Universidades planea un vuelco en los campus: pondr¨¢ coto a los falsos asociados y habr¨¢ catedr¨¢ticos no funcionarios

El Ministerio de Universidades planea dar un gran vuelco en la organizaci¨®n de los campus p¨²blicos. Los aspirantes a un puesto fijo de profesor tendr¨¢n una v¨ªa alternativa a la de funcionario, la del contrato laboral indefinido, si sale adelante la propuesta plasmada en un borrador de Estatuto del Personal Docente e Investigador (PDI) redactada por el ministerio y a la que ha tenido acceso EL PA?S. El proyecto, que requiere la reforma de la ley de Universidades, crea las figuras de profesor titular y catedr¨¢tico contratado con las mismas condiciones y requisitos de entrada que sus hom¨®logos funcionarios, consolidando y fortaleciendo una doble v¨ªa de acceso laboral a la Universidad sobre la que se lleva largo tiempo discutiendo. Ya la propuso, sin ¨¦xito, hace algo m¨¢s de un lustro el comit¨¦ de expertos del ministro de Educaci¨®n del PP Jos¨¦ Ignacio Wert, y los campus p¨²blicos de Catalu?a y el Pa¨ªs Vasco llevan a?os experimentando con esta v¨ªa de acceso no funcionarial.

El proyecto contempla la eliminaci¨®n de las categor¨ªas de profesor ayudante y de profesor ayudante doctor, y establece unos severos requisitos para ejercer como docente asociado, la figura creada para que los profesionales m¨¢s destacados de distintos sectores econ¨®micos y sociales pudieran aportar su experiencia a las ense?anzas superiores, pero que se ha pervertido con la anterior crisis hasta convertirse en una puerta falsa de entrada precaria a la docencia universitaria. Actualmente, hay algo m¨¢s de 5.000 ayudantes y profesores ayudantes doctor y m¨¢s de 33.000 asociados trabajando en los campus, para los que el proyecto prev¨¦ un periodo de adaptaci¨®n a la nueva norma. Por otra parte, se crea una nueva figura de profesor doctor, con contrato temporal y dedicaci¨®n completa, que se asemejar¨ªa m¨¢s bien en sus condiciones a las de los actuales ayudantes doctores, obligar¨ªa sin embargo a las universidades a convocar plazas para estabilizar su situaci¨®n despu¨¦s de cinco a?os. Estos cambios no afectar¨ªan, en todo caso, a la situaci¨®n de los 11.000 contratados doctores ya asalariados, que gozan de un puesto indefinido en la Universidad.

La propuesta permite seguir contratando como profesores, aunque ¡°de forma transitoria y limitada en el tiempo¡±, a titulados superiores que todav¨ªa no hayan conseguido el doctorado. As¨ª, los campus p¨²blicos solo podr¨¢n ofertar este tipo de plazas durante los pr¨®ximos tres a?os y los contratos podr¨¢n durar un m¨¢ximo seis a?os. ¡°La contrataci¨®n de profesoras y profesores contratados/as no doctores/as tendr¨¢ car¨¢cter excepcional y se limitar¨¢ a casos en que no existan en los procesos selectivos personas candidatas que est¨¦n en posesi¨®n del t¨ªtulo de doctor¡±, aclara el texto del proyecto.

El borrador no especifica si ser¨¢n las universidades, las autonom¨ªas o el Estado quien decida c¨®mo se distribuyen entre las dos v¨ªas de carrera profesional las ofertas de plazas. ¡°Se duplican las figuras, dejando que sean las comunidades y cada Universidad la que decida si saca plaza de funcionarios o de laborales¡±, se lamenta Ram¨®n Caballero Klink, secretario de Universidades de la Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF). ¡°Nos ha sorprendido porque no tiene mucho que ver con el documento anterior del ministro Pedro Duque. El proceso de laboralizaci¨®n es un ataque a los funcionarios, crea una carrera paralela laboral incluso en categor¨ªas hasta ahora funcionariales: profesor titular y catedr¨¢tico de universidad¡±. El sindicalista cree que no favorece a los contratados: ¡°No es lo mismo ser indefinido que funcionario. Tienen menos seguridad jur¨ªdica y administrativa y econ¨®mica¡±.

