El cerebro de la plataforma de criptomonedas FTX, culpable de siete cargos de fraude y conspiraci¨®n
Bankman-Fried enfrenta una pena m¨¢xima de 110 a?os de c¨¢rcel como responsable de un agujero de 10.000 millones de d¨®lares en la bolsa de criptodivisas, que provoc¨® su quiebra hace un a?o
Un veredicto en tiempo r¨¦cord. La culpabilidad de Sam Bankman-Fried, fundador de la plataforma de criptomonedas FTX, parec¨ªa tan cantada que el jurado ha tardado este jueves s¨®lo cinco horas en declararle culpable de un fraude masivo por el colapso de la compa?¨ªa, ahora hace un a?o. El juicio tambi¨¦n fue r¨¢pido, de apenas un mes, gracias en parte a que sus tres colaboradores m¨¢s cercanos en la empresa, entre ellos su exnovia y responsable del fondo de cobertura Alameda Research, optaron por colaborar con la justicia y declarar contra el desgraciado gur¨² de las criptomonedas.
SBF, las iniciales por las que se le conoce, ha sido declarado culpable de siete cargos de fraude y conspiraci¨®n por los que puede ser condenado a una pena m¨¢xima de 110 a?os de c¨¢rcel, menos de 24 horas despu¨¦s de que los abogados de las partes presentaran sus alegatos finales. El jurado rechaz¨® la l¨ªnea de defensa argumental del californiano, de 31 a?os, seg¨²n la cual no estaf¨® a nadie y por eso rechazaba su culpabilidad, si bien en su declaraci¨®n, el pasado viernes, admiti¨® errores de gesti¨®n. SBF estaba interno en una atestada c¨¢rcel de Manhattan desde agosto, cuando el juez Lewis Kaplan revoc¨® la libertad condicional de la que gozaba, bajo fianza de 250 millones de d¨®lares, por intentar influir en posibles testigos del juicio y filtrar a la prensa parte de esas comunicaciones.
El espectacular ascenso y ca¨ªda del fundador de FTX como gur¨² de las criptomonedas, con creciente presencia p¨²blica e incluso pol¨ªtica -intent¨® ganar influencia en Washington financiando a candidatos de ambos partidos y coquete¨® con la idea de una posible carrera a la presidencia- toc¨® fondo definitivamente este jueves, al ser declarado culpable de estafar al menos 10.000 millones de d¨®lares a clientes e inversores. Caroline Ellison, su exnovia y testigo estrella de la acusaci¨®n, declar¨® que Alameda tom¨® varios miles de millones de d¨®lares de dinero de los clientes de FTX y lo utiliz¨® para sus propias inversiones y para pagar las deudas que ten¨ªa. Tambi¨¦n para sufragar los excesos de una vida de lujos en la que Bankman, seg¨²n la biograf¨ªa de Michael Lewis publicada con ocasi¨®n del juicio, era incapaz de nombrar a tres de sus lugartenientes en la firma, dado que los contrataba s¨®lo para firmar documentos a cualquier hora del d¨ªa (o de la madrugada).
Bankman declar¨® tres d¨ªas en el estrado que nunca cometi¨® fraude ni tuvo intenci¨®n de enga?ar a los clientes mientras estuvo al frente de FTX, la segunda bolsa de criptomonedas m¨¢s grande del mundo. El informe de los administradores, sin embargo, refleja una realidad muy distinta: que los directivos bromeaban sobre c¨®mo perd¨ªan la pista a millones de d¨®lares y que que la ca¨ªda de la firma de criptomonedas se debi¨® a ¡°la arrogancia, incompetencia y codicia¡± de un grupo de emprendedores veintea?eros encerrados en una casa de 30 millones de d¨®lares en las Bahamas, la sede de FTX.
¡°Sus delitos le han alcanzado. Sus delitos han quedado al descubierto¡±, declar¨® la fiscal federal adjunta Danielle Sassoon al jurado sobre la huida hacia adelante del otrora multimillonario justo antes de que el juez Kaplan les leyera la ley y dieran comienzo las deliberaciones. Sassoon afirm¨® que Bankman-Fried convirti¨® las cuentas de sus clientes en su ¡°hucha personal¡±, ya que desaparecieron hasta 14.000 millones de d¨®lares.
Inst¨® a los miembros del jurado a rechazar la insistencia de Bankman-Fried cuando testific¨® de que nunca cometi¨® fraude ni conspir¨® para robar a clientes, inversores y prestamistas y que no se dio cuenta de que sus empresas estaban endeudadas en al menos 10.000 millones de d¨®lares hasta octubre de 2022, un mes antes de que se declarara en quiebra. Para el fiscal federal Damian Williams, el fundador de FTX, hijo de dos profesores de Leyes de la Universidad de Stanford, protagoniz¨® uno de los mayores fraudes de la historia de Estados Unidos. El proceso puso el foco en la emergente y poco regulada industria de las criptodivisas y en el grupo de j¨®venes emprendedores veintea?eros que cohabitaban en una lujosa mansi¨®n en las Bahamas mientras so?aban con convertirse en actores protagonistas de un nuevo nicho de las finanzas.
El juicio suscit¨® tambi¨¦n un gran inter¨¦s al centrarse en un fraude de una magnitud nunca vista desde el procesamiento en 2009 de Bernard Madoff, cuyo esquema Ponzi estaf¨® durante d¨¦cadas a miles de inversores por valor de unos 20.000 millones de d¨®lares. Madoff se declar¨® culpable y fue condenado a 150 a?os de c¨¢rcel, donde muri¨® en 2021.
El veredicto alcanzado hoy en el tribunal federal de Manhattan pone punto final al ruidoso colapso de FTX. Extraditado en noviembre pasado a EE UU desde Bahamas, SBF es un ejemplo m¨¢s de rey midas tecnol¨®gico ca¨ªdo en desgracia, como Elizabeth Holmes, fundadora de Theranos. Ambos comparten otra circunstancia, adem¨¢s de sendas penas de c¨¢rcel (la de Bankman, a¨²n por determinar por el juez): decidieron, en contra de la opini¨®n de sus abogados, testificar en sus respectivos juicios para remontar campa?as de imagen adversas, pero no le fue bien a ninguno de ellos por la acumulaci¨®n de evidencias en contra.
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