¡°En Am¨¦rica Latina el debate de pol¨ªticas p¨²blicas sigue girando en torno a temas de los a?os ochenta¡±

El nombre de Alejandro Werner, jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI) para las Am¨¦ricas suena con fuerza cada vez que queda vacante un cargo de alto nivel en M¨¦xico. La ¨²ltima vez fue hace poco m¨¢s de un a?o, con la marcha de Agust¨ªn Carstens del banco central, cuando muchos situaron su nombre entre los favoritos. Las quinielas, no obstante, nacieron truncadas desde el principio: la ley impide que alguien no nacido en M¨¦xico, por mucho que tenga pasaporte nacional, sea gobernador del instituto emisor. Werner, uno de los economistas m¨¢s respetados del pa¨ªs norteamericano, responde a EL PA?S en la redacci¨®n del diario en Ciudad de M¨¦xico d¨ªas despu¨¦s de presentar el nuevo cuadro de previsiones para Am¨¦rica Latina.

Pregunta. La regi¨®n crecer¨¢ en 2019 menos de lo previsto. ?Por qu¨¦?

Respuesta. No hay un factor exclusivo que explique la revisi¨®n a la baja. Quiz¨¢ fuimos optimistas esperando una aceleraci¨®n, pero lo importante es que la recuperaci¨®n de Brasil contin¨²a tras la crisis de 2015 y 2016, con una buena recepci¨®n de la agenda econ¨®mica de [Jair] Bolsonaro. Y que Argentina volver¨¢ a crecer a partir de marzo. El panorama es favorable para la mayor¨ªa de pa¨ªses, pero los riesgos a la baja del crecimiento mundial son importantes y China, un pa¨ªs clave para Latinoam¨¦rica, ha sufrido una desaceleraci¨®n muy fuerte. Ah¨ª puede haber un riesgo.

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P. El FMI ha vuelto a pecar de optimista.

R. El inicio de 2018 fue muy bueno, pero la sincronizaci¨®n del crecimiento mundial se fue rompiendo con fen¨®menos que no esper¨¢bamos: la desaceleraci¨®n china, los temas pol¨ªticos en Europa o las tensiones comerciales. Cuando las econom¨ªas crecen, se piensa que la velocidad de esa recuperaci¨®n va a continuar igual hacia el futuro. Como nuestros pron¨®sticos se hacen con modelos que toman dos d¨¦cadas de datos econ¨®micos, asumen impl¨ªcitamente, por ejemplo, que las tensiones comerciales se van a disipar.

P. ?Espera que se despejen los nubarrones comerciales en los pr¨®ximos meses?

R. Tanto por parte de Estados Unidos como de China hay inter¨¦s por que este proceso no tenga un impacto grande. A nadie le conviene y menos a¨²n a EE UU, que entrar¨¢ pronto en un periodo electoral. Habr¨¢ momentos de tensi¨®n, pero, como en la negociaci¨®n del Tratado de Libre Comercio de Am¨¦rica del Norte (antes TLC, hoy T-MEC), creemos que se acabar¨¢ llegando a un equilibrio.

P. ?De qu¨¦ manera afecta a Am¨¦rica Latina el nerviosismo en torno a la relaci¨®n comercial entre Washington y Pek¨ªn?

R. Por un lado es favorable: en la medida en que las tensiones en el sector agropecuario se intensifiquen, la regi¨®n ¡ªy, sobre todo, Sudam¨¦rica¡ª podr¨¢ vender m¨¢s tanto a EE UU como a China. Y lo mismo en manufacturas, con M¨¦xico y Brasil como principales beneficiados. Pero estos efectos son relativamente peque?os y si la econom¨ªa global se ve perjudicada, eso m¨¢s que contrarresta la parte positiva. Am¨¦rica Latina es menos fr¨¢gil que otras regiones, como el Sudeste Asi¨¢tico, pero su vulnerabilidad tambi¨¦n es importante. Ning¨²n funcionario regional quiere que se intensifiquen las tensiones comerciales entre EE UU y China.

P. Am¨¦rica Latina sigue creciendo menos que el resto de pa¨ªses emergentes. ?Por qu¨¦?

R. Tiene dos grandes problemas: inversi¨®n baja y productividad baja. Detr¨¢s de ellos hay una ensalada de factores que va desde la incertidumbre jur¨ªdica, la inseguridad o las estructuras que desincentivan el crecimiento de las empresas hasta la educaci¨®n. La cobertura educativa ha aumentado mucho, pero en calidad sigue muy lejos del Sudeste Asi¨¢tico o de Europa del Este. Y para lo que viene en los pr¨®ximos 20 a?os ¡ªautomatizaci¨®n, inteligencia artificial...¡ª se va a requerir una fuerza laboral m¨¢s preparada y m¨¢s ¨¢gil. Estamos muy rezagados.

