Un grupo de expertos defiende la creaci¨®n de una renta b¨¢sica universal

¡°Los canales b¨¢sicos del sistema de bienestar han saltado por los aires¡±, ha afirmado Sevilla en la presentaci¨®n del informe Reforzar el bienestar social: del ingreso m¨ªnimo a la renta b¨¢sica, publicado por el Observatorio Social de la Caixa. Este documento concluye que hace falta una reforma en profundidad del sistema de protecci¨®n social para adecuarlo a las nuevas necesidades.

Seg¨²n cifras de la Comisi¨®n Europea, Espa?a es uno de los pa¨ªses cuyas transferencias sociales benefician menos a las rentas bajas. El decil m¨¢s pobre solo recibe un 4% del total. Adem¨¢s, seg¨²n datos del servicio p¨²blico de empleo, cuatro de cada diez desempleados han agotado sus prestaciones y subsidios. Ante esta realidad, Jordi Sevilla propone que se redefina el sistema de cobertura social. La mayor¨ªa de las ayudas que brinda el sector p¨²blico en realidad se focalizan en rebajas del IRPF. Sin embargo, ?qu¨¦ sucede con los cuatro millones de personas que est¨¢n fuera del IRPF y que, por tanto, no las reciben?, se pregunta el exministro de Administraciones P¨²blicas.

Los m¨¢s pobres ni cotizan ni tributan por renta. En consecuencia, no adquieren derechos y no se benefician del sistema social. Curiosamente, seg¨²n denuncia Jordi Sevilla, ahora la ayuda social por hijo que brinda la Seguridad Social es menor que la desgravaci¨®n que se puede obtener en el IRPF. Adem¨¢s, cada vez hay m¨¢s gente en esos grupos. Por todos estos motivos, Sevilla aboga por un sistema en el que se incluyan a todos: los que tributan y los que no.

De hecho, recuerda que el Estado ya incluye en el IRPF un m¨ªnimo vital exento del impuesto porque considera que esa es la cifra m¨ªnima para subsistir. Esa cantidad se sit¨²a en unos 5.500 euros en la actualidad y va aumentando por tener hijos u otros motivos.

Bajo el nuevo esquema que propone Sevilla, el ciudadano que est¨¦ por encima de un m¨ªnimo vital exento ¡ªcuya cifra estar¨ªa por definir¡ª pagar¨ªa su contribuci¨®n del impuesto de la renta, mientras que el que est¨¦ por debajo recibir¨ªa un dinero hasta cubrir ese m¨ªnimo. Ser¨ªa una especie de complemento a las rentas de aquella persona que no tenga los recursos suficientes. Lo que en la jerga se llama impuesto negativo o cr¨¦dito fiscal. Y podr¨ªa cobrarlo de forma mensual o al cabo del a?o igual que se hace ahora con la ayuda por hijo en el IRPF. Por tanto, todos tendr¨ªan que hacer la declaraci¨®n de la renta.

En cuanto al hecho de que la competencia sobre estas ayudas sociales est¨¦ en manos de las comunidades, Sevilla apunta que ser¨ªa una forma de dar un paraguas ¨²nico en el que gradualmente se integren todas las pol¨ªticas sociales p¨²blicas, brindando una cierta coherencia. Y sugiere que las comunidades podr¨ªan participar como ya lo hacen en el IRPF con tramos.

En opini¨®n de esta decena de autores, el modelo actual de subsidios concedidos bajo condiciones no ha funcionado, y explican que entre las razones se encuentra la insuficiente cobertura o el fuerte desincentivo para buscar un trabajo si se pierde el subsidio.?Tampoco ayuda el hecho de tener 17 programas distintos por comunidades con regulaciones y niveles de generosidad dispares, dicen.

Este sistema organizado a trav¨¦s del IRPF tambi¨¦n beneficiar¨ªa en realidad a los que m¨¢s tienen porque estar¨ªan teniendo exentas las rentas del m¨ªnimo vital, apostilla Sevilla, quien fue coordinador del programa econ¨®mico del PSOE en las elecciones de 2015. Adem¨¢s, acabar¨ªa poco a poco con la incoherencia de tener pensiones o subsidios que son inferiores a ese m¨ªnimo esencial para la subsistencia que fija el Estado. Respecto a?si establece o no unos incentivos correctos, Sevilla ha negado que bajo esta f¨®rmula se desincentive el trabajo.

Los acad¨¦micos reconocen que no es f¨¢cil aplicar una renta b¨¢sica universal, y que ning¨²n Estado ha conseguido implementarla por sus elevados costes. Sin embargo, s¨ª que se han implantado experiencias piloto positivas de prestaciones de ingresos m¨ªnimos, y ponen como ejemplo la de Nueva York. En el caso de Espa?a, se destaca el relativo ¨¦xito de la renta m¨ªnima del Pa¨ªs Vasco. No obstante, los expertos afirman que un obst¨¢culo importante para poner en marcha una prestaci¨®n de ingresos m¨ªnimos radica en que las Comunidades Aut¨®nomas tienen la competencia.