La inversi¨®n espa?ola en para¨ªsos fiscales se dispar¨® el a?o de la covid

?Qu¨¦ tienen en com¨²n unas playas paradis¨ªacas en medio del Atl¨¢ntico, castillos medievales y praderas de color verde intenso? M¨¢s de lo que parece: representan a algunos de los territorios de bajos impuestos donde la inversi¨®n procedente de Espa?a se dispar¨® en 2020, el a?o de la pandemia. Los flujos brutos dirigidos hacia los para¨ªsos fiscales propiamente dichos, como las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas o las Bermudas, se duplicaron. El repunte fue del 131%. Tambi¨¦n crecieron con fuerza los movimientos hacia los vecinos Luxemburgo, Pa¨ªses Bajos o Irlanda, considerados ¡ªa efectos pr¨¢cticos y no pol¨ªticos o legales¡ª refugios fiscales en el coraz¨®n de la UE y entre los mayores destinatarios habituales de inversi¨®n bruta espa?ola.

Estas operaciones est¨¢n recogidas en la base de datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo relativa a inversi¨®n extranjera bruta con destino u origen en Espa?a. Pese al fuerte incremento porcentual, los importes que acaban en los para¨ªsos fiscales oficiales son exiguos: 221 millones en 2020 frente a un total de 28.592 millones. El territorio donde m¨¢s crecieron fueron las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas, que acapararon m¨¢s del 70% de los flujos hacia estas jurisdicciones en el ejercicio pand¨¦mico, al quintuplicar su importe. Siempre en el Atl¨¢ntico, en una ubicaci¨®n a¨²n m¨¢s remota, las Bermudas vieron triplicar las inyecciones procedentes de Espa?a en el mismo periodo.

Pese a la mala fama de los para¨ªsos fiscales, epicentros recurrentes de grandes esc¨¢ndalos de blanqueo de capitales y evasi¨®n fiscal de empresas y particulares, los movimientos recogidos en la estad¨ªstica del ministerio son del todo legales. Invertir o mudarse a alguno de estos lugares no supone fraude, aunque la normativa s¨ª establece algunas cautelas, unas reglas ad hoc para garantizar un mayor control sobre la naturaleza de las operaciones que involucran a estas jurisdicciones consideradas de riesgo. Por ejemplo, las empresas espa?olas deben demostrar que cualquier compra o venta constituya una operaci¨®n real hecha a precio de mercado, explica el inspector de Hacienda Jos¨¦ Mar¨ªa Pel¨¢ez. Asimismo, el contribuyente que mueva ah¨ª su residencia fiscal deber¨¢ seguir pagando el IRPF en Espa?a durante cinco a?os.

De hecho, la mayor¨ªa de las empresas del Ibex 35 cuentan con filiales en para¨ªsos fiscales y territorios de tributaci¨®n laxa, como Luxemburgo: eran 744 en 2020, seg¨²n los datos que cada a?o recopila Oxfam Interm¨®n. Banco Santander, ACS, Ferrovial, ArcelorMittal y Repsol son las compa?¨ªas que m¨¢s presencia ten¨ªan en estas jurisdicciones, aunque a?o tras a?o la van reduciendo.

¡°En estos casos [las inversiones reflejadas por el ministerio] no hablamos de fraudes, sino de inversiones que se canalizan a trav¨¦s de esos territorios¡±, explica Pel¨¢ez. Y hay razones para ello. Por ejemplo, la compra de deuda p¨²blica espa?ola desde para¨ªsos fiscales est¨¢ exenta de pagar impuestos por los rendimientos. ¡°Otras veces, estos territorios se usan para que se pierda el rastro de los aut¨¦nticos inversores¡±, a?ade. Sospecha que parte del crecimiento de los flujos hacia Luxemburgo pueda estar vinculado al endurecimiento, introducido con la nueva ley contra el fraude fiscal, para que las sicavs (sociedades de inversi¨®n colectiva) accedan a ventajas fiscales. ¡°Pero es muy dif¨ªcil saber qu¨¦ hay detr¨¢s. El dinero siempre es muy miedoso. En ¨¦pocas de crisis, de incertidumbre, busca sitios seguros¡±.

