Los lastres que impiden despegar a la banca

Pero aunque los problemas se acumulan ¡ªo se enquistan¡ª ser¨ªa injusto decir que la banca no ha avanzado en la ¨²ltima d¨¦cada. El problema es que no ha mejorado lo suficiente para tener el horizonte m¨¢s despejado, algo que, con algunas diferencias, tambi¨¦n sucede en otros grandes pa¨ªses europeos.

Pero el mal de otros no consuela a la industria espa?ola, en donde cunde cierto des¨¢nimo y sensaci¨®n de agotamiento; llevan diez a?os tapando agujeros mientras surgen otros nuevos. Por eso algunos creen que todav¨ªa faltan a?os hasta que se normalice la situaci¨®n. Esta percepci¨®n se incrementa cuando llegan noticias como que Amazon ha empezado a prestar dinero a los que hacen compras en su plataforma y que va a realizar otras actividades financieras sin convertirse en un banco regulado. O cuando el II Bar¨®metro de Innovaci¨®n Financiera de noviembre, de Funcas, concluye que una de cada cuatro personas ¡°tiene la intenci¨®n de buscar productos en entidades no financieras, lo que supone un aumento del 70%¡± sobre febrero de 2018. Y hay un dato m¨¢s alarmante para la banca: el 47% de los encuestados dijo que se plantear¨ªan abrir una cuenta en compa?¨ªas tecnol¨®gicas de prestigio si estas las ofrecieran. Google es la opci¨®n m¨¢s repetida, con un 15%; seguido de Amazon y Apple, con un 13% y un 11%, respectivamente (39% entre las tres).

Los avances del sector los reconoce el Banco de Espa?a en su ¨²ltimo Informe Anual, el sector ¡°ha sufrido una profunda reestructuraci¨®n desde 2008. El n¨²mero de entidades nacionales ha pasado de 122 a 65, y el n¨²mero de oficinas y empleados se ha reducido en un 40% y un 32%, respectivamente, en ese mismo per¨ªodo¡±. Ha sido uno de los mayores ajustes de red realizados en Europa. En este dif¨ªcil panorama, los ganadores han sido los supervivientes, sobre todo los grandes. ¡°Se ha producido un aumento significativo de la concentraci¨®n. Los cinco mayores grupos pasaron de representar el 49% del activo total del negocio en Espa?a, en 2008, al 70%, en 2017, veinte puntos porcentuales por encima de la media de la UE¡±, admite el supervisor.

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Otra de las tareas que tambi¨¦n ha hecho la banca ha sido reducir en m¨¢s de 116.000 millones de euros los activos problem¨¢ticos (morosos y adjudicados por impagados) entre el m¨¢ximo de 2013 y diciembre de 2017, un descenso del 58%. Esta reducci¨®n incluye la cartera de 50.781 millones que se envi¨® al banco malo, la Sareb. de los que un 80% eran pr¨¦stamos al promotor y un 20% inmuebles de mala calidad. El Estado aval¨® la deuda privada por este importe para adquirir su cartera. El 45,9% pertenece al Estado, a trav¨¦s del FROB, lo que no deja de ser un riesgo para incrementar la factura de la crisis, que el supervisor ha cifrado en 61.000 millones por el momento.

La autoridad supervisora cree que la banca ha soltado lastre porque ha aprovechado la ¡°buena¡± evoluci¨®n de la econom¨ªa y por la presi¨®n del propio Banco Central Europeo (BCE). Pero el esfuerzo no ha sido suficiente, recuerdan las autoridades. Sobre todo porque han pasado diez a?os desde el inicio de la crisis, lo que hace temer que pronto llegue otra ca¨ªda de la econom¨ªa. Recuerdan que Espa?a ha encadenado 20 trimestres de crecimientos ininterrumpidos, lo que supone contar con un escenario adecuado para enderezar el negocio.

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Por eso los supervisores han encendido las alarmas, conscientes de que los problemas de las entidades financieras repercuten en toda la econom¨ªa, como se ha visto estos a?os. En el ¨²ltimo discurso del gobernador del Banco de Espa?a, en el Congreso, Pablo Hern¨¢ndez de Cos, afirm¨®: ¡°Las entidades de cr¨¦dito contin¨²an enfrent¨¢ndose a una serie de retos, que podr¨ªan tener implicaciones macroecon¨®micas. En una econom¨ªa muy bancarizada, como la espa?ola, la superaci¨®n de estos retos es clave para que la banca contribuya al crecimiento econ¨®mico y la creaci¨®n de empleo¡±. Fernando de la Mora, responsable de la consultora internacional ?lvarez & Marsal, resume la situaci¨®n del sector: ¡°La banca tiene enfadados a los accionistas por la mala evoluci¨®n burs¨¢til, a los clientes por los ¨²ltimos esc¨¢ndalos y est¨¢ bajo la presi¨®n de los supervisores por la falta de rentabilidad¡±.

