Pierre Moscovici: ¡°Espa?a no es Italia, tiene un Gobierno que cumple las reglas¡±

Pierre Moscovici (Par¨ªs, 1957) recibe a EL PA?S en su despacho en v¨ªsperas de su viaje a Espa?a, donde se ver¨¢ con el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, y la ministra de Econom¨ªa, Nadia Calvi?o. En esta ocasi¨®n, llega dispuesto a ofrecer margen de maniobra presupuestario,?hasta el punto de conformarse con el ajuste estructural ofrecido por el Gobierno del 0,4% del PIB, pero tambi¨¦n urge a los partidos a aprobar unas cuentas para 2019. Moscovici expresa su ¡°confianza¡± en Espa?a, cuyas demandas, destaca, nada tienen que ver con las que le llegan desde Roma.

Pregunta. ?Teme que las dificultades del Gobierno para aprobar las cuentas lleven a unas elecciones o abran una etapa de inestabilidad en la zona euro?

Respuesta. S¨¦ que el espectro pol¨ªtico actual deja al Gobierno en minor¨ªa parlamentaria, pero espero que las fuerzas pol¨ªticas espa?olas entiendan que el inter¨¦s nacional es tener unos Presupuestos. Dec¨ªa lo mismo con el anterior Ejecutivo. No voy a discutir acerca de unas posibles elecciones. Espa?a ya ha vivido sin Presupuestos, pero es mucho mejor para el pa¨ªs que se aprueben y apoyo cualquier esfuerzo que permita conseguirlo. Despu¨¦s de a?os de crisis, dificultades y decisiones impopulares, Espa?a est¨¢ en el camino para salir este a?o del procedimiento de d¨¦ficit excesivo. Y eso es una buena noticia para los ciudadanos, para el pa¨ªs y para la zona euro porque se cierra otra herencia de la crisis. No significa que se hayan solucionado todos los problemas. Espa?a est¨¢ sufriendo todav¨ªa un elevado desempleo y lo tenemos en cuenta. Pero una vez que Espa?a est¨¦ con un d¨¦ficit p¨²blico por debajo del 3% del PIB se hallar¨¢ en una nueva situaci¨®n, con una econom¨ªa m¨¢s estable en el coraz¨®n de la zona euro. Quiero trasladar al presidente S¨¢nchez y a la ministra Calvi?o que sigan cumpliendo con los compromisos de Espa?a y que no se repitan errores del pasado.

P. ?Cu¨¢les son los retos ahora?

¡°El Gobierno debe procurar que no se repitan los errores del pasado¡±

R. Espa?a debe seguir reduciendo su d¨¦ficit, con los esfuerzos estructurales e ir rebajando la deuda p¨²blica, que supone el 97% del PIB. S¨¦ que no es f¨¢cil, pero hay ejemplos en Europa que muestran que es posible reducir el d¨¦ficit estructural y la deuda sin dejar de crear riqueza y puestos de trabajo. Para el a?o que viene, la recomendaci¨®n del Consejo de la UE es un ajuste estructrural del 0,65%. Es significativo, pero est¨¢ por debajo del 1% que se le podr¨ªa requerir. Sin embargo, la Comisi¨®n considera que Espa?a sufre la herencia de la crisis y a¨²n tiene un alto nivel de desempleo. Y ha valorado tambi¨¦n su fortaleza y el crecimiento.

P. El Gobierno ha elevado el objetivo de d¨¦ficit del 2,2% al 2,7%. ?Le han dado luz verde?

R. No hablo de luces rojas o verdes. Espa?a va a estar por debajo del 3% y va a entrar en un nuevo territorio y un nuevo tiempo en el que se seguir¨¢n valorando los esfuerzos estructurales del pa¨ªs. Las cosas van en la buena direcci¨®n. Aun as¨ª, he de decir que no se puede confiar solo en el crecimiento. Por esa raz¨®n, cuando un pa¨ªs est¨¢ por debajo del objetivo del 3% observamos sobre todo el d¨¦ficit estructural, que excluye el crecimiento, e insistimos en la calidad y el control del gasto p¨²blico. Lo que importa es que Espa?a recupera credibilidad.

P. Precisamente, el Gobierno ha elevado el techo de gasto en un 4,4%. ?Est¨¢n de acuerdo?

R. Estamos en una etapa preliminar y no voy a discutir solo sobre intenciones. Espa?a nos entregar¨¢ el borrador de las cuentas y medidas para el a?o que viene a mediados de octubre y entonces lo valoraremos.

P. El Gobierno ha dado marcha atr¨¢s en algunas reformas. ?Le preocupa, por ejemplo, el agujero de la Seguridad Social?

R. Esta no es una Comisi¨®n proausteridad. Tenemos reglas y objetivos comunes, pero los gobiernos son libres para liderar sus pol¨ªticas. Respetamos que se adopten decisiones de derechas o de izquierdas. Eso es la democracia. No somos intrusivos en las pol¨ªticas de los estados.