Josefa Vega, profesora en la Universidad de Valladolid, apunta a que el fuerte repunte de flujos brutos hacia las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas o las Bermudas en 2020 est¨¢ probablemente asociado a operaciones puntuales. ¡°Una inversi¨®n concreta a trav¨¦s de una ETVE [entidad de tenencia de valores extranjeros, una herramienta fiscalmente ventajosa para atraer a multinacionales a Espa?a, que se qued¨® en desuso con la aparici¨®n de esquemas m¨¢s favorables en el extranjero]. Adem¨¢s, puede que acabe en otro pa¨ªs. En cualquier caso, no se trata de una inversi¨®n productiva, y supone una peque?ez sobre el total. Mucho m¨¢s importante es lo que ocurre con las inversiones en Luxemburgo o Pa¨ªses Bajos, que muchas veces no se quedan ah¨ª, sino se van a otros lugares¡±.

Refugios europeos

Luxemburgo fue el pa¨ªs que en 2020 recibi¨® m¨¢s inversi¨®n espa?ola: 5.000 millones de flujos brutos, un repunte del 400% que el ministerio achaca, en su informe anual, a dos grandes operaciones de empresas energ¨¦ticas. Esta cifra no incluye las operaciones ETVE, que en conjunto aumentaron un 92% en el a?o de la pandemia y que en el caso del Gran Ducado elevan el importe hasta los 6.300 millones. La cifra en 2021 se redujo, en l¨ªnea con la ca¨ªda generalizada de las inversiones (un 37%). Le siguen Estados Unidos, Reino Unido y Panam¨¢. Pa¨ªses Bajos est¨¢ en sexto lugar; Irlanda, aunque no est¨¦ en el top ten, ha experimentado un aumento del 121% en 2020.

Estos importes se refieren al pa¨ªs donde desembarca la inversi¨®n, y no es posible saber si el dinero sigue despu¨¦s su recorrido hacia otro lugar. Este ejercicio s¨ª se puede hacer al rev¨¦s, con los flujos que llegan desde el extranjero: Luxemburgo, en contraste con a su diminuto tama?o, fue el pa¨ªs que m¨¢s invirti¨® en Espa?a en 2020. Si se analizan los pa¨ªses de origen ¨²ltimo de la inversi¨®n, cae sin embargo al puesto 19; Estados Unidos, sede de las principales multinacionales del mundo, salta en cambio a la primera posici¨®n. ¡°Hay pa¨ªses usados como intermediarios, que hacen de puente¡±, explica Rafael Myro, catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid.

En otras palabras: casi toda la inversi¨®n bruta que lleg¨® a Espa?a desde el Gran Ducado en el a?o de la covid proced¨ªa de un tercer lugar. Algo parecido ocurri¨® con los Pa¨ªses Bajos. ¡°Estas magnitudes evidencian claramente el atractivo y la importancia que tienen estas jurisdicciones en las cadenas de inversi¨®n multinacionales a la hora de vehicular la inversi¨®n directa hacia sus destinos finales¡±, se?ala un art¨ªculo del Banco de Espa?a sobre la inversi¨®n extranjera directa en 2019.

No es casual que ambos pa¨ªses, junto con Irlanda, sean los art¨ªfices de algunos de los esquemas fiscales m¨¢s ventajosos de Europa y del mundo para atraer a grandes corporaciones. Y todo ello sin ser considerados oficialmente para¨ªsos fiscales. Uno de los tinglados m¨¢s famosos es el doble irland¨¦s ¡ªahora supuestamente prohibido¡ª: una empresa de Dubl¨ªn factura los ingresos generados en todos los mercados donde opera y luego transfiere el grueso de los beneficios a la sociedad due?a de los derechos de propiedad intelectual, casualmente situada en un para¨ªso fiscal con el cual Irlanda tiene un convenio. Otras famosas artima?as usadas por las multinacionales son el s¨¢ndwich holand¨¦s, los tax ruling y los reg¨ªmenes fiscales de Chipre y Malta. En todo caso, estratagemas que la comunidad internacional est¨¢ intentando cerrar con unas nuevas reglas fiscales que no se basen solo en la presencia f¨ªsica en el territorio.

Seg¨²n el estudio The Missing Profits, las multinacionales desv¨ªan cada a?o el 40% de sus beneficios a territorios de baja o nula tributaci¨®n, sobre todo a pa¨ªses miembros de la UE. ¡°Luxemburgo y Pa¨ªses Bajos se sit¨²an la mayor¨ªa de los a?os entre los primeros inversores en Espa?a [entre 2018 y el tercer semestre de 2022 fueron el quinto y el tercero, respectivamente], y a la vez destinatarios de la inversi¨®n espa?ola. Pero la inversi¨®n no siempre tiene su origen ¨²ltimo en esos pa¨ªses. En el caso de los flujos enviados es a¨²n m¨¢s dif¨ªcil saber cu¨¢l es su destino final¡±, concluye Vega.