Los rectorados se encuentran con el muro de los sindicatos cuando tratan de hacer un gran fichaje sin atender a las tablas salariales fijadas y buscando vericuetos para pagarles. Un rector, que prefiere mantener el anonimato mientras no madure el proyecto, acoge con m¨¢s optimismo que la CSIF el borrador: ¡°Yo veo bien, razonable, que creen las nuevas figuras. Racionaliza lo que ya se hace, pero cada uno a su manera tirando por donde puede¡±. Aunque encuentra peros: ¡°No entra en los sueldos, en pagar de manera distinta... Y no s¨¦ c¨®mo van a terminar con el problema de los profesores asociados¡±.

Verdaderos asociados

Los profesores asociados van a tener que demostrar que tienen un trabajo principal fuera de la universidad e impartir¨¢n un m¨¢ximo de 60 horas de clase cada curso, cuando ahora en muchos casos superaban las 100 con ¡°un salario frecuentemente por debajo del salario m¨ªnimo¡±, se reconoce en el texto. Isabel de la Cruz, profesora asociada de Sociolog¨ªa en la Universidad de Valencia desde hace m¨¢s de 20 a?os, no oculta su frustraci¨®n con el borrador del ministerio: ¡°Llevamos a?os, a?os y a?os ¨Dtodo el mundo lo sabe¨D trabajando en unas condiciones de precariedad absoluta, llevando adelante una cantidad de docencia brutal¡­ Y, sinceramente, esper¨¢bamos que nos estabilizaran. ?Van a terminar con la precariedad acabando con los precarios? Terminan con el rollo alegal o ilegal pero ?c¨®mo se nos va a posibilitar el ingreso en la universidad? O es simplemente un ¡°gracias por los servicios prestados y adi¨®s. Ha estado muy bien, han sido ustedes muy baratos y ahora estabil¨ªcense como puedan¡±.

La sorpresa de De la Cruz ha sido may¨²scula por la contundencia con la que el ministro Castells se ha manifestado p¨²blicamente en el Congreso y el Senado contra la situaci¨®n de los asociados. El pol¨ªtico ha llegado a decir que cobran ¡°sueldos de miseria¡± y que es ¡°un esc¨¢ndalo, un despilfarro de recursos y un mecanismo de frustraci¨®n¡±. Hay 33.954 profesores bajo esta etiqueta, seg¨²n los ¨²ltimos datos del ministerio, lo que representa el 34,1% de los profesores de las universidades p¨²blicas.

El coto a estos asociados crea un hueco enorme en los horarios de docencia de los departamentos. A la hora de acreditarse para optar a ser funcionarios (un proceso burocr¨¢tico que centraliza la agencia estatal de calidad Aneca) su experiencia docente, si se aprueba el estatuto, va a valer tanto como la investigadora. La asociada Isabel de la Cruz y CSIF aplauden este punto. ¡°El valor de la docencia hay que reconocerlo, porque si t¨² no formas luego no tienes investigadores. Nosotros investigamos, pero como ni tenemos contratos de tres a?os no podemos ser jefes de la investigaci¨®n¡±, explica la profesora precaria.

El secretario del CSIF aguardaba ¡°con impaciencia¡± las pasarelas de las que hablaba el ministro Castells para los asociados y se ha llevado una decepci¨®n. ¡°Pueden permanecer durante tres a?os dando clase ¨Dque es lo normal en las medidas transitorias¨D, pero ?c¨®mo favoreces el paso de asociados a las nuevas figuras? Vuelve a inhibirse y lo deja en manos de las comunidades que podr¨¢n hacer procesos selectivos¡±. El escenario, si no fuese por la crisis econ¨®mica que arrecia, ser¨ªa propicio para que los falsos asociados diesen el salto a un puesto fijo. La Universidad est¨¢ tan envejecida que de 2016 a 2023 va a perder el 16,76% de su plantilla: unos 5.400 catedr¨¢ticos, 6.300 profesores titulares y otros 4.500 no funcionarios. Cada a?o quedan vacantes 1.500 plazas y no va a quedar otra que convocar plazas. El temor es volver a crear otro cuello de botella de miles de investigadores aguardando una oportunidad de tener trabajo fijo.

