?Qu¨¦ es lo peor del trabajo? ¡°Echar 13 horas al d¨ªa¡±; ¡°tener que tomar analg¨¦sicos antes de entrar¡±; ¡°el estr¨¦s¡±
Los manifestantes del Primero de Mayo se?alan la peor parte del mundo laboral, seg¨²n sus experiencias
El lema elegido por los sindicatos para este Primero de Mayo es ¡°por el pleno empleo: menos jornada, mejores salarios¡±. El escaso cumplimiento de esos objetivos despierta muchas quejas entre los trabajadores, pero hay muchos otros asuntos que les irritan. Hemos preguntado a manifestantes de las principales protestas en Madrid y Barcelona qu¨¦ es lo peor del trabajo, lo que m¨¢s les ha hecho sufrir en su carrera laboral. Estas son algunas de sus respuestas.
@elpais Los manifestantes del 1 de mayo nos cuentan qu¨¦ es lo peor del trabajo, desde ¡°echar 13 horas al d¨ªa¡± a ¡°tener que tomar analg¨¦sicos antes de entrar¡±. #trabajo #empleo #diadeltrabajador #diainternacionaldeltrabajo #problemaslaborales #noticias #news #1demayo #primerodemayo
? sonido original - El Pa¨ªs
Patricia Voznya y Rosa Fierro, camareras de piso: ¡°Lo peor es el estr¨¦s¡±
Patricia Voznya trabaja limpiando habitaciones de hotel. ¡°Exige mucho esfuerzo f¨ªsico¡±, dice a sus 44 a?os, ¡°cansada¡± del ritmo tan alto que le imponen sus empleadores. ¡°Lo peor es el estr¨¦s, nos perjudica mucho. Hay cada vez m¨¢s bajas, son continuas. Esperan m¨¢s de nosotras y en menos tiempo¡±. Es un problema estructural del sector, uno de los que m¨¢s accidentes laborales concentra. ¡°Hacemos movimientos muy repetitivos, que hacen mucho da?o al cuerpo¡±. A su compa?era Rosa Fierro (59 a?os) esos esfuerzos le han dado problemas ¡°en las rodillas, de articulaciones, en las manos, en las mu?ecas... Me est¨¢ perjudicando mucho¡±. Teme ir a peor: ¡°Nos exigen lo mismo que a una persona de 30 o 25 a?os. Tendr¨ªan que tener un miramiento, m¨¢s cuidado con las personas de m¨¢s edad, que llevo trabajando desde los 16. Yo quiero trabajar, no quiero estar en mi casa¡±.
Charli Giraldo y Francisco Rodr¨ªguez, camareros: ¡°Hay que tirar de analg¨¦sicos para aguantar¡±
Charli Giraldo (46 a?os) acude a la manifestaci¨®n de Madrid con Patricia, con la que comparte buena parte de sus reflexiones. ¡°Lo peor es la alta intensidad de mi trabajo¡±, dice este camarero. ¡°El sector est¨¢ pidiendo a gritos una jubilaci¨®n espec¨ªfica como la de otros sectores, como la polic¨ªa, porque no llegamos. Vamos de baja en baja, llegamos arrastr¨¢ndonos¡±. Ese desgaste f¨ªsico conduce a la automedicaci¨®n de muchos empleados: ¡°Hay gente que lo lleva con verg¨¹enza, pero hay que tirar de analg¨¦sicos para calmar las lesiones. Muchos, antes de empezar la jornada, se toman por lo menos un paracetamol, y digo por lo menos, por no hablar de ansiol¨ªticos¡±. Por estas razones, Charli cree que la hosteler¨ªa es ¡°la esclavitud del siglo XXI; genera muchos ingresos, pero para muy pocos¡±. Le acompa?a Francisco Rodr¨ªguez (61 a?os), que lamenta las dificultades para que las bajas derivadas de estos esfuerzos f¨ªsicos se reconozcan como profesionales. ¡°Creo que en mi trabajo cada vez hay m¨¢s estr¨¦s. Ha subido mucho el trabajo y eso no se nota nada en aumentos de plantilla¡±.
Magda Jim¨¦nez, fisioterapeuta en una mutua: ¡°He aguantado los mismos recortes que la sanidad p¨²blica, pero ning¨²n beneficio¡±
Tiene 37 a?os y desde hace ocho trabaja para una mutua de trabajo. Magda Jim¨¦nez apenas se lo piensa cuando se le pregunta qu¨¦ ha sido lo peor en su etapa como trabajadora: ¡°No sentirme valorada¡±. Fisioterapeuta, lo dice sobre todo porque su puesto de trabajo juega en desigualdad de condiciones con otros similares con contrato de trabajo en otros servicios p¨²blicos. ¡°Los trabajadores de las mutuas de trabajo hemos tenido que aguantar los mismos recortes que los otros servicios p¨²blicos, pero ninguna de sus ventajas¡±, se?ala Jim¨¦nez, acompa?ada por otras tres empleadas de su empresa. ?Por qu¨¦? Porque su empleo est¨¢ ligado al sector de los seguros, dice, pese a trabajar para una instituci¨®n que se alimenta de las cotizaciones sociales que pagan las empresas. ¡°Si estoy aqu¨ª es para luchar por mis compa?eros de las mutuas y se vea nuestra realidad y se nos trate con dignidad¡±.
