Ribera se inclina por restringir la ayuda de 20 c¨¦ntimos a los carburantes ¡°a quien m¨¢s lo necesita¡±

A falta de confirmaci¨®n oficial, todos los mensajes apuntan en la misma direcci¨®n: el 31 de diciembre ser¨¢ el final del caf¨¦ para todos en las ayudas sobre los carburantes. La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transici¨®n Ecol¨®gica, Teresa Ribera, se ha inclinado este martes por que la bonificaci¨®n de 20 c¨¦ntimos por litro de di¨¦sel o gasolina deje de ser universal a partir del 1 de enero de 2023, quedando restringida a ciertos colectivos profesionales (como los transportistas) y a las capas m¨¢s desfavorecidas de la poblaci¨®n.

¡°La subvenci¨®n fue una decisi¨®n de emergencia. Los precios muy elevados de los combustibles requer¨ªan una reacci¨®n r¨¢pida, generalizada y de aplicaci¨®n sencilla, pero cada vez es m¨¢s importante concentrar el esfuerzo en quien m¨¢s lo necesita, ya sea por razones profesionales, ya sea por nivel de rentas de las familias¡±, ha apuntado Ribera este lunes en una entrevista en Radio Nacional de Espa?a. La gasolina est¨¢ solo unos c¨¦ntimos m¨¢s barata que cuando empez¨® a aplicarse la subvenci¨®n, el pasado 1 de abril; el gas¨®leo, en cambio, est¨¢ notablemente m¨¢s caro, en el entorno de los dos euros por litro en las principales estaciones de servicio.

El Gobierno, ha dicho la n¨²mero cuatro del Ejecutivo, est¨¢ analizando cu¨¢les de las medidas desplegadas en el primer plan de choque para hacer frente a las consecuencias de la guerra sobre el coste de la vida seguir¨¢n tal cual el a?o que viene y cu¨¢les ¡°deben ser matizadas y cu¨¢les deben ser reforzadas¡±. Como parte de ese estudio, los ministerios tendr¨¢n que ¡°pensar hasta d¨®nde y c¨®mo¡± seguir¨¢ la ayuda al combustible. ¡°Antes del verano era imposible ser preciso y discriminar entre familias, pero en estos momentos hemos ido aprendiendo c¨®mo concentrar el esfuerzo fiscal y presupuestario en aquellos ¨¢mbitos en los que es m¨¢s eficaz y justo¡±, ha a?adido.

El Ministerio de Hacienda no confirma este extremo y no ha querido avanzar detalles sobre qu¨¦ medidas se mantendr¨¢n en 2023 y cu¨¢les sufrir¨¢n cambios. La responsable del departamento, Mar¨ªa Jes¨²s Montero, ha advertido en muchas ocasiones que el Gobierno est¨¢ pendiente de la evoluci¨®n de los precios para dise?ar las pol¨ªticas antiinflaci¨®n m¨¢s eficaces de cara al pr¨®ximo a?o, por las cuales se ha reservado un margen fiscal de 10.000 millones.

Finales de noviembre, fecha clave

¡°Este decreto tiene finalizaci¨®n a 31 de diciembre y seg¨²n nos aproximemos al final veremos c¨®mo se comportan los mercados de la energ¨ªa, el gas, el petr¨®leo¡­ y cuando tengamos esos datos podremos anunciar qu¨¦ medidas vamos a prorrogar¡±, dijo Montero el pasado jueves. ¡°Pero el Gobierno va a poner todos los recursos del Estado para los ciudadanos y sectores m¨¢s afectados, tambi¨¦n para las empresas. Cuando lleguemos a finales de noviembre podremos ver si esa medida u otras contin¨²an¡±.

Las ayudas indiscriminadas a los carburantes han permitido una atenuaci¨®n de la inflaci¨®n y, por tanto, han paliado parcialmente el zarpazo sobre la renta de los hogares: no solo para los que tienen coche, sino para todos, en tanto que el carburante es una de las principales partidas de costes del transporte de mercanc¨ªas. Pero tienen dos grandes peros, con may¨²sculas: son claramente regresivas (quienes m¨¢s se benefician de ellas son las rentas m¨¢s altas, que suelen tener coches de mayor cilindrada y que suelen hacer m¨¢s kil¨®metros en veh¨ªculo privado) y suponen una subvenci¨®n sobre los combustibles f¨®siles, que est¨¢n detr¨¢s del cambio clim¨¢tico.

En los ¨²ltimos meses, organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE) han criticado reiteradamente que las ayudas puestas en marcha por los pa¨ªses no se hayan centrado en los m¨¢s vulnerables y han alertado de que son contradictorias con los objetivos de transici¨®n verde. Dado el limitado espacio fiscal del que disponen, dec¨ªa, lo m¨¢s recomendable es focalizarlas en quien m¨¢s lo necesita.

En el caso de los carburantes, segmentar por renta es complicado por una cuesti¨®n t¨¦cnica: se necesita determinar con cu¨¢les requisitos deben cumplir los beneficiarios y, sobre todo, buscar f¨®rmulas para que reciban la ayuda, sea por el lado del gasto o de los ingresos. Es decir, con esquemas que se concreten v¨ªa impuestos, por ejemplo en el IRPF, o a trav¨¦s de acreditaciones o cheques.

M¨¢s de 4.000 millones

La subvenci¨®n de 20 c¨¦ntimos el litro de carburante es una de las iniciativas m¨¢s onerosas para las arcas p¨²blicas que el Gobierno ha activado para paliar la espiral inflacionista. Un informe de la Fundaci¨®n de Estudios de Econom¨ªa Aplicada (Fedea) que vio la luz la semana pasada estima su coste en casi 4.300 millones de euros para este a?o. El estudio critica que el descuento no distinga por renta, lo que termina beneficiando m¨¢s a quien m¨¢s consume (los m¨¢s ricos) y, adem¨¢s, no desincentiva el consumo de energ¨ªa.

Los hogares de menor renta son los m¨¢s vulnerables al aumento de los precios, porque la renta que destinan al consumo de energ¨ªa y alimentos es, en proporci¨®n, superior a la que emplean los que tienen mayores ingresos. Representan, adem¨¢s, el colectivo que m¨¢s dificultades encuentra para cambiar sus h¨¢bitos. Un reciente an¨¢lisis de la Autoridad Fiscal (Airef) evidencia c¨®mo las medidas que act¨²an sobre los precios de la energ¨ªa, implementadas a trav¨¦s de los sucesivos decretos anticrisis, benefician m¨¢s a los hogares de m¨¢s ingresos. En particular, la rebaja del IVA sobre el gas y la bonificaci¨®n al consumo de combustible se concentran m¨¢s entre las rentas altas.