P. ?Creen que ese margen a Espa?a puede sentar un precedente al que se agarre Italia para incumplir sus objetivos?

Esta no es una Comisi¨®n proausteridad. Tenemos reglas y objetivos comunes, pero los gobiernos son libres para liderar sus pol¨ªticas

R. Vamos a empezar pronto las conversaciones con Italia sobre el proyecto de Presupuestos para 2019, como lo haremos con Espa?a. He le¨ªdo declaraciones en la prensa, algunas mejores que otras. Pero no voy a responder a provocaciones y seguiremos con unas discusiones que son delicadas. La Comisi¨®n no es el origen de los problemas de Italia. Si sigo llamando a que contin¨²e con la consolidaci¨®n fiscal es porque tiene una gran deuda p¨²blica, del 130%, lo cual pesa sobre la capacidad del pa¨ªs para invertir en los beneficios de los ciudadanos y en la confianza de los inversores. La consolidaci¨®n fiscal no significa austeridad, sino mejorar las pol¨ªticas de gasto, eliminar ineficiencias, mejorar infraestructuras, capacidades y la productividad, que es el problema clave en Italia. Las reglas deben ser respetadas, hay flexibilidad e Italia se ha beneficiado de ella, pero es de su inter¨¦s reducir su deuda p¨²blica.

P. Hace solo unos d¨ªas el vicepresidente Matteo Salvini dijo que ¡°tocar¨ªa suavemente¡± el objetivo de d¨¦ficit sin rebasarlo. ?Lo consideran una provocaci¨®n?

R. Otra vez, no contestar¨¦ a declaraciones, o provocaciones. Obviamente volver al 3% ser¨ªa una marcha atr¨¢s muy sustancial. Pero no es un mensaje que llegue del ministro de Finanzas y no es el esp¨ªritu que esperamos del Gobierno italiano.

Al situar el d¨¦ficit por debajo del 3%, Espa?a recupera su credibilidad¡±

P. ?Teme que se pueda producir un efecto contagio?

R. S¨¦ que la discusi¨®n con Italia ser¨¢ delicada y sensible. Tiene un gobierno populista en el que hay algunos ministros y l¨ªderes pol¨ªticos que tratar¨¢n de desafiar a la eurozona. No es el caso de Espa?a. No se puede comparar. Tal vez tendr¨¢ problemas para elaborar unos Presupuestos, pero tiene un gobierno proeuropeo, que cumple las reglas y est¨¢ reduciendo el d¨¦ficit.

P. Advirti¨® de que hab¨ªa una ¡°ventana de oportunidad¡± para profundizar la zona euro tras las elecciones francesas y alemanas. ?Se cerr¨® tras las italianas?

R. Se estrecha, pero a¨²n est¨¢ abierta. El acuerdo de Mesenberg entre Francia y Alemania fue muy bienvenido, pese a no ser tan ambicioso como personalmente me hubiera gustado. He hablado con el presidente del Eurogrupo y junto con la Comisi¨®n queremos trabajar para tener un acuerdo en diciembre. No consideramos que la posibilidad de mejorar la gobernanza y la capacidad de realizar pol¨ªticas en la eurozona se haya acabado. El proceso no est¨¢ muerto. Est¨¢ vivo. Y vamos a dedicar mucha energ¨ªa en que se concrete este a?o, puesto que el a?o que viene ya entramos en ¨¦poca electoral.

P. Pero tras la cumbre de junio, ?qu¨¦ hay sobre la mesa?

R. Todos los asuntos lo est¨¢n a¨²n: la Uni¨®n Bancaria, la sostenibilidad fiscal, gobernanza de la eurozona, el presupuesto de la eurozona.

P. Desde que accedi¨® al cargo de comisario ha sido cr¨ªtico con el Eurogrupo por la falta de transparencia o con el rescate de Grecia. ?Cree que las instituciones europeas han tenido algo que ver con ascenso de los populismos durante el periodo de crisis?

R. No creo que las instituciones europeas sean responsables, pero s¨ª creo que hay un contexto pol¨ªtico y nuevas demandas sociales. Y no se puede responder a los movimientos iliberales y antidemocr¨¢ticos sin una respuesta de los dem¨®cratas. Y por ello estoy a favor de una mayor gobernanza democr¨¢tica de la eurozona. No me arrepiento de lo que hicimos en Grecia. Creo que est¨¢bamos en el lado correcto en la historia: combatimos el Grexit. Y la gente conoce la diferencia entre un socialdem¨®crata franc¨¦s y un conservador alem¨¢n. Claro que cometimos errores, porque nos enfrentamos a una crisis que no pudimos anticipar y llegaron tiempos duros. Pero al final, en el caso de Grecia, ha sido un win-win. Hemos ganado en la eurozona y ha ganado el pa¨ªs, porque puso dejar atr¨¢s unas cuentas p¨²blicas falsas y una econom¨ªa artificial. Pero el proceso fue el correcto, porque es necesario que se den cuentas. Debemos abrir m¨¢s las puertas y las ventanas de las instituciones y dar cuentas a los ciudadanos sobre las decisiones que se adoptan.

No voy a responder a provocaciones de l¨ªderes del Gobierno italiano

P. Habla de combatir la desigualdad como una de sus prioridades, pero desde el sur de Europa precisamente se percibe que las reformas han sido el origen de esa brecha.

R. No estoy de acuerdo. Parece que hay que hay una contradicci¨®n entre ser socialdem¨®crata y estar a favor de las reformas. Pero hay muchas clases de reformas. Hay que reconciliar las reformas con el progreso. Si el mercado laboral no funciona, hay que reformarlo porque si no nadie va a entrar en ¨¦l; si las pensiones no son sostenibles, tambi¨¦n habr¨¢ que hacerlo para que el sistema no colapse. Pero una vez hechas estas reformas necesarias para la crisis, hay que concentrarse en otras reformas poscrisis, centradas en inversi¨®n, capacidades, redistribuci¨®n, educaci¨®n. Es el momento para que nos movamos hacia reformas 2.0.