Agricultura concluye la estrategia para atraer a Espa?a 48.000 millones de la PAC

El Gobierno ya tiene listo el plan estrat¨¦gico que servir¨¢ para aplicar en Espa?a, a partir de 2023, la Pol¨ªtica Agr¨ªcola Com¨²n (PAC), el mecanismo con el que la Uni¨®n Europea ha ayudado durante seis d¨¦cadas a mantener las rentas agrarias en el territorio comunitario. La nueva PAC para el periodo 2023-2027 llegar¨¢ con retraso (en teor¨ªa se deber¨ªa haber puesto en marcha en 2021, pero la anterior se prorrog¨® dos a?os al complicarse las negociaciones) y con modificaciones sustanciales. Una de ellas es precisamente la obligaci¨®n de que cada pa¨ªs presente a Bruselas una estrategia propia, que ser¨¢ revisada durante el primer semestre de 2022 y cumplir¨¢ necesariamente con las directrices generales pactadas por los Veintisiete y el Ejecutivo comunitario con el objetivo declarado de lograr una pol¨ªtica agr¨ªcola ¡°m¨¢s justa y m¨¢s verde¡±.

El documento que ver¨¢ el Consejo de Ministros de este martes confirma los t¨¦rminos que se acordaron entre el Ministerio de Agricultura, las comunidades aut¨®nomas y las organizaciones sectoriales en la negociaci¨®n del plan. Ser¨¢ la base para el reparto de casi 7.000 millones al a?o. Espa?a debe recibir 47.724 millones de euros hasta 2027, contando con la pr¨®rroga de la anterior regulaci¨®n en este 2021 y 2022. Es una cantidad similar a la de la PAC actual, que en el ministerio valoran como ¡°una herramienta suficiente¡± para el sector. El grueso ser¨¢n, como siempre, las ayudas directas. Estas se llevar¨¢n 4.800 millones anuales e incorporan una de las principales novedades del futuro marco agrario: los denominados ecorreg¨ªmenes o ecoesquemas.

Casi una cuarta parte de las ayudas (un 23%, seg¨²n el plan revisado por el Gobierno) se distribuir¨¢n con este esquema que busca favorecer las explotaciones agr¨ªcolas y ganaderas m¨¢s sostenibles. Al margen de unas obligaciones m¨ªnimas (toda la PAC establece nuevos requisitos medioambientales y tambi¨¦n sociales, ya que persigue mejorar la calidad del empleo en el sector), los ecorreg¨ªmenes se concretan en una serie de pr¨¢cticas a las que los productores pueden adherirse voluntariamente. Puede ser desde practicar ciertas rotaciones hasta introducir determinados elementos paisaj¨ªsticos o llevar a cabo una ganader¨ªa extensiva.

¡°Se ha intentado que sean accesibles para todo el mundo, que todas las superficies de cultivo puedan acogerse a alguna pr¨¢ctica¡±, explica Jos¨¦ Luis Miguel, coordinador t¨¦cnico de COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos). Pero tambi¨¦n avisa de que ¡°quienes no puedan acometerlas pierden ya esa parte de ayuda¡±. El sector teme, en definitiva, que los ecorreg¨ªmenes acaben suponiendo un recorte. Incluso para aquellos que los acaben percibiendo, se plantean casi siempre como una compensaci¨®n: las pr¨¢cticas ecol¨®gicas que acarrean suponen en la mayor¨ªa de casos una rebaja de la producci¨®n o un incremento de los costes.

Ayuda a peque?os productores

El apoyo a la renta para todas las explotaciones, el mecanismo principal de distribuci¨®n de las subvenciones de la PAC, se quedar¨¢ desde ahora con el 60% de las ayudas directas. Diez de esos 60 puntos (es decir, un 10% sobre el total) son adem¨¢s solo para primeras hect¨¢reas porque Bruselas obliga a establecer un mecanismo que compense a los peque?os productores y ayude a redistribuir la riqueza del sector. Pero tambi¨¦n en el otro 50%, la denominada ayuda b¨¢sica a la renta (a grandes rasgos, lo que hasta ahora se denominaba pago b¨¢sico), hay novedades.

Cuando a un agricultor le correspondan m¨¢s de 60.000 euros por ese concepto, la ayuda se ir¨¢ reduciendo progresivamente. Y nunca se pagar¨¢n m¨¢s de 100.000 euros a un perceptor (200.000 euros en total por explotaci¨®n, una vez descontados costes salariales y otros beneficios). Es otra manera de favorecer a los peque?os y medianos productores, ya que estas ayudas se calculan a partir de la superficie de la explotaci¨®n y en funci¨®n de la regi¨®n agron¨®mica donde se encuentre. El reparto, argumentan en el Ministerio de Agricultura, busca ¡°beneficiar a quien m¨¢s lo necesita, que son las explotaciones profesionales y familiares que forman la gran clase media del sector¡±.

El n¨²mero de regiones agron¨®micas se reduce, pasando de 50 a 20. Dentro de las mismas se ir¨¢ produciendo una convergencia progresiva de las ayudas. La idea es que, tal como recomend¨® Europa ya en la anterior PAC, las subvenciones se simplifiquen y tiendan a igualarse. Espa?a es uno de los pocos pa¨ªses que ten¨ªa pendiente esta tarea, complicada por lo que en su d¨ªa eran los derechos hist¨®ricos, que han arrastrado grandes diferencias entre lo que perciben unos cultivos y otros. El Ministerio quiere que en 2027 todos los productores dentro de la misma regi¨®n perciban lo mismo. Hasta entonces, los pagos a quienes y m¨¢s y menos perciben se ir¨¢n acortando a?o a a?o.

Condicionalidad social desde 2024

El plan preparado por Espa?a se completa con una reserva de 692 millones anuales para producciones en especial dificultad y reserva un 2% del total de ayudas directas (97 millones al a?o) para los agricultores y ganaderos j¨®venes. Cuando la titular o cotitular de una explotaci¨®n sea una mujer, se percibir¨¢ un 15% extra. La condicionalidad social, un sistema que penalizar¨¢ restando ayudas a las explotaciones que incumplan en materia de legislaci¨®n laboral, comenzar¨¢ a funcionar en 2024, un a?o antes del l¨ªmite establecido por Bruselas.

¡°Culmina un largo e intenso proceso de trabajo de m¨¢s de tres a?os en estrecha colaboraci¨®n con las comunidades aut¨®nomas y en constante di¨¢logo con las organizaciones profesionales¡±, valoran con satisfacci¨®n en Agricultura, que deber¨¢ enviar el plan estrat¨¦gico espa?ol a Bruselas antes de acabar el a?o para cumplir con el plazo que puso la Comisi¨®n Europea. En COAG coinciden en que sacar adelante la nueva PAC ha supuesto tres a?os con ¡°un mont¨®n de trabajo en muchos aspectos¡±. El coordinador t¨¦cnico de la organizaci¨®n recuerda que el monto total supone ¡°un presupuesto congelado¡± en un contexto de fuerte inflaci¨®n. En las ¨²ltimas semanas, los sindicatos del campo han protagonizado movilizaciones para exigir respuestas ante el incremento de los costes de producci¨®n, presionados por la subida de precios de la energ¨ªa, los combustibles y los fertilizantes.