P. ?Ha evolucionado el debate de pol¨ªticas p¨²blicas en Latinoam¨¦rica?

R. Apenas. Sigue girando en torno a temas de los ochenta: reformas de pensiones, educativas¡­ En parte porque, desgraciadamente, son problemas sin resolver. Pero los pa¨ªses emergentes de vanguardia est¨¢n hablando de c¨®mo estimular la adopci¨®n de tecnolog¨ªa, c¨®mo adaptar la regulaci¨®n laboral y fiscal a las nuevas modalidades de trabajo o c¨®mo vincular universidad y empresa. Son temas que tienen que estar en la agenda; si no, Am¨¦rica Latina va a estar en total desventaja.

P. No cita la desigualdad como uno de los factores que frena el crecimiento. ?Por qu¨¦?

R. Es un tema importante. Una mejor distribuci¨®n del ingreso lleva a tener una fuerza laboral mejor educada, a que las pol¨ªticas p¨²blicas sean sostenibles y aceptables para la sociedad, a tener mercados internos m¨¢s potentes. Am¨¦rica Latina no est¨¢ en la situaci¨®n en la que, seg¨²n algunas teor¨ªas, los pa¨ªses tienen que tolerar un empeoramiento de la desigualdad en ciertos periodos de crecimiento. Es un tema que, por s¨ª mismo, tiene que incorporarse como uno de los objetivos prioritarios de la pol¨ªtica p¨²blica. Perseguir simult¨¢neamente el objetivo de crecimiento y el de disminuci¨®n de la desigualdad no es contradictorio: al contrario, ambos se retroalimentan.

P. ?Echa en falta una mirada m¨¢s social por parte de las ¨¦lites econ¨®micas latinoamericanas, sobre todo en el aspecto fiscal?

R. Tiene que haber un consenso en torno a la idea de que el Estado ha de tener una mayor cobertura y que es necesario reacomodar el sistema tributario hacia un esquema m¨¢s justo, sobre todo en los pa¨ªses con cargas impositivas bajas. Pero no todo debe ir por el lado fiscal: tambi¨¦n hay que solucionar el problema de poder de mercado y la ausencia de competencia. Los oligopolios inhiben la innovaci¨®n y la inversi¨®n y son una carga para toda la sociedad, que tiene que pagar precios muy altos.

P. ?Qu¨¦ opini¨®n le merece el rumbo econ¨®mico del nuevo Gobierno mexicano?

R. Hemos visto una aplicaci¨®n de pol¨ªtica econ¨®mica muy en l¨ªnea con a?os anteriores, pero el retraso o el freno en reformas estructurales que nosotros [el FMI] consideramos apropiadas y que abr¨ªan la puerta a la inversi¨®n genera preocupaci¨®n. Por el lado macroecon¨®mico han mandado una se?al de?buen manejo fiscal y monetario?que tranquiliza a los mercados. El foco est¨¢ ahora en la pol¨ªtica energ¨¦tica, educativa y de infraestructura. Va a ser importante que el Gobierno comunique sus pol¨ªticas de manera apropiada.

P. ?Qu¨¦ le espera a Argentina en 2019 tras volver a caer en recesi¨®n?

R. Su estrategia gradualista para corregir los equilibrios macroecon¨®micos necesitaba un nivel de financiamiento muy elevado y, al empezar a endurecerse las condiciones en los mercados internacionales, en la primera mitad de 2018, Argentina sufri¨®. Ahora tiene que acelerar el paso en lo fiscal y en lo monetario. Vamos a empezar a ver crecimiento a partir del segundo trimestre y un descenso de la inflaci¨®n, pero es un camino largo y dif¨ªcil.

P. ?Se ve la luz al final del t¨²nel venezolano?

R. El d¨ªa en que en Venezuela haya un Gobierno que se enfoque en corregir una de las debacles econ¨®micas mundiales m¨¢s tr¨¢gicas en los ¨²ltimos 50 a?os, claramente habr¨¢ luz al final del t¨²nel. Lo que hemos visto es un descontrol total en el dise?o de las pol¨ªticas p¨²blicas y un foco ¨²nicamente en llegar al pr¨®ximo mes con las divisas suficientes para comprar productos de consumo b¨¢sico. La econom¨ªa se ha contra¨ªdo m¨¢s de un 50% sin [que se haya producido] una guerra o un desastre natural. Es una crisis humanitaria antes que econ¨®mica y, aunque es complejo, tiene soluci¨®n si el pr¨®ximo Gobierno deja que la ayuda humanitaria fluya y hace cambios que permitan reestructurar la econom¨ªa. Es un reto muy grande, pero, como hemos visto en otros pa¨ªses, es factible.