Renault advierte de las consecuencias laborales de prohibir los coches h¨ªbridos

Cuando en julio pasado la Comisi¨®n Europea propuso la prohibici¨®n de vender veh¨ªculos contaminantes a partir de 2035 lanz¨® una advertencia a la industria de la automoci¨®n. Este lunes Renault, en voz de su consejero delegado, Luca de Meo, le ha respondido al Ejecutivo comunitario advirtiendo de los efectos laborales que puede tener esa decisi¨®n, al cortar la transici¨®n hacia el veh¨ªculo el¨¦ctrico que se hab¨ªa confiado sobre los coches h¨ªbridos (que comparten motor de combusti¨®n y bater¨ªas para propulsarse), que quedar¨ªa tambi¨¦n condenado, junto a coches de gasolina, di¨¦sel y gas. Ese tipo de tecnolog¨ªa tiene mucho protagonismo en las plantas del grupo franc¨¦s en Palencia y Valladolid.

¡°Si le dices a la gente que los h¨ªbridos no valen para nada en 2035, ?qu¨¦ crees que va a pasar?¡±, ha lanzado de forma ret¨®rica De Meo en un encuentro con periodistas espa?oles en M¨²nich, donde esta semana se celebra reconvertido el antiguo sal¨®n del autom¨®vil que se celebraba en Fr¨¢ncfort, tras ser preguntado por la regulaci¨®n que prepara la UE. ¡°Si las ventas bajan vamos a bajar los vol¨²menes de producci¨®n, con todas las consecuencias que eso tiene¡±, ha dicho, sin especificar posibles recortes de empleo pero dejando abiertas todas las puertas. Por el momento, Renault ha concentrado la fabricaci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos en Francia, como otras marcas con plantas repartidas por todo el mundo han hecho en sus pa¨ªses de origen.

El primer ejecutivo de la marca del rombo ha llamado a ¡°los reguladores¡± a analizar todos los efectos que tienen sus decisiones, despu¨¦s de asumir que la ¨²ltima decisi¨®n de la UE tiene que ser todav¨ªa concretada. De Meo ha se?alado que la decisi¨®n no solo afecta a Renault, sino al resto de grupos europeos, y que la patronal europea de marcas europeas ACEA tiene que debatir qu¨¦ respuesta da.

La industria de la automoci¨®n considera que 2035 es un horizonte muy breve para los calendarios que manejan los fabricantes, en el que las inversiones para lanzar un nuevo veh¨ªculo o una nueva tecnolog¨ªa se tienen que amortizar en lustros, el tiempo que sucede entre el dise?o y la salida al mercado de un veh¨ªculo.

De ah¨ª, que De Meo haya afirmado que ¡°2035 es ma?ana¡± y ha pedido que se tenga en cuenta si los coches h¨ªbridos pueden jugar a favor de reducir los objetivos de emisiones de CO? fijados por la propia Comisi¨®n. O si otras tecnolog¨ªas de combustibles pueden jugar tambi¨¦n en esa reducci¨®n paulatina de emisiones. De hecho, ha considerado que la industria est¨¢ siendo m¨¢s r¨¢pida que la administraci¨®n en el despliegue de los veh¨ªculos el¨¦ctricos, constatando el retraso que en algunos pa¨ªses, como Espa?a, hay con la construcci¨®n de puntos de recarga.