La incertidumbre por el futuro del TLC sobrevuela el sal¨®n de Detroit
La industria del autom¨®vil teme que el nuevo acuerdo comercial le eleve los costes cuando se modera la demanda
La primera feria del a?o que celebra el sector del autom¨®vil arranca en Detroit en un momento incierto en la negociaci¨®n para modernizar el acuerdo de libre cambio entre Estados Unidos, Canad¨¢ y M¨¦xico. La industria del motor es compleja y sus operaciones en los tres pa¨ªses est¨¢n perfectamente integradas. Cualquier cambio en las reglas de juego puede afectar a su negocio cuando se modera la demanda y llevar a los consumidores al mercado de segunda mano.
El presidente Donald Trump pareci¨® mostrarse la semana pasada algo m¨¢s flexible al hablar del futuro del TLC. Sin embargo, mantiene la amenaza de la retirada si no se consiguen introducir cambios que permitan proteger el empleo en EE UU. Mary Barra, consejera delegada de General Motors, cree que al final el tratado comercial sobrevivir¨¢. La cuesti¨®n es la forma que tendr¨¢ y ah¨ª las cosas no est¨¢n claras.
La ejecutiva se reuni¨® hace un mes, junto a Sergio Marchionne, del grupo Fiat Chrysler Automobiles, y Joe Hinrichs, responsable de las operaciones de Ford Motor, con el vicepresidente de EE UU, Mike Pence, para expresarle su preocupaci¨®n por la deriva que estaba tomando la renegociaci¨®n. Temen que el resultado final acabe elevando los costes de producci¨®n y ponga sus empleos en riesgos.
Donald Trump est¨¢ presionando a las grandes compa?¨ªas industriales a producir m¨¢s en el pa¨ªs, y para conseguirlo propone introducir cambios importantes en el TLC. La Casa Blanca busca modificar as¨ª las reglas de origen recogidas en el tratado para elevar la cantidad de componentes fabricados en EE UU que deben tener los coches para as¨ª poder recibir un tratamiento libre de aranceles en la frontera.
Barra reconoci¨® durante la presentaci¨®n del nuevo pickup Silverado de Chevrolet que todav¨ªa hay mucho trabajo por hacer en la negociaci¨®n del TLC. Pero se mostr¨® esquiva al decir si la actualizaci¨®n del tratado le llevar¨¢ a cambiar su estructura de producci¨®n en M¨¦xico. Eso depender¨¢, como dicen otros ejecutivos de la compa?¨ªa, de c¨®mo queden los t¨¦rminos finales tras la negociaci¨®n.
Mayor riesgo
Los pickup como el nuevo Chevy ser¨¢n, de hecho, los grandes protagonistas de la cita anual en la capital del motor. Pero hay m¨²ltiples cuestiones a las que se enfrenta en este momento la industria que van m¨¢s all¨¢ de las nuevas tecnolog¨ªas de conducci¨®n aut¨®noma, como los cambios en la legislaci¨®n fiscal o en el consumo de combustible. La revisi¨®n del TLC le plantea un riesgo mayor.
GM insiste que seguir¨¢ usando sus plantas en M¨¦xico. Fiat Chrysler, sin embargo, acaba de anunciar que transfiere a Warren (Michigan) la producci¨®n de la nueva generaci¨®n del pickup Ram Heavy Duty, en una maniobra que le permitir¨¢ reducir riesgos en el caso de que se rompa la negociaci¨®n y las importaciones de sus veh¨ªculos se vean sujetos a un arancel del 25%, lo que elevar¨ªa su precio.
El sal¨®n de Detroit arranca oficialmente este mi¨¦rcoles, a una semana de que se celebre la sexta ronda de negociaciones del TLC en Montreal (Canad¨¢). Los tres fabricantes tratan desde hace meses de educar a la Casa Blanca sobre c¨®mo funcionan sus operaciones en los tres pa¨ªses, que est¨¢n completamente interconectadas. Prefiere trabajar de una manera constructiva para conseguir unos resultados favorables.
Libre comercio
La Alliance of Automobile Manufacturers, que representa a los fabricantes, insiste que el problema no es el libre comercio sino el hecho de que EE UU no cuente con suficientes acuerdos de libre cambio. M¨¦xico, por ejemplo, tiene tratados comerciales con casi medio centenar de socios que le permiten exportar veh¨ªculos fabricados en su pa¨ªs sin aranceles a casi la mitad del mercado global.
Tanto los fabricantes como las empresas auxiliares advierten de que los cambios que est¨¢n sobre la mesa no solo les elevar¨¢n los costes, adem¨¢s no resolver¨¢n el problema del d¨¦ficit comercial de EE UU, que es el principal argumento que usa Trump para revisar los tratados comerciales como el TLC. Todos coinciden, sin embargo, que las reglas deben actualizarse para reflejar la nueva realidad econ¨®mica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Sal¨®n Detroit
- Chrysler
- Negociaciones TLCAN
- Ferias autom¨®vil
- General Motors
- Ford Motor Company
- Tratados Libre Comercio
- Estados Unidos
- Relaciones comerciales
- Libre comercio
- Tratados internacionales
- Ferias
- Norteam¨¦rica
- Fabricantes autom¨®viles
- Relaciones econ¨®micas
- Automoci¨®n
- Comercio
- Am¨¦rica
- Empresas
- Industria
- Econom¨ªa
- Edici¨®n Am¨¦rica