La ra¨ªz del problema

Los expertos creen que la baja rentabilidad es el problema de origen y el que aglutina todos los males, ya que sin ella no se incrementa el capital, ni se puede hacer crecer el negocio y se pierde el atractivo en Bolsa. De la Mora se?ala que ser¨¢ dif¨ªcil corregir esta situaci¨®n hasta que no lleguen las fusiones. ¡°El volumen de negocio ha ca¨ªdo y seguir¨¢ en esa l¨ªnea, la competencia se mantendr¨¢ fuerte, las inversiones en tecnolog¨ªa seguir¨¢n al alza para adaptarse a la digitalizaci¨®n¡­ Creo que solo sobrevivir¨¢n los grandes bancos muy potentes o los de nicho, estilo Bankinter, especializado en el segmento de renta media-alta¡±.

Los que est¨¢n en el medio, conocidos en el sector como los seis enanitos (Kutxabank, Unicaja, Liberbank, Cajamar, Ibercaja y Abanca) ¡ªantes eran siete pero BMN fue absorbida por Bankia¡ª tienen un futuro complicado, seg¨²n De la Mora. Esta teor¨ªa sobre el dif¨ªcil futuro de los medianos que proceden de antiguas cajas se escucha en el sector desde 2014. Incluso el entonces ministro de Econom¨ªa, Luis de Guindos, propici¨®, sin ¨¦xito, una fusi¨®n de la mayor parte de este grupo de entidades. Los responsables de las seis entidades aseguran que encontrar¨¢n el camino a la rentabilidad, aunque piden tiempo y se resisten a malvender sus bancos. Pero se est¨¢ acabando la paciencia de los supervisores. En Ibercaja, que prepara su salida a Bolsa en 2019 o 2020 para cumplir con la normativa europea, dicen tener futuro: ¡°Hemos dise?ado un modelo de entidad para recuperar la rentabilidad. Fusionarnos no es una opci¨®n¡±.

¡°Es kafkiano pedir a los supervivientes, que son los mejores, que paguen el dinero de las cajas¡±

De momento, los resultados les apoyan. Cinco bancos cotizados -Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia y Bankinter- han elevado sus resultados hasta septiembre. Entre los del Ibex la ¨²nica excepci¨®n ha sido el Sabadell, al que le ha pasado factura los problemas de su filial brit¨¢nica TSB. Todas las entidades medianas incrementan los resultados y Liberbank abandona las p¨¦rdidas de hace un a?o.

Pero los bajos tipos lastran las cuentas. Desde la consultora Neovantas, su presidente, Jos¨¦ Luis Cortina, a?ade que una subida de tipos ¡°resolver¨ªa el problema de la rentabilidad, pero no va a llegar hasta finales de 2019. A corto plazo, las cotizaciones de los bancos seguir¨¢n sufriendo y solo despuntar¨¢ la de alguno cuando se vea que su modelo de negocio funciona¡±. En su opini¨®n, se van a dibujar tres modelos bancarios: ¡°Los que sean una plataforma de servicios y productos; los tecnol¨®gicos (hacia donde camina el BBVA), y los especialistas, por ejemplo, en banca privada. La banca ya est¨¢ cambiando, pero de forma asim¨¦trica¡±, concluye Cortina.

Un alto ejecutivo de uno de los grandes bancos, que pide el anonimato, cree que ¡°la ¨²nica manera de elevar la rentabilidad es cobrar m¨¢s por los cr¨¦ditos para subir los m¨¢rgenes del negocio, pero tras el ¨²ltimo decreto del Gobierno sobre las hipotecas, no parece una misi¨®n f¨¢cil. Tambi¨¦n se pueden elevar las comisiones, pero es algo muy impopular. En el otro lado de la cuenta se puede trabajar en el recorte de gastos, pero en Espa?a ya se han cerrado muchas oficinas y, por desgracia, se ha despedido a miles de empleados¡­ dif¨ªcil seguir por aqu¨ª salvo que lleguen las fusiones¡±, apunta.

