La hora de los metales preciosos: c¨®mo invertir en oro y plata
Las cotizaciones se ven beneficiadas por su car¨¢cter de activos refugio en un entorno econ¨®mico y pol¨ªtico lleno de incertidumbres
Los metales preciosos siempre han engatusado a los inversores por su condici¨®n de refugio cuando las cosas viene mal dadas. En un entorno como el actual, con crecimiento econ¨®mico pero plagado de incertidumbres, estos activos han vuelto a brillar en el mercado. Tras tocar m¨¢ximos anuales en mayo pasado, su cotizaci¨®n se ha desinflado algo, pero en la mayor¨ªa de los casos las revalorizaciones acumuladas desde enero siguen siendo jugosas. El oro, por ejemplo, ofrece una subida del 14.35%, la plata se apunta un 28.62% y el platino un 3%. El paladio, en cambio, anda algo m¨¢s flojo y su precio retrocede un 15,29%. El buen comportamiento generalizado de esta categor¨ªa de activos tiene su reflejo en la inversi¨®n colectiva: los fondos de inversi¨®n especializados en el sector denominado ¡°oro y metales preciosos¡±, seg¨²n la categor¨ªa de Morningstar, suman, en muchos casos, ganancias en los tres ¨²ltimos meses por encima del 10%, superando alguno de ellos el 15%.
Los expertos vinculan estos movimientos en torno a los metales preciosos b¨¢sicamente con el efecto contagio por la buena evoluci¨®n de oro. Este aprovecha su condici¨®n de ¡°activo refugio¡± en tiempos de endeudamiento y d¨¦ficits elevados por parte de la mayor parte de los Estados, de tensiones geopol¨ªticas e incertidumbre sobre la pol¨ªtica monetaria. Como son problemas de dif¨ªcil soluci¨®n a corto plazo, los analistas destacan que el oro a¨²n guarda potencial, por lo menos hasta 2025, aunque con alg¨²n peque?o matiz.
James Luke, gestor de fondos especializado en materias primas en Schroders, ve totalmente plausible que la tensa din¨¢mica actual entre las potencias desarrolladas y el poder emergente, combinada con la fragilidad fiscal que se cierne no solo sobre la moneda de reserva que emite EE UU, el d¨®lar, sino sobre todo el bloque econ¨®mico desarrollado, ¡°pueda desencadenar un movimiento sostenido hacia el oro¡±. A su juicio, el mercado de este metal precioso no es lo bastante grande como para absorber esta potencial demanda sin que suban mucho los precios, sobre todo si otros actores mundiales tambi¨¦n intentan entrar m¨¢s o menos al mismo tiempo. Asimismo, Luke extiende su optimismo al respecto: ¡°No es exagerado decir que el sector de la miner¨ªa del oro podr¨ªa subir un 50% y seguir pareciendo barata¡±. En su opini¨®n, si alguna vez ha llegado el momento de incluir la renta variable de oro en una asignaci¨®n plurianual de metales preciosos ¡°es ahora¡±.
Para los responsables de Wisdom Tree no solo los elevados riesgos geopol¨ªticos (guerras en Ucrania y Oriente Pr¨®ximo) alimentan el sentimiento positivo hacia el oro. Tambi¨¦n los procesos electorales a los que la mitad de la poblaci¨®n ha sido llamada a participar o lo ser¨¢ en los pr¨®ximos meses. A su entender, el oro es a menudo un bar¨®metro de la satisfacci¨®n (o falta de ella) de los resultados pol¨ªticos. ¡°Las compras al por menor, en particular, pueden aumentar en ¨¦pocas de insatisfacci¨®n con los resultados electorales¡±.
Seg¨²n su modelo de valoraci¨®n, en un escenario de consenso, el oro alcanzar¨¢ los 2.500 d¨®lares onza en el primer trimestre de 2025 (actualmente cotiza en 2.358 d¨®lares). En un escenario alcista ¡ªen el que la inflaci¨®n permanecer¨ªa estancada en niveles elevados, pero la Reserva Federal se ver¨ªa forzada a iniciar su ciclo de recortes en los tipos de inter¨¦s¡ª, los expertos de esta gestora se?alan que el oro podr¨ªa alcanzar los 2.750 d¨®lares por onza en el primer trimestre de 2025. En un su estimaci¨®n m¨¢s bajista ¡ªen la que la Reserva Federal se mostrar¨ªa reacia a recortar los tipos, la inflaci¨®n cae m¨¢s de lo previsto, el d¨®lar estadounidense se aprecia y los rendimientos de los bonos no caen tanto como el consenso espera actualmente¡ª, el oro podr¨ªa caer hasta los 1.910 d¨®lares en el segundo trimestre de 2024 antes de volver a subir hasta los 2.030 d¨®lares en el primer trimestre de 2025.
