Menos coches, bicis y juguetes: los problemas de suministro restan empuje a la recuperaci¨®n con la demanda disparada

El ¨¦xito de la globalizaci¨®n se ciment¨® en su capacidad para cubrir las necesidades de los consumidores a un precio razonable en un corto periodo de tiempo. El engranaje funciona cuando la producci¨®n viaja sin problemas, en buena medida desde pa¨ªses de mano de obra barata a otros de rentas medias y altas. Pero ese paradigma sufre ahora un c¨²mulo de problemas.

Las f¨¢bricas asi¨¢ticas trabajan entre interrupciones desde el inicio de la pandemia, y esos parones se est¨¢n reproduciendo con la variante delta. La demanda, hundida durante los meses duros del coronavirus, ha revivido con furia, sin dar tiempo a las empresas para recomponerse, colapsando puertos como el de Los ?ngeles o R¨®terdam hasta el punto de que muchos barcos tienen que esperar d¨ªas a su entrada para que los descargue personal a veces mermado por la enfermedad. La carencia de los contenedores que usan las navieras para trasladar millones de pedidos los ha convertido en un bien codiciado, multiplicando por cuatro su precio, lo que est¨¢ encareciendo el suministro. No hay chips suficientes para atender a la industria electr¨®nica y del autom¨®vil. Y el acaparamiento de materias primas para su propio uso por parte de pa¨ªses como China, unido a su elevado precio, tampoco ayuda. Por si todos esos ingredientes no bastaran para hornear una tarta indigesta para el comercio mundial, la puntilla la dio el atasco en el Canal de Suez del pasado marzo, cuando el buque Ever Given bloque¨® durante d¨ªas una arteria fundamental para los intercambios.

Esta riada de factores aparece citada por sectores consultados por este diario que est¨¢n sufriendo sobrecostes y escasez. Las turbulencias amenazan con dejar fuera del alcance de los clientes europeos o estadounidenses mercanc¨ªas cuya presencia se daba por descontada, entre ellos determinados modelos de bicicletas, juguetes, coches, videoconsolas o art¨ªculos deportivos.

No es solo una percepci¨®n. Una encuesta de Gallup realizada en julio en Estados Unidos recoge que seis de cada diez consumidores no pudo comprar un producto que quer¨ªa en los ¨²ltimos dos meses debido a los problemas de suministro. Y al otro lado del Atl¨¢ntico tambi¨¦n sucede. El Banco Central Europeo ha advertido de que la escasez de productos qu¨ªmicos, madera, pl¨¢stico, metales y chips puede alentar la inflaci¨®n. Y el Banco de Francia se?al¨® la semana pasada que los problemas de suministro son generalizados en construcci¨®n, industria, y sobre todo automoci¨®n. Seg¨²n la Asociaci¨®n Europea de Componentes de Autom¨®viles, ha habido retrasos en la producci¨®n de m¨¢s de 500.000 veh¨ªculos, f¨¢bricas como la de Ford en Almussafes (Valencia) han llegado a detener su actividad por la falta de semiconductores, y las Islas Canarias y Baleares se han quedado sin coches de alquiler suficientes para los turistas que las visitan.

Dudas sobre la campa?a navide?a de juguetes

Oliver Giner, de la Asociaci¨®n Espa?ola de Fabricantes de Juguetes, lo resume as¨ª. ¡°Hemos salido de un bloqueo global para empezar a consumir, hemos arrancado todos en el mismo momento y hemos pedido todos al mismo tiempo¡±. La entidad ha avisado de que las dificultades de aprovisionamiento de materias primas, los sobrecostes en los fletes de los barcos que traen componentes desde Asia y los retrasos en los embarques ¡°ponen en serio peligro la campa?a navide?a de juguetes¡±. Giner puntualiza que la situaci¨®n no es todav¨ªa dram¨¢tica, pero s¨ª muy compleja, con retrasos de hasta cinco semanas en los env¨ªos.

Los juguetes que se venden en Navidad se fabrican en junio, julio y agosto. Y el tiempo de tr¨¢nsito desde China suele ser de unos 40 d¨ªas. Por todo esto, si hubiera m¨¢s imprevistos, algunos componentes no llegar¨ªan a tiempo de ser distribuidos y esos juguetes no podr¨ªan aparecer en los cat¨¢logos que se lanzan en octubre. Aunque Espa?a tiene su propia industria juguetera, a veces depende de peque?os detalles: ¡°El 95% de las mu?ecas se fabrican en Espa?a, pero el mecanismo de lloro o el que dice pap¨¢ o mam¨¢ viene de China, y sin eso no las podemos vender¡±, explica Giner.

Tambi¨¦n han lidiado con contratiempos dif¨ªcilmente predecibles, como el bloqueo del Canal de Suez en marzo, o el cierre parcial en junio por un brote de coronavirus del puerto chino de Yantian, de donde salen m¨¢s de la mitad de los juguetes que se fabrican en China y muchas otras mercanc¨ªas: m¨¢s de 180.000 contenedores se acumularon durante su clausura.