??igo Vega, analista bancario de Nau-Securities, concreta el problema: ¡°La baja rentabilidad de la banca viene dada por tres factores, principalmente: bajos tipos, que anulan el margen obtenido en los dep¨®sitos, las mayores exigencias de capital que provocan que el denominador en el c¨¢lculo de la rentabilidad haya subido y el poco crecimiento del negocio en un entorno donde el sector privado reduce el cr¨¦dito¡±.

Y el supervisor lo tiene claro. La subgobernadora Margarita Delgado dijo en su primer discurso de octubre pasado: ¡°Los modelos de negocio adecuados son los que generan rentabilidad recurrente sostenida en el tiempo para la generaci¨®n org¨¢nica de capital¡±. ?C¨®mo? Adem¨¢s de seguir recortando gastos, ¡°desarrollando una adecuada pol¨ªtica de fijaci¨®n de precios, coherente y exhaustiva, que garantice que el precio que se cobra por un producto o servicio se corresponda con su coste total, incluida la prima de riesgo¡±. Incluso reclam¨® ¡°un detallado conocimiento de cu¨¢les son las actividades que generan beneficios recurrentes, y cu¨¢les son las que generan beneficios ocasionales o incluso p¨¦rdidas¡±, para abandonarlas lo antes posible.

Estas palabras han cobrado actualidad con la pol¨¦mica de la adjudicaci¨®n de los gastos hipotecarios a los bancos y la posici¨®n del Gobierno exigiendo que no suban los precios de los cr¨¦ditos. La reflexi¨®n de algunos banqueros es que el camino es simplificar la oferta de las hipotecas en el tipo de inter¨¦s para evitar la pol¨¦mica sobre los productos vinculados. A partir de ah¨ª, dicen, llegar¨¢ la competencia, mientras asumen que han recibido un nuevo golpe en su reputaci¨®n, aunque culpan a la mala gesti¨®n del Supremo y a la demagogia de los pol¨ªticos.

Por una raz¨®n o por otra, el problema de la reputaci¨®n se ha recolocado entre los principales del sector, que no parece capaz de aunar voluntades, entre las dos patronales, AEB (bancos) y CECA (bancos procedentes de cajas), para iniciar un pol¨ªtica de comunicaci¨®n conjunta ante la sociedad que contrarreste las malas opiniones. Al menos, por el momento.

Pero no ocultan la gravedad del problema. El ¨²ltimo en abordarlo ha sido el presidente de Bankia, Jos¨¦ Ignacio Goirigolzarri, que defendi¨® hace d¨ªas que ¡°es necesario preocuparse y ocuparse por la reputaci¨®n del sector porque es clave para el futuro de la sociedad¡±. Y subray¨® que hay que ¡°escuchar lo que la sociedad nos est¨¢ reclamando¡± porque ¡°es evidente que est¨¢ muy decepcionada con el funcionamiento del sistema financiero durante la crisis¡±, pero advirti¨® de que ¡°mantener una permanente sospecha sobre el sistema financiero hace que, a todos los niveles, se puedan tomar decisiones que, aunque en el corto plazo cosechen aplausos, al final son malas para el conjunto de la sociedad¡±. Velado aviso al Gobierno sobre el riesgo de endurecer tanto la norma hipotecaria que al final se encarezca y se frene el acceso a la vivienda a una parte de la poblaci¨®n.

??igo Vega comenta lo dif¨ªcil que es que la banca tenga buena imagen, algo que solo ocurre en los momentos boyantes. ¡°?Qui¨¦n se quejaba de las entidades entre 2000 y 2007? Lo m¨¢s inquietante es que en Espa?a una parte de la sociedad y el Gobierno reclaman a los bancos supervivientes, que son los mejores, que devuelven el dinero con el que se rescat¨® principalmente a las cajas. Es kafkiano¡±.

Joaqu¨ªn Maudos, catedr¨¢tico de la Universidad de Valencia, cree que ¡°no se debe minusvalorar el riesgo reputacional que obliga a las entidades a destinar recursos para mejorar su imagen. No creo que tenga un impacto en el negocio, pero s¨ª en las nuevas normas, que se est¨¢n endureciendo y suponen un coste para los bancos¡±. Pablo Fern¨¢ndez, profesor del IESE, se?ala que los bancos deber¨ªan mostrar que son necesarios para la sociedad y considera que ha habido sentencias sobre cl¨¢usulas suelo o swaps (derivados) ¡°que han demostrado la ignorancia total de los magistrados que las han firmado¡±. Tambi¨¦n reclama sustituir a los economistas y abogados del BCE ¡°por personas que sepan algo del negocio y de finanzas¡±.

