un balance que, previsiblemente, a¨²n empeorar¨¢ este trimestre.
La previsi¨®n del Gobierno para este a?o era que se crear¨ªa empleo levemente. La EPA de ayer hizo evidente no se va a cumplir. La tormenta que arreci¨® este verano en los mercados financieros ha puesto la puntilla a estos pron¨®sticos al dejarse sentir con dureza en la econom¨ªa real. "Esto refleja el choque de confianza que hay desde julio", explica Josep Oliver, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona.
"Todos los problemas est¨¢n encima de la mesa", explica Miguel ?ngel Malo, de la Universidad de Salamanca. "Estamos ante un cuadro claro de estancamiento que se agrava con el frenazo exterior desde el verano, y a esto se a?ade el choque financiero del verano".
Lo que no ha cambiado en agosto, ni en los cuatro a?os de crisis, es el hundimiento de la construcci¨®n. El sector por donde comenz¨® el desastre sigue sin levantar cabeza. El ladrillo ha destruido directamente m¨¢s de 1,4 millones de empleos, 59.500 en el ¨²ltimo trimestre.
Entre las sorpresas negativas de la nueva EPA -el mejor term¨®metro de la situaci¨®n del mercado laboral- est¨¢ la ca¨ªda de los servicios. La l¨®gica del calendario y el mercado laboral espa?ol dicta que este sector vive de la mano del turismo su mejor temporada en verano, pero este a?o 52.000 empleos menos en tres meses. Las cosas han ido a peor este a?o. En 2010 los servicios crearon unos 240.000 puestos de trabajo entre julio y septiembre.
Para intentar explicar este vuelco, G¨®mez recurri¨® ayer al argumento que repite su departamento desde hace meses: el ajuste fiscal auton¨®mico ha llegado al mercado laboral, aunque es pronto para sacar conclusiones definitivas. Una forma de culpar al Partido Popular, que desde junio amasa un gran poder regional.
No obstante, los datos matizan mucho este argumento. Es verdad que la lucha contra el d¨¦ficit se nota algo en el empleo p¨²blico, pero este trimestre todav¨ªa ha crecido. El sector p¨²blico ha sumado 3.100 asalariados; frente a los 90.300 del mismo periodo del a?o anterior. Pero lo cierto es que en el trimestre pasado se trituraron casi 150.000 trabajos en el sector privado mientras el p¨²blico creaba trabajo hasta emplear 3,2 milones de personas, un m¨¢ximo hist¨®rico.
En el razonamiento del Gobierno est¨¢ lo que sucede en educaci¨®n y en sanidad (las dos grandes competencias auton¨®micas). "El a?o pasado en septiembre la afiliaci¨®n a la Seguridad Social subi¨® en 90.000, este en 30.000", apuntal¨® G¨®mez. Pero ni la EPA ni la Seguridad Social distinguen entre el empleo p¨²blico y el privado en estas ramas de actividad. En cambio, las cifras s¨ª detallan de modo global qui¨¦n est¨¢ a sueldo del sector p¨²blico y qui¨¦n no, sean funcionarios u otro tipo de asalariados. Y ah¨ª los datos muestran que, de momento, aunque sean a menos ritmo que en otros terceros trimestres, el sector p¨²blico sigue ganando empleados y se sit¨²a en niveles r¨¦cord.
Bucear en los datos que arroj¨® ayer el INE es descorazonador. "No hay un dato positivo al que agarrarse", sentencia Malo. No le falta raz¨®n. La destrucci¨®n de empleo se ha cebado exclusivamente con el empleo indefinido, el n¨²cleo duro del mercado laboral. Hay 160.600 asalariados menos con un trabajo fijo. En cambio, los contratados temporales han crecido en 47.600. La desconfianza ha crecido en los ¨²ltimos meses y se nota tanto en la destrucci¨®n de empleo como en los contratos que se firman. Pocos se atreven a asumir un compromiso indefinido. Las cosas se pueden torcer y todav¨ªa no se sabe si a la vuelta de la esquina hay una econom¨ªa estancada por a?os o una recesi¨®n.
Pero si hay un dato que ense?a el rostro de la tragedia que esconde esta letan¨ªa de estad¨ªsticas negativas que arroja la peor crisis en 80 a?os es el de familias en las que nadie trabaja. Hace cuatro a?os solo 400.000 hogares ten¨ªan a todos sus miembros activos en paro; ahora, 1,4 millones. Una estad¨ªstica amarga que se conoci¨® ayer, en el D¨ªa de la Estad¨ªstica. Una iron¨ªa muy triste.
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