La bici de Deliveroo se topa con baches
El grupo de reparto de comida eleva sus p¨¦rdidas, sufre una fuga de directivos y se enfrenta a la presi¨®n judicial por las condiciones laborales de sus repartidores
Deliveroo es una historia de ¨¦xito, hasta ahora. Inici¨® su andadura en 2013 cuando su fundador y consejero delegado, Will Shu (Conneticut, EE UU, 1978), se cans¨® de los platos precocinados del supermercado. Shu, que trabajaba en la city londinense como banquero de inversi¨®n en Morgan Stanley, pens¨® que no pod¨ªa ser tan dif¨ªcil crear un sistema para pedir la comida que quisiera, cuando quisiera. Y que llegase a casa o a la oficina. La idea original, que puso en marcha junto a Greg Orlowski, un amigo de la infancia, ha pasado de ser la respuesta de un tibur¨®n de las finanzas hambriento a una empresa valorada en m¨¢s de 2.000 millones de d¨®lares (unos 1.740 millones de euros), seg¨²n las ¨²ltimas rondas de financiaci¨®n que ha cerrado. Tras un crecimiento exponencial, Deliveroo se enfrenta ahora a una serie de retos que deber¨¢ superar para que uno de los unicornios m¨¢s prometedores del universo start-up se convierta en un proyecto empresarial s¨®lido.
Una de las inc¨®gnitas a despejar es la de la rentabilidad. En 2017 la compa?¨ªa dobl¨® su facturaci¨®n hasta situarla en 277 millones de libras. Sin embargo, las p¨¦rdidas operativas aumentaron un 43% hasta totalizar 184 millones de libras. Shu atribuy¨® los n¨²meros rojos al esfuezo inversor (m¨¢s de 100 millones) para entrar en nuevos mercados. La buena noticia para una empresa que por ahora solo quema caja es que, de momento, cuenta con el respaldo financiero de algunas de las principales gestoras de fondos de inversi¨®n del mundo como Fidelity y T Rowe Price.
Hasta que llegue la ansiada rentabilidad, Deliveroo sigue pisando el acelerador de su expansi¨®n. Ya est¨¢ presente en 13 pa¨ªses ¡ªse le resiste EE UU¡ª y busca fortalecer su estructura de capital para no perder comba en un negocio en el que la competencia es descarnada. Seg¨²n la empresa de an¨¢lisis de datos y mercado m¨®vil App Annie, las personas que han pedido comida y bebida a trav¨¦s de una aplicaci¨®n ha aumentado un 130% en todo el mundo desde 2016. ¡°La entrega de comida a domicilio es algo con lo que la gente se siente cada vez m¨¢s c¨®moda. Existe una oferta cultural global para comprar por tel¨¦fono y estos servicios son una extensi¨®n de eso¡±, dice la analista de App Annie, Lexi Sydow.
Otro obst¨¢culo a solventar por Deliveroo es interno. En los ¨²ltimas semanas se ha producido una cascada de dimisiones entre los principales ejecutivos de la cadena, seg¨²n el portal Business Insider. El primero en abandonar el barco fue el director de operaciones, Roy Blanga, al que han seguido los responsables de tecnolog¨ªa, recursos humanos y del ¨¢rea legal.
50.000 repartidores
Deliveroo cuenta con unos 50.000 restaurantes adheridos y con una flota de 50.000 repartidores en todo el mundo. Sus premisas son el precio, la selecci¨®n y el servicio; tres objetivos para ¡°tener la m¨¢s amplia selecci¨®n de restaurantes al mejor precio posible con el mejor servicio posible¡±, como explica un portavoz de la compa?¨ªa. A pesar de esta b¨²squeda de la excelencia, lo cierto es que la pol¨¦mica laboral persigue a la compa?¨ªa por su relaci¨®n contractural con sus repartidores o riders.