Internacionalizaci¨®n

Las tasas de profesorado extranjero en Espa?a ¨C2,2% del conjunto de las universidades p¨²blicas¨C son baj¨ªsimas si se comparan, por ejemplo, con Reino Unido que multiplica por 10 esa cifra. Y eso ha tenido como consecuencia ¡°una reducida movilidad de su PDI [personal docente e investigador], en detrimento de la necesaria apertura de la Universidad al amplio intercambio de ideas¡±, se razona en el documento. La internacionalizaci¨®n es clave para atraer alumnos extranjeros y aumentar el prestigio de los campus. Por eso, si se aprueba el estatuto, para lograr una plaza de titular el candidato habr¨¢ tenido que investigar en la Universidadal menos nueve meses. Sin embargo, este requisito no se le pedir¨ªa a los catedr¨¢ticos. Hace un lustro la mitad de 5.000 profesores encuestados no hab¨ªan estado en el extranjero m¨¢s de tres meses.

El borrador de estatuto crea tambi¨¦n la figura de profesor extraordinario para poder traer profesionales de fuera sin cortapisas burocr¨¢ticas con un contrato de hasta de cinco a?os. ¡°La mayor¨ªa del talento de los 30 a los 45 a?os est¨¢ fuera de Espa?a, si pones el cauce para que vuelvan pero no el dinero no hay nada que hacer¡±, advierte el rector. En 2017, seg¨²n datos de la agencia gubernamental de evaluaci¨®n ANECA, solo 20 docentes de universidades de la UE se certificaron para ejercer en Espa?a por la v¨ªa espec¨ªfica prevista para ello. El 40% de los extranjeros se concentran en Catalu?a ¡ªla Pompeu Fabra tiene un 15,3% de docentes for¨¢neos¡ª, donde se sit¨²an los campus que lideran los rankings espa?oles. En esta comunidad hacen un llamamiento internacional para cubrir los puestos, el tribunal es de medio mundo y la Universidadse compromete a no sacar la plaza antes de que todos los interesados hayan podido optar a acreditarse.

Endogamia y transparencia

El 73% de los profesores imparte clase en la Universidaden la que se doctor¨®. Adem¨¢s, el tribunal de una plaza es elegido por el departamento. Endogamia pura. ¡°Uno de los profesores [son tres] podr¨¢ ser propuesto por la Universidady los otros dos ser¨¢n por sorteo estatal sobre el conjunto del profesorado¡±, se afirma en el borrador de estatuto. El problema de base es que una parte grande de las vacantes se ofertan hechas a medida del candidato del departamento, coloquialmente son ¡°plazas con bicho¡±.

Universidades quiere que haya un registro ¨²nico de todas las plazas docentes que se oferten y as¨ª se recoge en el documento, pero ya hace a?o y medio trascendi¨® que organizaba una bolsa de empleo y poco se ha movido. Hoy las vacantes aparecen publicadas en el BOE pero ning¨²n organismo centraliza todas las convocatorias. La Ley Org¨¢nica de reforma Universitaria (RLU, 1983) ya obligaba a informar de las plazas al Consejo de Universidades, y de nuevo la LOU conmin¨® a ello. Pero las universidades hacen o¨ªdos sordos.

Los sindicatos se quejaron hace dos semanas de que no se contase con ellos para redactar el texto en un comunicado conjunto y tambi¨¦n lo ha hecho la Federaci¨®n de J¨®venes Investigadores, que acord¨® con el ministro Pedro Duque el estatuto del personal investigador en formaci¨®n, el EPIF: ¡°Se ha hecho totalmente a espaldas del personal investigador, sin buscar el di¨¢logo y sin evaluar propuestas conjuntamente¡±.

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