Rodrigo Cebri¨¢n, director de inversiones de Edmond de Rothschild banca privada en Espa?a, reconoce estar sorprendido porque, ¡°en un movimiento at¨ªpico, los tipos de inter¨¦s, el d¨®lar y el oro se han movido en direcci¨®n alcista especialmente en los ¨²ltimos meses, rompiendo la descorrelaci¨®n tradicional¡±. A su juicio, este movimiento ¡°podr¨ªa venir mayormente soportado por una compra acelerada por grandes tenedores, como bancos centrales; un miedo al impacto del alto d¨¦ficit fiscal de EE UU y su impacto sobre la deuda y, por lo tanto, un cambio de papeles de deuda de Estado por oro, generando tambi¨¦n un proceso de desdolarizaci¨®n de las econom¨ªas¡±. Seg¨²n sus an¨¢lisis, a nivel t¨¦cnico, el oro podr¨ªa superar con holgura los 2.450 d¨®lares y abre incluso la posibilidad de que toque los 2.650 d¨®lares. ¡°Desde aqu¨ª¡±, afirma, ¡°los 2.850 d¨®lares por onza ser¨ªan alcanzables si hay m¨¢s participantes en esta tendencia [inversores institucionales o retails que se unen a la demanda]¡±.
Para Jacques Hirsch, cogestor del Carmignac Portfolio Patrimoine Europe, no solo ha habido en estos meses una importante demanda de oro por parte de los bancos centrales que buscan diversificar sus reservas alej¨¢ndolas del d¨®lar. Tambi¨¦n han jugado un papel relevante los inversores chinos minoristas, ¡°que han tratado de diversificar su patrimonio, alej¨¢ndolo del sector inmobiliario y, en menor medida, de las acciones¡±. En su opini¨®n, si a esto se une la situaci¨®n de incertidumbre europea, sobre todo con el giro a la derecha en las ¨²ltimas elecciones europeas, es posible que ¡°el oro siga obteniendo buenos resultados¡±.
Gran liquidez
Michaela Huber, estratega de Vontobel Boutique, a?ade otro factor a considerar a la hora de hacer previsiones sobre la evoluci¨®n del precio del oro. A su juicio, depender¨¢ efectivamente de la demanda de los bancos centrales, de las expectativas de los mercados sobre la futura pol¨ªtica de la Reserva Federal, pero tambi¨¦n del car¨¢cter de ¡°activo refugio¡± del oro. Desde su punto de vista, los mercados parecen preocupados por la enorme cantidad de liquidez en el sistema y ello les lleva a acudir ¡°en masa a las reservas de valor alternativas¡±. Una de ellas el oro, pero tambi¨¦n el bitcoin, ¡°que si normalmente eran considerados competidores, ahora parecen estar hermanados¡±.
V¨ªctor Alvargonz¨¢lez, director de estrategia de la firma de asesoramiento financiero Nextep Finance, es consciente de que el precio del oro est¨¢ subiendo por la presi¨®n de los bancos centrales de algunos pa¨ªses como Rusia o China, ¡°probablemente porque no quieren depender tanto del d¨®lar¡±, pero tambi¨¦n por el miedo que genera la masiva emisi¨®n de deuda p¨²blica en EE UU y Europa. En este caso, ¡°el oro se dibuja como una buena protecci¨®n en caso de una crisis de deuda¡±, asegura. Aunque sus perspectivas de precio son alcistas de aqu¨ª a fin de a?o, Alvargonz¨¢lez no puede evitar se?alar que, a veces, ¡°la gente no es consciente de que el oro es un activo vol¨¢til, por lo que si est¨¢ en carteras conservadoras debe ser de forma muy estable y a largo plazo, como un seguro frente a la inflaci¨®n y los conflictos geopol¨ªticos¡±.
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