El tope a la actualizaci¨®n del alquiler ahorra hasta 1.000 euros a los inquilinos

La decisi¨®n del Gobierno de prorrogar el tope a las actualizaciones de los alquileres hasta finales de a?o supondr¨¢ un ahorro de miles de millones para los inquilinos espa?oles. Es el mismo dinero que dejar¨¢n de ingresar los propietarios de viviendas alquiladas, que se quejan de la extensi¨®n de la medida y exigen compensaciones. Seg¨²n los c¨¢lculos de EL PA?S, sobre la base de la estad¨ªstica oficial de alquileres en los municipios de m¨¢s de 25.000 habitantes, la diferencia entre actualizar un alquiler con el tope del 2% o hacerlo con el IPC de junio, el m¨¢s alto en 37 a?os con una progresi¨®n de 10,2%, supone para el inquilino pagar entre 283 y 1.085 euros menos al a?o.

Esa amplia horquilla es la que va desde las localidades con los arrendamientos medios m¨¢s baratos, Yecla (Murcia) y Arcos de la Frontera (C¨¢diz), hasta la m¨¢s cara: Pozuelo de Alarc¨®n, en Madrid. Como la actualizaci¨®n de renta se basa en un porcentaje, la suma total que se ahorra el inquilino crece l¨®gicamente conforme el alquiler resulta m¨¢s costoso. Por eso, los descuentos m¨¢s interesantes se dan en las ¨¢reas metropolitanas de la Madrid y Barcelona, incluyendo la propia capital catalana. De hecho, hay que saltar los 10 primeros puestos para encontrar localidades de una provincia diferente (Sant Josep de sa Talaia e Ibiza, ambas en Baleares, que ocupan las posiciones 11? y 12?).

Entre las grandes ciudades espa?olas, que se sit¨²an en la parte alta de la tabla mayoritariamente, lo que dejar¨¢ de pagar un arrendatario que haya visto actualizar su alquiler este mes alcanza los 808 euros en Barcelona y los 762 en Madrid. Los arrendatarios de M¨¢laga y Sevilla se ahorrar¨ªan la misma cantidad, 581 euros, mientras para los de Valencia supone algo menos: 519 euros. En Zaragoza, la urbe con la vivienda m¨¢s barata entre los municipios espa?oles que superan el medio mill¨®n de habitantes, la diferencia entre actualizar una renta con el ¨²ltimo IPC o hacerlo al 2% supone 459 euros al a?o.

Los c¨¢lculos se basan en estimaciones a partir del Sistema Estatal de Referencia del Precio del Alquiler de Vivienda. Sobre los importes medios para cada ciudad, que se refieren al a?o 2020, se ha aplicado la subida de IPC que correspondi¨® al mes de junio de 2021 y luego se ha calculado la renta de 2022 con dos alternativas: la inflaci¨®n de junio o un 2%. Los alquileres en Espa?a se firman con una duraci¨®n m¨ªnima de cinco a siete a?os, y el precio se fija al principio del contrato, pero se permite actualizarlo anualmente (en el mismo mes en que se firma) con la inflaci¨®n como tope.

La modificaci¨®n introducida por el Gobierno entre las medidas para contener los efectos econ¨®micos de la guerra de Ucrania ha consistido en vincular ese tope al ?ndice de Garant¨ªa de Competitividad (IGC). Este es un indicador al que el PP dio preferencia cuando reform¨® la Ley de Arrendamientos Urbanos en 2015, aunque en la pr¨¢ctica se usa escasamente y por tradici¨®n la mayor¨ªa de los contratos se indexan al IPC. Su principal caracter¨ªstica es que solo se aplica entre el 0% y el 2%. As¨ª, el Ejecutivo decidi¨® que este fuera el m¨¢ximo que pod¨ªan crecer las rentas que se iban a actualizar durante el segundo trimestre. Pero al acercarse la fecha, y con el coste de vida disparado, la medida se prorrog¨® y ahora est¨¢ vigente hasta finales de a?o.

