La nueva jubilaci¨®n parcial de la industria costar¨¢ 1.778 millones a la Seguridad Social

Hasta 2011 era habitual que las empresas utilizasen el contrato de relevo para renovar y rejuvenecer sus plantillas. La idea consist¨ªa en que un trabajador joven se incorporaba de la mano del operario que ya acumulaba mucho tiempo y experiencia en la compa?¨ªa. As¨ª, el nuevo iba aprendiendo el oficio, mientras que el antiguo pod¨ªa ir reduciendo su jornada, jubil¨¢ndose de manera parcial. Este ¨²ltimo cobraba una parte del salario seg¨²n las horas trabajadas, y la otra proced¨ªa de la pensi¨®n en proporci¨®n a la reducci¨®n de su jornada laboral. La mayor¨ªa sol¨ªa llevarse un 25% del sueldo y un 75% de la pensi¨®n.

Adem¨¢s, una sentencia del Supremo hizo posible que los trabajadores concentrasen en un solo a?o o periodo todas las horas que ten¨ªan que trabajar. De manera que muchos alargaban su vida laboral solo unos meses o un a?o m¨¢s, en funci¨®n de la reducci¨®n de jornada que tuviesen, y se retiraban por completo mucho antes de la edad oficial de jubilaci¨®n. Lo que eliminaba el proceso de formaci¨®n, que es el objetivo inicial del relevista. En la industria era habitual usar estos empleados ya jubilados solo para picos de producci¨®n o en vacaciones.

Una vez retirados, la prestaci¨®n de estos pensionistas no sufre la reducci¨®n de entre el 6% y el 7,5% por a?o de jubilaci¨®n anticipada que s¨ª padecen aquellos que se acogen en las condiciones de jubilaci¨®n anticipada ahora vigentes.

Esta f¨®rmula, que b¨¢sicamente reparte el puesto de trabajo entre dos, ten¨ªa gran respaldo tanto de las empresas como de los sindicatos. Sin embargo, las reformas de 2011 y 2013 endurecieron la jubilaci¨®n parcial. Hasta tal punto que a las empresas no les compensaba usar esta figura tal y como quedaba en la legislaci¨®n. Por ese motivo, se concedi¨® a las compa?¨ªas una pr¨®rroga de las condiciones anteriores a 2011 para que siguiesen aplicando jubilaciones parciales con contratos de relevo hasta el 1 de enero de 2019.

Solo que ahora la inminente finalizaci¨®n de esta pr¨®rroga ha provocado que sobre todo el sector del autom¨®vil presione para que se recuperen de nuevo las antiguas condiciones previas a 2011. Y el Ministerio de Industria ha accedido. Si bien las ha restringido para que solo se aplique a las manufacturas y siempre que se trate de operarios de la cadena de montaje. Sin embargo, incluso restringi¨¦ndolo, la medida tendr¨¢ un coste sustancial para la Seguridad Social. Seg¨²n la memoria econ¨®mica del real decreto ley aprobado el viernes de la semana pasada, volver a las condiciones de 2011 costar¨¢ 1.778 millones para la Seguridad Social. En el Fondo de Reserva, la llamada hucha de las pensiones, solo quedan unos 4.000 millones despu¨¦s de que Gobierno sacase unos 4.000 millones para sufragar la extra de diciembre.

La propia memoria econ¨®mica establece que el coste de volver a 2011 en la jubilaci¨®n parcial acarrear¨ªa una factura adicional para el sistema de pensiones por valor de 3.251 millones. Sin embargo, el Gobierno ha introducido algunas restricciones que, seg¨²n sus c¨¢lculos, har¨¢n que el coste se reduzca casi a la mitad. El primero y m¨¢s importante es que el contrato de relevo solo se podr¨¢ utilizar cuando el trabajador que lo solicite sea de la industria manufacturera y sus tareas requieran esfuerzo f¨ªsico o alto grado de atenci¨®n. Tambi¨¦n se exige que la compa?¨ªa cuente con un 70% de empleados indefinidos en su plantilla.

El trabajador que se beneficie de la jubilaci¨®n parcial tendr¨¢ que haber trabajado en la empresa al menos durante seis a?os antes. Y deber¨¢ acreditar un periodo de cotizaci¨®n de 33 a?os. Por ¨²ltimo, el salario del relevista no podr¨¢ quedar un 65% por debajo de la pensi¨®n del jubilado.

Con todas estas condiciones ¡ªla limitaci¨®n a los operarios de industria, la antig¨¹edad y el porcentaje de empleo indefinido previsto¡ª, el Gobierno espera que se reduzca el coste desde esos 3.251 millones hasta los 1.778 millones finalmente recogidos.

¡°Se hace notar que este c¨¢lculo no contempla el coste que se podr¨ªa producir en prestaciones de desempleo, si finalmente parte del colectivo pasa a dicha situaci¨®n, ni el incremento en la recaudaci¨®n fiscal derivada de las contrataciones de los relevistas y los efectos inducidos de estas en la econom¨ªa (incremento de consumo, mejora en la capacitaci¨®n del capital humano, etc¨¦tera)¡±, dice el texto de la memoria econ¨®mica.