Retrasos de a?o y medio en bicicletas

La bicicleta se ha convertido en objeto de deseo en el nuevo mundo pand¨¦mico, donde la actividad en el exterior se ha erigido en ant¨ªdoto contra la claustrofobia de los encierros. Eso ha multiplicado la demanda. Seg¨²n la Confederaci¨®n de la Industria de la Bicicleta Europea (Conebi), en 2020 se vendieron en Europa 22 millones de bicicletas, 4,5 millones de ellas el¨¦ctricas, un 35% m¨¢s que un a?o antes.

En ese escenario de pedidos disparados, el italiano Manuel Marsilio, director general de la organizaci¨®n, con sede en Bruselas, tilda de ¡°incre¨ªbles¡± los retrasos en la llegada de componentes como frenos hidr¨¢ulicos o cambios, fundamentales para fabricar las bicicletas. Seg¨²n sus c¨¢lculos, hay demoras de entre 360 y 500 d¨ªas. ¡°No est¨¢n ligados solo a la producci¨®n. Hablamos de toda la cadena de valor. Hay retrasos tambi¨¦n en las materias primas necesarias para los componentes¡±, se?ala.

La dilaci¨®n est¨¢ provocando que las tiendas hagan pedidos m¨¢s grandes con la intenci¨®n de almacenarlos, una forma de suplir la larga espera hasta la llegada del siguiente env¨ªo. Pero es solo un parche, Marsilio cree que la clave est¨¢ en aumentar la producci¨®n en Europa, un proceso ya en marcha, pero que llevar¨¢ tiempo. ¡°No puedes construir empresas de un d¨ªa para otro¡±, dice. El objetivo es ambicioso: doblar en 2025 los 3.000 millones de euros del valor de producci¨®n actual del sector en el continente para depender menos de Asia.

El controvertido papel de las navieras

Buena parte de los consultados para este art¨ªculo culpa a las navieras de aprovechar la crisis para inflar los precios. Los resultados del ¨²ltimo trimestre muestran que sus beneficios se han disparado gracias a la falta de espacio en sus barcos. La danesa Maersk, que transporta uno de cada cinco contenedores que se mueven en el mundo, gan¨® 5.459 millones de euros en el primer semestre, nueve veces m¨¢s que un a?o antes, y sus acciones han doblado su precio en 12 meses. Sus responsables, sin embargo, achacan los cuellos de botella al boom de la demanda. Lars Mikael Jensen, directivo de la compa?¨ªa, asegura a EL PA?S no haber visto nada parecido en sus 40 a?os en la empresa. ¡°Nuestros clientes est¨¢n tratando de satisfacer una demanda muy fuerte impulsada por los paquetes de est¨ªmulos, pero tambi¨¦n est¨¢n tratando de acumular nuevamente inventarios. Estamos en la temporada alta de env¨ªos antes de las vacaciones, as¨ª que es probable que el auge del transporte de contenedores contin¨²e durante todo 2021¡å, explica.

Jensen relata que con la variante delta est¨¢ aumentando el n¨²mero de f¨¢bricas cerradas o que trabajan a medio gas, hay menos trabajadores portuarios disponibles y m¨¢s retrasos en la descarga de buques, que en ocasiones detectan casos de covid a bordo, lo que obliga a su tripulaci¨®n a guardar cuarentena. ¡°Todos estos incidentes est¨¢n afectando negativamente a todos los eslabones de la cadena de suministro global en tierra y mar¡±, alerta. El impacto es tal que la firma ha visto un nuevo fil¨®n de negocio en la log¨ªstica en tierra, y ha adquirido recientemente varias empresas. ¡°Estamos pasando de los contenedores enviados de puerto a puerto al env¨ªo de puerta a puerta. Para que esto suceda, necesitamos aumentar nuestras capacidades en tierra¡±, apunta Jensen.

Nils Haupt, de la naviera alemana Hapag-Lloyd (+324% en Bolsa el ¨²ltimo a?o), dice que est¨¢n construyendo m¨¢s barcos para atender la enorme demanda global. La firma tiene 2,8 millones de contenedores de capacidad, pero necesita 500.000 m¨¢s. ¡°Sigue habiendo mucha demanda de art¨ªculos como bicicletas y equipamiento deportivo, materiales para pintar o remodelar la casa, muebles y sillas para estar m¨¢s c¨®modo teletrabajando o televisiones, porque al pasar m¨¢s tiempo en el hogar los ni?os quieren su propio aparato¡±, concreta. Sin embargo, los tiempos de fabricaci¨®n son los que son, y no espera que la flota aumente significativamente hasta 2023. ¡°No hay barcos vac¨ªos. Si quieres uno, tienes que pagar 200.000 d¨®lares por d¨ªa, y eso por uno peque?o de 5.000 contenedores¡±. Haupt espera que con el avance de la vacunaci¨®n los consumidores adquieran menos bienes y m¨¢s servicios, esto es, vuelen m¨¢s al extranjero, cenen m¨¢s en restaurantes y vayan m¨¢s al cine, lo que servir¨ªa para reducir la presi¨®n sobre las cadenas de suministro. ¡°Ahora compran muchas cosas, pero no gastan en servicios¡±.