Calcular la factura total de ahorro para los inquilinos es muy dif¨ªcil con los datos disponibles. En su d¨ªa, el Ministerio de Transportes estim¨® que, en el trimestre inicial de aplicaci¨®n, el l¨ªmite afectar¨ªa a unos 875.000 contratos. La proyecci¨®n se basaba en el supuesto de que los 3,5 millones de alquileres que hay en Espa?a se renovasen por igual en todos los meses del a?o. Siguiendo esa l¨®gica, la extensi¨®n seis meses m¨¢s significa que al final se ver¨¢n afectados 2,6 millones de contratos. Partiendo de esa base, el portal Idealista ha calculado que los propietarios de viviendas arrendadas dejar¨¢n de ingresar 1.700 millones, aunque se basa en los precios de oferta de su web, m¨¢s elevados que los que finalmente se negocian.

Propietarios descontentos

En cualquier caso, la pr¨®rroga ha puesto en pie de guerra al sector. Joan Clos, presidente de Asval, una asociaci¨®n en la que participan algunos de los mayores caseros espa?oles y peque?os propietarios, lamenta que el Gobierno no establece contraprestaciones frente a ¡°medidas que se dictan a cargo del propietario, que tambi¨¦n sufre las consecuencias del incremento de la inflaci¨®n¡±. Su asociaci¨®n estudia medidas legales para exigir compensaciones y ha encuestado a sus casi 4.000 asociados, de los que ¡°m¨¢s de 1.000¡å dijeron estar dispuestos a reclamar. Para Carme Arcarazo, portavoz del Sindicato de Inquilinas de Catalu?a, la norma representa, sin embargo, ¡°una buena noticia¡±. ¡°El argumento de que el coste de vida aumenta para los caseros¡±, contin¨²a, ¡°se puede aplicar a todo el mundo, incluidos los inquilinos que pagan alquileres muy elevados para no quedarse sin techo y s¨ª han sufrido la inflaci¨®n con todo lo que han subido las rentas desde 2012¡å.

Jose Ram¨®n Zurdo, director general de la inmobiliaria Agencia Negociadora del Alquiler, coincide en que la carest¨ªa de la que se quejan muchos caseros est¨¢ ¡°influenciada por el coste de la vida, y no por nada espec¨ªfico del alquiler¡±. Los consumos de la vivienda (uno de los conceptos que m¨¢s han subido, seg¨²n los ¨²ltimos datos de inflaci¨®n) suelen repercutirse al arrendatario y el propietario se hace cargo de las cuotas de comunidad, que pueden haberse encarecido o no, y algunos impuestos. ¡°En un edificio completo debe notarse m¨¢s¡±, dice en alusi¨®n a los grandes propietarios con bloques enteros en los que se tienen que hacer cargo de gastos comunes.

Pero Zurdo se?ala algunos efectos nocivos de la medida: ¡°Cuando el propietario gana menos con el alquiler, lo m¨¢s com¨²n es que no se haga cargo del correcto mantenimiento del inmueble¡±, sostiene. Antonio Carroza, presidente de Alquiler Seguro (otra empresa que intermedia arrendamientos), tiene la misma percepci¨®n y a?ade una consecuencia ¡°m¨¢s perniciosa¡±. ¡°Al vencimiento de contrato, muchos caseros deciden cancelarlo¡±, aclara, ¡°y muchos inquilinos se van a tener que enfrentar a buscar una vivienda¡±. Carroza considera que el problema es el ¡°agravio comparativo¡± que los arrendadores sienten al ver que la inflaci¨®n sube a doble d¨ªgito y ellos solo pueden incrementar las rentas un 2%. ¡°Cuando un casero profesional se enfrenta a estas cosas, le fastidia, pero lo asume; los particulares, en cambio, toman decisiones m¨¢s viscerales¡±, concluye.