Trabajo derogar¨¢ el martes el despido objetivo pese a estar de baja m¨¦dica
Yolanda D¨ªaz anuncia que la medida ver¨¢ la luz en el Consejo de Ministros de la pr¨®xima semana
El Consejo de Ministros empezar¨¢ a desmontar la reforma laboral el pr¨®ximo martes. Ser¨¢ una parte peque?a: el despido justificado de empleados que hayan faltado ocho d¨ªas o m¨¢s al trabajo estando de baja m¨¦dica en dos meses. Y lo har¨¢ por decreto ley, es decir, entrar¨¢ en vigor inmediatamente y despu¨¦s tendr¨¢ que convalidarse en el Congreso. La ministra de Trabajo y Econom¨ªa Social, Yolanda D¨ªaz, as¨ª lo anunci¨® ayer despu¨¦s de que su compa?era de Gabinete, la responsable de Econom¨ªa, Nadia Calvi?o, ya declarase el domingo al The Financial Times que esta medida concitaba un amplio consenso.
El despido de un empleado por faltar al trabajo ocho d¨ªas o m¨¢s en un periodo de dos meses siempre que durante los 12 meses precedentes haya acumulado un 5% de bajas en d¨ªas h¨¢biles, o por faltar el 25% en cuatro meses aunque esas ausencias est¨¦n justificadas m¨¦dicamente es legal desde hace d¨¦cadas en Espa?a. Pero ten¨ªa que cumplirse un requisito m¨¢s: el ¨ªndice agregado de absentismo en el centro de trabajo del empleado despedido deb¨ªa superar el 2,5%.
Esto cambi¨® con la reforma laboral de 2012, que individualiz¨® el despido al eliminar la exigencia de que hubiera un absentismo m¨ªnimo en el centro de trabajo. Esa modificaci¨®n provoc¨® las quejas de los sindicatos. Sin embargo, durante los ¨²ltimos a?os sus cr¨ªticas se dirigieron m¨¢s a otros aspectos como la negociaci¨®n colectiva.
La situaci¨®n dio la vuelta a finales de octubre, cuando el Tribunal Constitucional sentenci¨® que el cambio de la reforma laboral era legal alegando la ¡°libertad de empresa y la defensa de la productividad¡±. El fallo cont¨® con tres votos particulares bastante duros y llev¨® a los sindicatos a rescatar su demanda. Los partidos que ahora est¨¢n en el Ejecutivo se comprometieron, a falta de unos d¨ªas para que se celebraran las elecciones del 10 de noviembre, a derogarlo si gobernaban.
De acuerdo con esta promesa, la ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, ha declarado desde que tom¨® posesi¨®n que su intenci¨®n era derogar el art¨ªculo 52.d ¡ªel que regula este despido¡ª cuanto antes. Y, adem¨¢s, suele a?adir que este ser¨¢ uno de los puntos que no va a negociar ni con los sindicatos ni con los empresarios. ¡°[En esto] ni siquiera voy al di¨¢logo social. Y se lo he explicado a los agentes sociales desde la convicci¨®n de que los derechos humanos no se negocian. La preservaci¨®n de la salud est¨¢ por encima de cualquier cuesti¨®n¡±, defend¨ªa en una entrevista en EL PA?S a finales de enero.
Este ser¨ªa el ¨²nico punto de la reforma laboral sobre cuya derogaci¨®n o modificaci¨®n D¨ªaz dice que no habr¨¢ negociaci¨®n. Sobre el resto, tanto la ministra de Trabajo como el resto del Gobierno se han comprometido a llevar sus planes al di¨¢logo social. Una de las ¨²ltimas voces del Ejecutivo que se ha pronunciado en este sentido ha sido la titular de Econom¨ªa, Nadia Calvi?o, probablemente la compa?era m¨¢s reticente a derogar totalmente la reforma que va a encontrar D¨ªaz en el Consejo de Ministros.
En la entrevista citada, Calvi?o, dirigi¨¦ndose a los inversores de la City londinense, apunt¨® que los cambios del Gobierno pasar¨¢n por el di¨¢logo social. No obstante, como D¨ªaz, excluy¨® de esas conversaciones la derogaci¨®n del despido con bajas m¨¦dicas porque, dijo, hab¨ªa un amplio consenso al respecto.
A partir de ahora y, seg¨²n los planes expuestos por la ministra D¨ªaz y recogidos en el pacto de Gobierno del PSOE y Unidas Podemos, comienza una derogaci¨®n y modificaci¨®n profunda de la reforma laboral en tres fases. En la primera se reestructurar¨ªa la negociaci¨®n colectiva, otorgando la prioridad en la aplicaci¨®n a los convenios sectoriales frente a los de empresa y recuperando la pr¨®rroga indefinida de los convenios caducados hasta su renovaci¨®n (la llamada ultractividad). Tambi¨¦n se abordar¨ªa la subcontrataci¨®n. En la segunda se simplificar¨ªan las modalidades de contrataci¨®n y se intentar¨ªa acabar con el abuso de la contrataci¨®n temporal. Y en la tercera y ¨²ltima, los planes legislativos pasan por la ¡°elaboraci¨®n de un nuevo Estatuto del Trabajo¡±, en palabras de D¨ªaz.
Estos planes se encontrar¨¢n con la resistencia de los empresarios, que estar¨¢n en la mesa de negociaci¨®n representados por la CEOE. Pero tambi¨¦n es probable que choquen con las cr¨ªticas de organismos internacionales o de reguladores como el Banco de Espa?a. Precisamente la semana pasada el propio gobernador, Pablo Hern¨¢ndez de Cos, vino a defender su vigencia tambi¨¦n en The Financial Times.?
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