Manuel Portero y Clara Buigues, empleados en supermercados: ¡°Lo peor es echar muchas horas¡±
A sus 21 a?os Manuel Portero ya sabe lo que es trabajar m¨¢s horas de las pactadas. ¡°He trabajado en supermercado y en restaurantes y lo peor es echar muchas horas con poco sueldo, cobrando poco. He tenido d¨ªas que pensaba que iba a trabajar ocho horas y luego han sido 13 o 14¡å. En su experiencia, en los supermercados al menos cobraba las horas extra, ¡°pero en hosteler¨ªa no suelen pagarlas¡±. Est¨¢ en la protesta junto a Clara Buigues (19 a?os), especialmente molesta por el trato de algunos clientes en los supermercados donde ha trabajado: ¡°Te tratan mal, no te hablan bien. No empatizan contigo¡±. De momento est¨¢n estudiando y estos empleos han sido temporales, por los que han recibido salarios que ¡°ni mucho menos¡± les permitir¨ªan independizarse. ¡°Ser¨ªa imposible en Madrid¡±, dice Manuel.
Flora Carre?o, jubilada que trabaj¨® en comercio: ¡°La peor parte fue cuando empezamos a abrir los domingos¡±
Flora Carre?o (74 a?os) trabaj¨® toda su vida en una gran superficie comercial. Cree que la peor ¨¦poca de su carrera profesional lleg¨® justo al final, coincidiendo con la liberalizaci¨®n de los horarios comerciales. ¡°Fue cuando empezaron a abrir los domingos. Al principio era para quien quisiera [hace el gesto de las comillas] y te daban 10.000 pesetas. Luego ya fue obligado y no te daban m¨¢s que un d¨ªa libre¡±. Considera que este sistema, que encuentra su m¨¢ximo exponente en la Comunidad de Madrid, ¡°es injusto¡±. ¡°No entiendo abrir por abrir en domingo; es mejor que los trabajadores tengan m¨¢s derechos, que tambi¨¦n tienen familias¡±.
Jos¨¦ Murcia, empleado en un supermercado: ¡°Lo peor fue cuando me degradaron de mis funciones¡±
Jos¨¦ Murcia (44 a?os) es un empleado de una gran cadena de supermercados. Tiene muy fresco cu¨¢l fue su peor momento en su ya dilatada carrera profesional. ¡°Cuando me degradaron de mis funciones¡±, se?ala, quit¨¢ndole las atribuciones que ten¨ªa como encargado para ponerlo de reponedor en la misma empresa, al considerar que ya no cumpl¨ªa con las condiciones para seguir en ese cargo, aunque manteniendo las mismas condiciones salariales. Su abogado le aconsej¨® que no reclamara, aunque s¨ª lo hizo cuando le cambiaron el puesto de trabajo de su tienda a otra que lo alejaba una hora de su casa. Consigui¨® volver.
Javier Ram¨ªrez, empleado industrial y profesor: ¡°Se tiene que cumplir lo pactado¡±
Ya jubilado, Javier Ram¨ªrez (66 a?os) recuerda con rabia cuando sus empleadores no respetaban las condiciones laborales pactadas. ¡°Los convenios colectivos muchas veces no se cumplen. Se sub¨ªan los sueldos en funci¨®n de que las personas no generasen ning¨²n conflicto, y nunca me he caracterizado por ello. La falta de negociaci¨®n colectiva lo hace muy dif¨ªcil¡±. Considera importante que haya una red potente de inspectores de trabajo que haga cumplir la legislaci¨®n laboral, para que no pase lo que recientemente sufri¨® su hija: ¡°Estaba en una empresa con un sistema que no te permit¨ªa fichar m¨¢s de ocho horas, aunque echaba 12. Lleg¨® un momento que le dije: ¡®O denuncias t¨² o denuncio yo¡¯¡±.
Sonia Rodr¨ªguez, trabajadora de una empresa textil: ¡°Es imposible saber qu¨¦ va a ser de nuestros empleos el d¨ªa de ma?ana¡±
Sonia Rodr¨ªguez (53 a?os) cree que tiene suerte. ¡±Ni en mi familia ni en mi c¨ªrculo de conocidos hay ning¨²n parado¡±, dice, pero es consciente de que la fortuna no sigue a todo el mundo y que hay familias con un gran n¨²mero de sus miembros en el paro. De hecho, cree que todo depende de c¨®mo caiga el dado de la vida y que ¡°es imposible saber qu¨¦ va a ser de nuestros empleos el d¨ªa de ma?ana¡±. Pese a la necesidad que ve en el hecho de manifestarse el 1 de mayo, esta trabajadora del textil considera que el ¡°cansancio¡± existente entras las clases trabajadoras explica la poca presencia de personas en la manifestaci¨®n de Barcelona. Lo que m¨¢s le ha molestado ¡°en algunas empresas en las que he trabajado¡± ha sido ¡°el trato, aunque es cierto que cada vez pasa menos¡±: ¡°La flexibilidad, la preferencia por los hombres, la brecha salarial¡¡±.
V¨ªctor Saavedra, instalador de gas: ¡°Las leyes dificultan el trabajo a los inmigrantes¡±
Uno de los principales problemas del mercado laboral espa?ol, en opini¨®n de V¨ªctor Saavedra (62 a?os), son las barreras que encaran los inmigrantes para conseguir el permiso de trabajo o para homologar sus t¨ªtulos. ¡°Las leyes laborales siempre nos han dificultado el trabajo. Desde que llegu¨¦ a Espa?a, hace m¨¢s de 30 a?os, son un escollo para poder incorporarse al mercado laboral y trabajar en las condiciones que todo el mundo requiere¡±. Tambi¨¦n lamenta que los salarios sean ¡°escasos¡±: ¡°Los sueldos son baj¨ªsimos en comparaci¨®n con el trabajo que se realiza. Es el problema que siempre ha habido y habr¨¢¡±.
Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.