Digitalizaci¨®n

Algunos de los expertos consultados coinciden en que una profundizaci¨®n de la banca digital ayudar¨ªa a mejorar la reputaci¨®n. Seg¨²n Fernando de la Mora, la digitalizaci¨®n mejorar¨¢ la relaci¨®n con los clientes por ser un canal m¨¢s transparente y eficiente, aunque tambi¨¦n supondr¨¢ un fuerte aumento de los gastos, con una rentabilidad a largo plazo. Es el precio para evitar que las firmas tecnol¨®gicas financieras, las fintech, se lleven a los mejores clientes. Carlos Torres, consejero delegado y futuro presidente del BBVA, cree que ¡°el cliente ganar¨¢ la batalla entre las fintech y la banca en una era en la que las fronteras geogr¨¢ficas importan cada vez menos y los datos se han convertido en un factor cr¨ªtico para el crecimiento de las empresas¡±. El cliente, insisti¨® Torres, ¡°acudir¨¢ a quien le ofrezca la mejor experiencia y en quien pueda confiar¡±.

Los expertos creen que la baja rentabilidad es el origen de todos los males de la industria

En esta batalla, ya hay alumnos aventajados. Seg¨²n la firma Arcano, la fintech Ant Financial, lanzada en 2016, ¡°es el mayor sistema de pagos m¨®viles y online del mundo, y la m¨¢s valorada¡±; tiene casi 200 millones de clientes frente a los casi 50 millones de Citi, creado en 1812. Este banco tiene un valor de unos 185.000 millones de d¨®lares frente a los casi 150.000 millones de Ant.

Desde el primer banco, el Santander, su presidenta, Ana Bot¨ªn, ha sido tajante al poner voz a la una de las mayores quejas del sector sobre sus competidores tecnol¨®gicos: ¡°No est¨¢n pagando su parte justa de los impuestos¡±. La otra reclamaci¨®n es regulatoria: si hacen el mismo negocio, que tengan las mismas normas. Jaime Caruana, que ha sido estado en los dos sitios, ha sido supervisor como gobernador del Banco de Espa?a y como presidente de los bancos centrales (BIS) y ahora es consejero del BBVA, apunt¨®: ¡°Si un banco crea una fintech dentro de su estructura, tendr¨¢ m¨¢s regulaci¨®n que otra igual que est¨¦ fuera con la que va a competir¡±, afirm¨®.

Bel¨¦n Romana, expresidente de la Sareb y consejera del Santander, le puso n¨²meros al problema en la presentaci¨®n de un informe de everis: ¡°En un a?o, un cliente va 10 veces a la sucursal, utiliza 300 veces la banca m¨®vil y 3.000 veces los ecosistemas digitales, como Amazon, Google o Facebook. La clave ser¨¢ atraer a ese cliente desde esos ecosistemas a la banca digital¡±.

Algunos banqueros consultados sostienen que varios informes de las grandes tecnol¨®gicas de EE UU apuntan que, tras una primera oleada de exigencia de la digitalizaci¨®n en la relaci¨®n con el cliente, llega un sosiego. ¡°No todos los j¨®venes quieren todo por Internet; tambi¨¦n valoran la oficina¡±, dicen. No obstante, admiten que el problema de los bancos cl¨¢sicos es transformarse ¡°mientras mantenemos las viejas estructuras¡±.

Mientras tanto, el gobernador enfri¨® la corriente que dice que Espa?a es una sociedad muy digitalizada. Seg¨²n un informe de Eurostat, que present¨® en el Congreso, de 33 pa¨ªses analizados, Espa?a era el n¨²mero 19 en un ranking de porcentaje de la poblaci¨®n ¨Cde 16 a 72 a?os- que us¨® Internet en 2017 para realizar al menos una actividad financiera.

La conclusi¨®n es que no hay conclusi¨®n. Como se?al¨® la subgobernadora, ¡°la banca se est¨¢ preparando para el futuro, aunque nadie sabe con certeza c¨®mo ser¨¢¡±.