En el a?o 2015 salt¨® la pol¨¦mica sobre la nueva econom¨ªa colaborativa y el conflicto laboral de repartidores de este sector, un debate que tambi¨¦n ha salpicado a las actividades de la compa?¨ªa en Espa?a. En noviembre pasado, un juzgado de lo social de Valencia sentenci¨® que un repartidor de Deliveroo era en realidad un falso aut¨®nomo. Adem¨¢s, en julio de 2018 la Inspecci¨®n de Trabajo oblig¨® a la compa?¨ªa a dar de alta a cientos de riders en Barcelona y pagar 1,31 millones de euros por contratos de cerca de un a?o y medio. Y el pr¨®ximo mes de mayo se celebrar¨¢ el primer juicio colectivo de trabajadores de la compa?¨ªa tras una demanda de oficio presentada por la Inspecci¨®n de Trabajo despu¨¦s de que investigara el modus operandi de la empresa de reparto.
La start-up insiste que los repartidores son libres de realizar los pedidos donde quieran y cuando quieran. El problema est¨¢ en la ley, apunta. ¡°La legislaci¨®n laboral actual est¨¢ obsoleta para estas plataformas y debe actualizarse para reflejar la nueva forma de trabajar¡±, explica un portavoz de Deliveroo. Y a?ade: ¡°Est¨¢ mal que los riders tengan que elegir entre libertad y flexibilidad o m¨¢s seguridad porque si le preguntas a cualquiera de ellos te dir¨ªan que quieren ambos¡±.
Inter¨¦s de los grandes
La ausencia de rentabilidad, la fuga de cerebros en la alta direcci¨®n y la batalla legal por el tipo de relaci¨®n laboral con sus empleados no impide que los gigantes tecnol¨®gicos merodeen cerca de la compa?¨ªa, atra¨ªdos por su r¨¢pido crecimiento. En los ¨²ltimos meses ha cobrado fuerza la hip¨®tesis del inter¨¦s de Uber por hacerse con Deliveroo. Y es que la plataforma para transporte de pasajeros cuenta desde 2014 con una filial, Uber Eats, que es una de las aplicaciones para el env¨ªo de comida m¨¢s descargadas en el mundo. El reconocimiento y la confianza de sus usuarios han sido clave para garantizar el despegue de esta rama del negocio aunque se enfrenta a compa?¨ªas como Glovo, Just Eat, Delivery Hero, GrubHub, Takeaway. Y por supuesto, Deliveroo.
Cuando el pasado oto?o se publicaron las primeras informaciones en torno al inter¨¦s de Uber por Deliveroo, Shu recalc¨® que su compa?¨ªa no estaba en venta aunque algunos analistas reconocen que la operaci¨®n hubiera generado las sinergias suficientes para plantarle cara a Just Eat, que domina c¨®modamente el mercado brit¨¢nico de reparto de comida. ¡°En el Reino Unido trabajamos con m¨¢s restaurantes, m¨¢s riders y estamos en m¨¢s lugares. Somos una empresa mayor que Uber Eats¡±, zanjan desde Deliveroo.
Uber no ha sido la ¨²nica compa?¨ªa interesada en cortejar a Deliveroo. Amazon habr¨ªa hecho hasta dos ofertas preliminares, la ¨²ltima a principios de 2018, seg¨²n public¨® The Telegraph. De momento, Will Shu prefiere seguir su camino de forma independiente. En junio de 2018 el exbanquero reconoci¨® que no descarta una posible salida a Bolsa de la compa?¨ªa, aunque matiz¨® que no es en estos momentos una de sus prioridades, de acuerdo con una informaci¨®n de la agencia Reuters.
Presencia en Espa?a
Deliveroo cuenta con 5.000 restaurantes agregados en su aplicaci¨®n espa?ola y trabaja con 1.500 repartidores. Seg¨²n datos de la compa?¨ªa, reciben aproximadamente 600 solicitudes semanales de potenciales usuarios que desean colaborar con su expansi¨®n en nuestro territorio. En 2016, ¨²ltimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil, Roofoods, denominaci¨®n social de la empresa que opera en Espa?a la aplicaci¨®n de Deliveroo, factur¨® 3,85 millones de euros, y sus p¨¦rdidas fueron de 5,6 millones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.