El Banco de Espa?a pide que se haga la reforma de pensiones antes de que el votante medio envejezca m¨¢s

La jubilaci¨®n del baby boom, la mayor esperanza de vida y la escasa natalidad har¨¢n que la pir¨¢mide poblacional tome m¨¢s bien la forma de una peonza. De aqu¨ª a 2050, ¡°parece inevitable que se produzca un fuerte incremento de la poblaci¨®n mayor de 66 a?os¡±, que pasar¨¢ de representar el 25% del colectivo entre 16 y 65 a?os hasta el 51%, apunta. ¡°El envejecimiento poblacional supone un reto de primer orden para la sostenibilidad de nuestro sistema de bienestar social¡±, asegura en la presentaci¨®n el gobernador Pablo Hern¨¢ndez de Cos.

¡°Las reformas aprobadas en 2011 y en 2013 incluyeron algunos elementos de ajuste que permit¨ªan contrarrestar de manera significativa el efecto del envejecimiento sobre el gasto p¨²blico en pensiones¡±, se?ala el informe. No obstante, ¡°las ¨²ltimas medidas aprobadas han retrasado la aplicaci¨®n del factor de sostenibilidad¡±?¡ªque liga la prestaci¨®n a la esperanza de vida¡ª ¡°y han reintroducido la revalorizaci¨®n de las pensiones con el IPC¡±, dice. Si no se hace nada, seg¨²n las proyecciones que muestra el Banco de Espa?a, el gasto podr¨ªa dispararse hasta en siete puntos de PIB, el equivalente a toda la recaudaci¨®n por IRPF. Los desembolsos por dependencia y sanidad tambi¨¦n podr¨ªan elevarse.

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Al mismo tiempo el crecimiento econ¨®mico podr¨ªa resentirse al contar con menos personas en edad de trabajar y, por tanto, una menor fuerza laboral ¡°incluso si se mantienen los flujos de inmigraci¨®n en unos niveles elevados¡±. Aunque se podr¨ªa fomentar la inversi¨®n en tecnolog¨ªa para sustituir la mano de obra, el organismo destaca que una poblaci¨®n envejecida tendr¨ªa m¨¢s dif¨ªcil adaptarse e innovar en un contexto de ¡°cambios tecnol¨®gicos potencialmente disruptivos¡±, por lo que la productividad tambi¨¦n se ver¨ªa perjudicada. Por no hablar de la inversi¨®n, pues los flujos de capitales se marchar¨ªan ¡°hacia pa¨ªses menos envejecidos¡±. En consecuencia, un menor crecimiento complicar¨ªa la financiaci¨®n del sistema de bienestar. Y Espa?a ser¨¢ uno de los pa¨ªses que lo sufra de manera m¨¢s acusada, subraya el documento.?

Por si no fuera suficiente problema, el Banco de Espa?a explica que los ingresos tributarios acusar¨ªan el impacto de la demograf¨ªa: se recaudar¨ªa menos por cotizaciones al haber menos trabajadores; por renta, al caer los ingresos por la jubilaci¨®n, y por los impuestos indirectos, al consumir los mayores m¨¢s productos con tipos reducidos. Solo podr¨ªan tributar m¨¢s por el capital ahorrado, sujeto a unos tipos m¨¢s bajos. En definitiva, las costuras del sistema tributario se tensar¨ªan y habr¨ªa ¡°una dificultad adicional¡± para corregir el desfase de las cuentas p¨²blicas y el elevado endeudamiento. Por todos estos motivos, considera que hay que hacer reformas cuanto antes, incluso si no existe un consenso absoluto entre todos los partidos pol¨ªticos.?

"M¨¢s all¨¢ de sus consecuencias econ¨®micas, el cambio de la estructura por edades de la poblaci¨®n es trascendente para muchas de las decisiones de pol¨ªtica econ¨®mica. Asociado a dicho cambio, se producir¨¢ un aumento de la edad media de, al menos, cinco a?os (de 43 a 48 a?os) entre 2018 y 2050. Y, de mantenerse constantes los comportamientos de participaci¨®n electoral por grupos de edad observados en el pasado (mayor participaci¨®n de la poblaci¨®n de edad avanzada que de la poblaci¨®n juvenil), se incrementar¨¢ el apoyo social a pol¨ªticas financiadas mediante transferencias de renta hacia la poblaci¨®n de mayor edad, en contra de otras que reduzcan el peso de la carga de la deuda sobre generaciones futuras, que ya se encuentra en niveles elevados actualmente", reza el informe anual.

Con una mayor proporci¨®n de jubilados, la pol¨ªtica econ¨®mica se volver¨¢ m¨¢s complicada de gestionar. Resultar¨¢ mucho m¨¢s dif¨ªcil que en medio de una recesi¨®n los est¨ªmulos fiscales tengan impacto, ya que los mayores no presentan la misma propensi¨®n a consumir e invertir que los j¨®venes. Debido al menor crecimiento, quedar¨¢ menos margen para el impulso de la pol¨ªtica monetaria. Y se dedicar¨¢n menos recursos p¨²blicos a las iniciativas que generan crecimiento futuro, como la educaci¨®n o las inversiones, vaticina el cap¨ªtulo dedicado al reto del envejecimiento.

¡°Si se quisiera mantener un sistema contributivo basado en el nivel actual de cotizaciones sociales, la tasa de beneficio de ese sistema tendr¨ªa que disminuir¡±, argumenta el Banco de Espa?a. Por culpa de la reciente crisis, el baby boom espa?ol llegar¨¢ a la jubilaci¨®n con un patrimonio relativamente inferior al de generaciones anteriores. Y no contar¨¢ con mucho ahorro l¨ªquido al haber destinado gran parte a la vivienda, que tiende a protegerse y dejarse en herencia. Adem¨¢s, en situaciones de apuro econ¨®mico, las pensiones han ejercido ¡°de seguro¡± para toda la familia. En semejante contexto de falta de rentas adicionales que suplan la ca¨ªda de la pensi¨®n, el organismo defiende que se busquen f¨®rmulas financieras innovadoras para poder extraer ingresos del patrimonio inmobiliario, en una clara referencia a la hipoteca inversa.

En opini¨®n del banco, los cambios deben hacerse con tiempo y transparencia para que los ciudadanos puedan tomar decisiones de forma anticipada. ¡°Ser¨¢ necesario que aumente el empleo a edades avanzadas¡±, a?ade el supervisor. Si bien el inconveniente radica en que en Espa?a los trabajadores de mayor edad se ocupan m¨¢s en actividades con tareas f¨ªsicas como la construcci¨®n, el transporte o la hosteler¨ªa. La formaci¨®n y la educaci¨®n resultar¨¢n esenciales para paliar estos problemas, recalca el organismo. En general, recomienda que se liguen m¨¢s las prestaciones a lo que realmente se ha contribuido y a la esperanza de vida.